Capítulo 56 "Ayuda" (Editado)

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POV. ANTONY

Mierda.

Ella había desaparecido y frente de los ojos de Luis. Por esto no la dejaba salir, por su bien y por el de nuestra hija. Sabía que en cualquier momento esto pasaría.

Estaba desesperado por encontrarla, ya había sentido este miedo, pero ahora era peor, mucho peor. La policía y mis hombre la buscaban como locos, no le habíamos avisado a su familia ya que no la queríamos preocupar; además seria decirles que su hija fue secuestrada, otra vez.

Habían pasado casi dos semanas y en poco tiempo nacería mi hija, eso era lo que mas me preocupaba, aparte de que no sabía como estaba Paola.

-Carajo Luis, tienes que encontrarla- dije desesperado.

-La hemos buscado hasta debajo de las piedras y ella no esta, es como si la tierra se la hubiera tragado señor- el respondió apenado. Luis se sentía como la mierda ya que había desaparecido cuando estaba a su cuidado.

Solo suspiré fuertemente y noté que Luis se había marchado del despacho. Empecé a pensar lo peor, pero tenia que ser fuerte por las 2 mujeres de mi vida. Entonces sonó el teléfono, contesté de la manera más rápida, esperando que fueran noticias de ellas.

-Bueno- dije esperanzado.

-Primo- respondió burlón Diego. Suspiré frustrado, pues no estaba de humor para soportarlo.

-¿Qué carajo quieres?- pregunté enojado.

-Quiero dinero-

-¿Y por que te daría mi dinero a ti?- respondí burlón.

-Porque yo tengo algo que tu quieres. ¿Conoces a una tal Paola que esta embarazada?- sentí su sonrisa del otro lado de la línea.

-Mal nacido- dije poniendo de pie.

-Te daré una cantidad y una dirección, más te vale venir solo si no quieres que tus mujeres mueran- 

Antes de decir algo, colgó. Me dejó ahí

Esto no se iba a quedar así...


POV. PAOLA

Llevaba encerrada casi dos semanas y me sentía muy mal. Si me daban de comer era por mi embarazo, pero trataban mal y decían cosas hirientes. Y realmente eso no me importaba, pero sabía que no se apiadarían de mi o de mi bebé.

Dijeron que hoy se acabaría todo para todos, y eso me preocupaba bastante.No sabía si me dejarían ir o me matarían.

-Vamos abajo- dijo Diego mientras me jalaba del brazo para bajar.

Si antes lo odiaba ahora lo detestaba a morir.

-¿Que hacemos aquí?- pregunté con curiosidad, ya que nunca antes había bajado del mugroso cuarto.

-Vas a verte con tu amado- dijo Diego rodando los ojos

Eso me dio esperanza de salir y huir de aquí junto a Antony, solo esperaba que esto saliera bien.

-Siéntate y espera, y mas te vale no intentar nada estúpido- dijo antes de entrar a una puerta y dejarme ahí encerrada.

Cinco minutos después, Diego regresó por la misma puerta y me obligó a ponerme de pie, de pronto se abrió la puerta principal, dejándome ver al amor de mi vida. Una sonrisa ilumino mi rostro al igual que la de él, que se veía cansado y demacrado.

 Karla traía una pistola apuntándole en la espalda al igual que Diego me apuntaba a mi, evitando que el y yo corriéramos a abrazarnos.

-Estas aquí- susurré alegre.

-Estoy aquí- susurré él de la misma manera.


Enamorada De Mi SecuestradorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora