silence ; fack au #O1

twelve.

finn quería gritar al ver esa escena, su mente decía que lo que estaba viendo no era real, era una pesadilla y que cuando despertase todo estaría bien, pero no era así.

el mayor no tenía ni idea de qué hacer, estaba completamente paralizado y asustado, pero intentó enfrentarse a sus propios miedos, comenzando por acercarse a jack.

el pequeño, al ver a finn acercarse hacia él con la cara roja y entre sollozos pensó que le iba a pegar, así que se alejó rápidamente, gateando con la respiración agitada.

finn agarró la pierna de jack y este gritó, intentando zafarse de su agarre, ya que no quería que este le hiciese daño.

— v-ven, por favor... — murmuró finn con un hilo de voz, entre sollozos y mirando a jack desconsoladamente.

el menor se puso en pie con lentitud y siguió a finn, quien agarraba la muñeca de jack con cierto temblor.

se dirigieron al cuarto de baño, y una vez allí finn sentó al menor en el lavabo, agarrando sus manos y limpiando la sangre de estas, viendo como el agua se teñía de rojo poco a poco.

una vez acabaron finn suplicó a jack que se encerrase en su habitación, y que a no ser de que le diese un fuerte ataque no le llamase.

finn no podía estar enfadado con jack, sabía que este no querría matar a su perro, pero la inestabilidad del pequeño se desbordó en aquel maldito momento.

el cadáver de andy seguía en el suelo, finn rompió a llorar de nuevo, arodillandose frente a él, pensando en qué debía de hacer, pero tampoco es que hubiese muchas opciones.

rápidamente el mayor agarró una bolsa y echó el cadáver en esta, con los ojos cerrados y el corazón a punto de salir por su boca.

jack, mientras que todo eso pasaba, estaba sentado en el escritorio de finn, buscando un folio y colores para hacerle un dibujo al mayor para pedirle perdón, ya que sabía que este adoraba sus dibujos más que nadie y tal vez con eso le perdonase.

finn, para entonces ya se había deshecho del cadáver y había limpiado la sangre, aún sin poder dejar de llorar, intentando calmarse pero cuando parecía que había acabado volvía a romper a llorar de nuevo.

jack había encontrado un lápiz rojo y otro negro, sabiendo perfectamente que podría dibujar, comenzando mientras escuchaba al mayor subir las escaleras.

finn abrió la puerta de su habitación, viendo a jack dibujando con su lengua entre sus labios, lo cual significaba que estaba concentrado.

— lo siento... — susurró jack sin poder mirar a finn a los ojos, con la mirada fija en sus pies, extendiendo el dibujo al mayor.

este agarró el regalo y sonrió con tristeza, admirando el gran corazón que el pequeño había dibujado para él, limpiando una pequeña lágrima que bajaba por su mejilla con velocidad.

— está bien... — finn murmuró abrazando a jack levemente, cerrando sus ojos y dejando más lágrimas caer.

jack acariciaba la espalda de finn, tal y como él hacía cuando era el pequeño el que lloraba.

[...]

llegó el último día en casa de finn, en menos de veinticuatro horas jack volvería al psiquiátrico, y por desgracia no todo había ido tan bien como parecía.

en ese momento finn se encontraba terminando de ordenar la maleta del pequeño, mientras que este veía la televisión enrollado en una manta, esperando a que el mayor viniese y se tumbase allí con él, pero sabe que eso no pasaría, ya que este llevaba toda la mañana distante.

jack había intentado volver a besar a finn, pero este había esquivado cada uno de los intentos del pequeño, dejando a este triste y confundido, ya que se suponía que el mayor le dijo que podría besarle.

— ¡finnie, ven conmigo! — exclamó jack mirando hacia la escalera, haciendo un puchero para si mismo.

— no puedo. — contestó finn bajando las escaleras y colocando la maleta de jack en la entrada, lista para el día siguiente.

el pequeño agachó la cabeza y suspiró pesadamente, queriendo acurrucarse con finn tal y como hicieron la primera noche que jack pasó en casa de el mayor.

después de que cenasen llegó la hora de dormir, la cual hizo que finn tuviese más miedo del que jack nunca podría tener, ya que el mayor creía que después de haber matado a andy el siguiente era él.

jack se puso su pijama, metiéndose en la cama junto a finn, esperando un buenas noches por parte de este que nunca llegó, ya que se quedó dormido al instante.

— b-buenas noches... — susurró jack abrazando la espalda de finn, apoyando su barbilla en el hombro de este, cerrando sus ojos y quedándose dormido lentamente.

[...]

y como no, jack volvió a despertarse a media noche, pero esta vez tranquilo, con la respiración normal y la mirada cansada.

el menor miró a finn con tristeza, pensando en lo tranquilo que este estaba cuando él no se encontraba en su mente, ya que no tenía nada de lo que preocuparse.

ese pensamiento se hizo una gran bola y jack solo podía pensar en eso, en lo feliz que finn podría volver a ser sin él, y el pequeño no quería hacer sufrir al mayor, al menos no otra vez.

jack salió de la cama y miró a finn, pensando en que esa sería la última vez que le vería.

el pequeño se inclinó y dejó un minúsculo beso en la mejilla derecha de finn, quien sonrió dormido al notar unos suaves labios contra su cachete.

jack se puso sus zapatos y bajó las escaleras, abriendo la puerta de la entrada al momento de llegar abajo.

cerró la puerta con cuidado y rompió a llorar al escuchar a esta cerrarse, comenzando a caminar solo por la fría noche que caía aquella noche, sin rumbo ninguno.

después de estar unos largos veinte minutos dando vueltas al barrio encontró aquel precioso parque, donde finn y él pudieron disfrutar de los últimos momentos de felicidad.

el pequeño se tumbó en uno de los bancos, cubriendo su pequeña nariz con las mangas de su sudadera, ya que esta estaba completamente congelada.

cerró los ojos abrazándose a sí mismo y volvió a caer dormido, pero ahora más alejado de finn, sabiendo que a partir de ahora este volvería a ser feliz, tal y como cuando se conocieron.

[...]

finn se levantó a las once y media de la mañana, sin ver a jack al lado suya, pero esta vez sin preocupaciones ningunas, ya que pensó que ya no tenía nada que perder.

pero en realidad sí, podría perder a lo que no esperaba perder de esa manera, a jack.

finn buscó por toda la casa, sin rastro ninguno del pequeño, ni en el patio, ni en el baño, ni en la cocina, en ningún rincón de la casa estaba el menor.

el mayor se sentó en el sofá, hundiendo su rostro en las palmas de sus manos, sabiendo que la desaparición de jack era culpa suya por tratarle de esa manera, ya que el día anterior le estuvo ignorando todo el tiempo.

y si a jack le hiciesen algo solo sería culpa de finn.

n/a: me salen mierdas de capítulos pero para continuar con la trama de la historia necesito hacer todo esto, lo siento :(