NADIE TOMA LO MIO

1.9K 129 0
                                    

Harry despertó lentamente. Estaba bocabajo sobre una enorme cama matrimonial. Sintió un peso muerto sobre sus piernas y se le escapo un grito de pánico cuando al girarse vio a una enorme serpiente verde amarillenta con manchas negras acostada sobre sus piernas por lo que lanzo un grito

- No grite mi señora – pidió Nagini – van a pensar que…
- ¿Qué pasa aquí? – dijo Tom Riddle entro al instante alterado por los gritos
- Voldemort – susurro Harry al instante levantándose de la cama – Mis amigos…, Giny… - dijo cerrando los ojos conteniendo las lagrimas
- Estuvo deliciosa, aunque hubiese sido mejor darle un buen baño – Harry la miro furioso
- Nagini, cállate – le ordeno el lord.
- Pero…- quiso replicar dos pares de ojos tan verdes y letales como un avada kedavra la hizo desistir al instante y su instinto de supervivencia se impuso, por lo que guardo silencio
- ¿Por qué no me matas ya? – exigió Harry
- ¿Y por qué querría matarte? – pregunto
- No sé. Dímelo tú – exigió Harry -. Solo llevas… ¡toda mi vida intentándolo!
- Pero ya no – dijo el sentándose frente a él. – como lo dije antes, serás mi reina y me darás los herederos que necesito
- Ni muerto – grito Harry cuando vio la varita del Lord en la mesita de noche. Se lanzo por ella y en el trayecto le piso la cola a Nagini, por lo que se cayó mientras esta lanzaba un peligroso siseo
- Hey, más cuidado – grito Nagini en un siseo
- Ni lo intentes Harry – ordeno el Señor Tenebroso, pero el muchacho intento lanzar un Avada Kedabra, sin embargo en vez de que de la varita saliera el hechizo, Harry salió expulsado hacia atrás, perdiéndola en el trayecto yendo a golpearse la cabeza contra la pared y perdiendo el sentido al instante

El lord corrió al instante hacia el muchacho para examinarlo, luego con mucho cuidado lo levanto. Después salió ordenándole a Nagini que se quedara con él

* * *

Severus y Sirius estaban conversando en la sala, o mejor dicho, Sirius protestaba sobre algo mientras Severus reía, cuando las llamas de la chimenea crepitaron pidiendo la autorización de alguien para pasar. El mismísimo Lord Voldemort cruzo por ella en cuanto Severus lo autorizo, paralizando momentáneamente al Griffindord

- Mi señor – dijo Severus poniéndose de pie
- Severus, necesito tu ayuda inmediatamente – dijo el recién llegado – tuve una discusión con Harry, él tomo mi varita y quiso lanzar un hechizo, pero en cambio salió expulsado hacia atrás, se golpeó la cabeza y no despierta
- Harry… - susurro Sirius – quiero ir, por favor - suplico mirando a ambos hombres
- No Sirius – dijo inmediatamente el pocionista
- Mi señor… - dijo este mirando suplicante a la máxima autoridad del mundo mágico, este lo miro un segundo y luego le cedió el paso

Los tres hombres cruzaron por la chimenea. Al salir de esta se dirigieron a la habitación principal, donde Harry estaba a costado en la cama vigilado por la serpiente

- No ha reaccionado – dijo esta en cuanto los vio entrar. 

Sirius sintió que se le helaba la sangre al ver la escena, pero aun así se acercó por el otro lado de la cama y se sentó en ella. Le tomo la mano mientras le acariciaba el rostro 

- Mi bebe – susurro mientras sus lágrimas caían – valiente padrino resulte ser si soy incapaz de cuidarte 
- Estará bien – escucho decir a Severus desde el otro lado de la cama – lo prometo

Este asintió viendo como le examinaban los ojos y median el pulso a su ahijado. Luego Severus lanzo algunos hechizos diagnosticadores sobre el chico. Y exhaló

- ¿Y bien? – pregunto el lord
- Solo fue un golpe señor, sumado al estrés de los últimos días
- ¿Estrés? – dijo molesto Sirius clavando su mirada en el hombre
- ¿Sirius? – pregunto Harry despertando
- Shhh, tranquilo mi niño – le acaricio el cabello y le beso la frente – ya estoy aquí
Al abrir los ojos, el muchacho se abalanzó sobre él para abrazarlo y rompió el llanto. Los Slyffering optaron por dejarlos solos. 
Sirius espero a que el joven se tranquilizara para limpiarle las lágrimas y sonríele para animarlo a sonreír también

- ¿Ya estas mejor? – pregunto Sirius ayudando a acostarse
- Mato a Giny – susurro Harry con lágrimas en los ojos
- No pienses en eso ahora – limpiándole las lagrimas
- ¿Y tú? – pregunto el ojiverde - ¿qué te ha hecho el grasiento? 
- Nada malo – contesto sonriendo triste el animago –. Hicimos un trato – el joven lo miro intrigado – Intentarlo
- ¿Qué? – alzo la voz sorprendido -. Pero…
- ¿De qué me sirve resistirme, si él igual hará lo que quiera? – dijo Sirius con voz resignada –. Además se ha portado como nunca creí que pudiera ser un caballero
- ¿Y Remus? – pregunto Harry
- Eligio a Malfoy y su dinero

Y paso a contarle detenidamente lo que paso cuando se infiltro en la mansión Malfoy.

* * *

A la hora del almuerzo, Tom y Harry estaban consumiendo sus alimentos en silencio, cuando entro Nagini en el comedor y cuidadosamente subió a la mesa

- Y diiiimeee Naaagiiiniii – pregunto Harry mordazmente - ¿Quéééé seee siiienteee cooomeerrrttteee geeenteee queee nooo teee haaa heeecho naaadaaa?
- Nooo seee queee deeecir miii reeeinaaa – dijo Nagini – Essstaba deeeliiiciooosaaa, peeerooo insssisssto, leee faaaltooo uuun baaañooo
- Nooo laaa iiinsssuuulllttteeesss – exigió Harry con un golpe en la mesa
- ¡Basta! – exigió Lord Voldemort con un golpe en la mesa – Naaagiiiniii deeejjjaaannnooossss sssoolllosss - la serpiente miro furiosa a Harry y salió murmurando algo sobre reinas que no dejan comer a sus amistades
- ¡No la soporto! – dijo Harry poniéndose de pie
- Hasta ayer se llevaban de maravilla – dijo el Lord echándose para atrás en su asiento - ¿Qué cambio?
- ¡Hasta ayer no podía decir lo que sentía! – grito Harry
- A mí me parecía que si – dijo el Lord con una sonrisa – sobre todo por las noches – y sintió como una bofetada le cruzaba la cara. Entonces lleno de ira lo agarro de los hombros -. Escúchame muy bien niño, te voy a dar elegir. Puedes pelear y darme batalla, y tus amigos lo pagan, o, puedes aceptar lo que paso y empezar a asumir que ahora eres mi mujer con todo lo que implica.
- Como darte un hijo – susurro con rabia y lágrimas en los ojos
- Exacto – dijo el Lord sonriendo mientras lo soltaba -. ¿Qué eliges?

Harry lanzo un grito de frustración cayendo de rodillas apoyando la palma de las manos en el suelo. Se sometería por ahora, pero si pensaban que se rendiría y no cobraría venganza, estaban muy equivocados, después de todo con los años también había aprendido algo después de tanto tratar con las malditas serpientes.

¿Tú? ¡No puede ser!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora