Capítulo 8

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Narra Emmett

Al principio de este día me empecé a sentir extraño, me agradaba ver tanta gente reunida, tantos amigos que pudieron reunirse con nosotros para proteger a Reneesme por si las cosas empeoraran, pero justo cuando iba a salir a cazar, escucho corridas rápidas, y justo cuando salgo el perro mojado llega con la intención de algo, me mira y cuando va a decir algo.

Una bola de pelos blanco al que conozco muy bien, se tira encima de él, sin creérmelo me acerco a ellos, emocionado.

—¿Runa? ¿Eres tú? -pregunto

—Tks… -chasquea la lengua, y aprieta el agarre en el lobo, pero luego observa tras mío.

Y me percato que es la pequeña, quien se encuentra con miedo por Jacob, por lo que lo suelta a regañadientes.

—¿Qué es todo esto? Wow, Runa apareciste al fin -dice Edward contento.

Veo como Edward frunce el ceño levemente al mirar a Jacob, luego mira a la tigresa blanca frente a nosotros, buscando respuesta. Pero enseguida otro de los perros llega con una chica de unos 18 años, de cabellera negra, y ojos grises, montado en él.

—¿Mamá? ¿Te encuentras bien? -pregunta corriendo en dirección a Runa.

—¿¡Mamá!? - preguntan todos con confusión al ver una humana junto a Runa.

Runa suspira con cansancio, y se deja abrazar por la humana.

Realmente esto es muy extraño. La Runa que conozco a penas y se llevaba bien con bella.

Me acerco a ella, y sin más, al transformarse en su forma normal, veo una cadena ligada a su cuello y a la muñeca de la chica, quien me mira con curiosidad.

—¡Hola! Mucho gusto, ¡Soy Adhara Tinkle! Un gusto, ¿tú eres? -pregunta la pelinegra de ojos grises.

—Soy Emmett Cullen, aunque, ¿Por qué Tinkle? No creo que Runa tenga una hermana o bueno nunca nos lo dijo -comento confuso.

Ella sonríe tierna, muy dulce, todo lo contrario, a lo que es ahora la cara de Runa, que es pura tensión, momentos después la cadena se desaparece. Runa pasa por mi lado y lleva a Adhara con ella, en dirección a la casa, pero se detiene en seco al sentir creo las presencias de los demás.

—Carlisle, ¿yo y mi eve podemos quedarnos en el ático? -pregunta Runa

¿Eve? A que se refiere con esa palabra, al parecer quiere escabullirse. Evita por mucho la presencia de todos nuestros amigos, ¿Por qué?

Carlisle quien había llegado también recientemente, asiente.

—No hay problema, siéntete como en casa, bienvenida.

—Gracias, -sin más agarra como una bolsa de patatas a la humana.

Edward me da una palmada en la espalda.

—Adelante, sé que quieres ir con ella, ve, nosotros intentaremos que los demás no los moleste, tienes muchas cosas de las que hablar con ella -dice Edward.

—Gracias hermano -digo, sin más salto al ático.

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Narra Adhara.

Luego que al fin el chico se haya presentado conmigo, me emocioné mucho, pero justo cuando iba a preguntarle más cosas, y más aún para decirle que no era una hermana, sino que la hija (adoptada) de Runa, pero ella sin más me aleja de todos y me trae a algún lugar desconocido, mientras ella se sienta con pereza en el suelo, al parecer más tensa.

—¿Mamá? ¿Qué te pasa? -pregunto preocupada.

—Nada... todo esto es un fastidio -dice y sin más sus ojos se vuelven dorados y siento como algo nos cubre.

—Runa, necesitamos hablar -dice Emmett, el chico pálido y de cabello negro corto.

Ella lo mira el noto como se relaja levemente, la abrazo.

—Tienes muchas dudas, lo sé. -dice con indiferencia ella.

—Si, por lo principal, déjate de ser fría y déjame abrazarte.

Me siento incomoda, hago mal tercio aquí, me voy a separar, y Runa, me abraza.

Me está usando como refugio. ¿Qué es a lo que le teme Runa?

—Afronta, yo estaré si quieres con Paul fuera -digo con firmeza.

—No, tú debes estar aquí, eres la pieza importante -suspira, me deja de abrazar y luego se levanta.

Siento como pasa una mano tras mi espalda y me abraza protectoramente.

—Emmett ella es mi eve, y yo como bien sabrás soy el servamp de la pereza e ira, por lo que soy vampiro sirviente, he hecho un contrato con ella. -dice con firmeza y orgullo.

—¿Pero cómo explicas que tiene tu apellido?, no se parecen en nada -dice Emmett.

—La he adoptado es mi hija legalmente, y de ahora en adelante ella estará con nosotros en todos los temas, por lo que tengo la obligación de protegerla, y ella es mi gran fuente de poder, pero también se ha convertido en una hija especial para mí -dice sin miedo.

Lagrimas me empiezan a resbalar por las mejillas, nunca escuché que alguien estuviese muy orgulloso de tenerme a su lado, me quito la lagrima con una sonrisa feliz.

—Entonces… es por ella que te fuiste -dice mientras se acerca a nosotras.

—Si, era mi destino encontrarla, la rescaté, y ella me rescató de aquel mal de mi pasado -dice mientras me abraza.

Entonces siento como él me sonríe con felicidad, y agradecimientos, por lo que nos abraza.

—No tengo problema en aceptarla como mi hija, si ese es tu temor -dice mientras besa la cabeza pelirroja de Runa.

—¿De verdad? -dice con algo de miedo, y veo su mirada llena de emociones.

Está de más decir que ella de verdad está enamorada, y es éste chico quien en su tua cantante, como al parecer yo tengo a Paul, al que extrañamente lo quiero mucho sin conocerlo aún mucho.

Aquella noche cuando ellos se sentaron a charlar, pude ver como Runa se iba relajando y enojando graciosamente al estar cerca de Emmett, el cual sonreía burlón encada oportunidad de molestar, o bromear o sacarle besos a Runa.

¿Será que yo también podré amar así?




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Adhara ya conoció a los Cullen, pero en una situación un tanto incomoda, con muchos chupasangres llegando a la casa de mismos.
¡Al fin Emmett pudo estar con Runa!
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Torbellino del Amanecer (2) 》Emmett Cullen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora