Yo soy mexicano, Yo soy Charro

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Había llegado a la casa de mi padrino Isidro y ya había tenido el primer roce con su hijo Adrián, me burle un poco porque a pesar de ser ya un adulto de treinta tanto seguía siendo regañado por su padre como si de un niño se tratase, este se quedó viéndome sorprendido por unos momentos pero su expresión cambio completamente a ser de furia al verme.

— ¡Ahora vete a cambiar y dormir! ¡Hasta yo me siento con resaca con tan solo verte! — Gritó mi padrino enviando al gran niño Adrián a asearse. El machito se levantó del suelo sin siquiera sacudirse y con un ligero gruñido pasó a un lado de mi sin decir nada, ni siquiera mirarme.

— También me alegro de verte de nuevo Adrián. — Me reí un poco mientras él entraba a la casa hecho una furia. Mi padrino al final volteó a verme.

— Siento que te tratara así, está pasando por un momento difícil y Adrián siempre ha sido inestable en situaciones que le causan sensaciones de derrota o parecido.

— No se preocupe padrino, además no crea que me burlo de él por que quiera, si no que he aprendido por vivencias de la escuela que a veces a personas como Adrián se les necesita bajar un poco el orgullo para amansarlos.

— Tal vez tengas razón. — Suspiró cansado el hombre de edad avanzada mientras acomodaba un poco sus cinturón y su sombrero. — Solo no quiero peleas, entiendes.

— Fuerte y claro, padrino. — Sonreí y asentí al viejo hombre quien de igual manera me sonrió. Ambos empezamos a dirigirnos a la camioneta de lujo de mi padrino y nos subimos, él me iba a mostrar todo el terreno que había, estaban dividido en 3 partes los cuales era para distintas cosas. Pero en lo que yo más me iba a involucrar era en la embotelladora y destiladora del tequila De la cruz.

— Aquí solo tenemos un cultivo de 25 hectáreas de agave azul, la fábrica como tal se encuentra un poco más allá del municipio por la carretera a lagos de moreno. Ahí tenemos otro terreno más grande que este que lo utilizamos para la destiladora y embotelladora también tenemos un andén donde tenemos barriles donde se añeja y se reposa tequila.

Mi padrino me estuvo explicando más o menos el negocio, cada año solo sacaban números de lotes determinados ya que debido a que el agave se madura en promedio a los 7 años de ser cultivado, cada año solo se cosecha determinadas toneladas que se convierten en tequila.

Los jimadores que son los que se encargan de la cosecha y partido de "la piña" que es el corazón del agave, son trabajadores que siempre deben de estar atentos al tiempo del agave conforme el año, ya que como su crecimiento es lento, un descuido puede ser causa para que tarde más tiempo en madurar o su nivel de almidón se vean alterados.

Después de explicarme eso, me dijo que después de ser cosechado, la piña pasa a ser tostada en hornos gigantes donde el almidón se convierte en azúcar, el color de la piña cambia y estos después son transportados a una trituradora donde se convierte en fibras que después son aplastadas para extraer el azúcar que se formó con el tostado.

Todo el jugo pasa a ser fermentado con levadura en tanques donde pasa hasta 72 horas fermentando, cuando se fermenta este se calienta por tubería hasta volverse vapor y comenzar con la destilación que da como resultado un concentrado de tequila muy potente. Que después pasa a otros tanques para ser diluido y bajar sus niveles de alcohol, dando como resultado un tequila de 40% puro y el cual se le denomina Tequila Blanco, el cual ya se puede embotellar.

Para el reposado o añejo, se tienen que pasar el tequila blanco a unos barriles de roble, recubiertos por dentro con una capa carbonizada en donde pasan aproximadamente entre 6 y 9 meses intactos, para tener un producto distinto y ese es el tequila reposado, cuando pasa de 1 o más tiempo el tequila pasaba a ser denominado Añejo.

El Charro (Historia LGBTI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora