silence ; fack au #O1

three.

finn pasó toda la tarde con jack, el pequeño no volvió a tener ningún ataque, lo cual hizo que el mayor se sintiese más cómodo.

pero esa noche no la iba a pasar con jack, ya que era viernes y los fines de semana los tenía libres.

lo malo era que finn no tenía ni idea de cómo iba a reaccionar jack.

— esto... jack, esta noche dormirás sin mi, y las dos noches siguientes, pero tranquilo, el lunes estaré de vuelta. — finn miró a jack con empatía, quien le devolvió una mirada rebosante de pánico.

— ¿vendrá luca? — murmuró el pequeño, preguntando, con el corazón bombeando sin ninguna normalidad.

jack sabía que si luca volvía a verle no pasaría nada bueno.

— no sé jack... pero si viene tienes que portarte bien e intentar controlarte, aunque te sea difícil, si te portas bien luca no te hará daño, supongo... — finn suspiró y jack asintió lentamente, jugando con sus dedos.

después de un rato, finn agarró su mochila, despidiéndose de jack y caminando fuera de la habitación, viendo al pequeño mirándole con tristeza desde dentro del cristal, como si fuera un perro abandonado.

el mayor, antes de irse, caminó hacia una especie de sala de reuniones, donde estaba el encargado del psiquiátrico.

— ¡wolfhard! ¿qué haces aquí? — preguntó el encargado, de nombre marc.

marc tenía el pelo castaño, algo canoso, y tenía barba, tendría alrededor de cuarenta y cinco años.

— ¿conoce a luca? — finn preguntó, sin titubear, con un tono de voz tan cortante que era casi capaz de cortar el aire que había en esa sala.

— ¿luca? ¡claro! es más, ahora mismo está yendo con ese paciente tuyo, grazer, luca es un veterano aquí, cada paciente que trata lo domina, es impresionante. — marc contestó sonriendo ampliamente, orgulloso por su trabajador, mientras que finn le miraba lleno de incredulidad.

— tal vez tiene a los pacientes dominados porque les golpea. — finn escupió mirando a marc.

— ¿quién te dijo eso? — preguntó marc, enfadado ante aquella actitud de finn.

— jack. — contestó finn y marc no tardó ni un segundo en romper en carcajadas.

— venga ya, ¿pero tu eres tonto o te lo haces? a quién se le ocurre creer lo que un esquizofrénico le dice, no hagas caso a ni una de las palabras que ese enfermo te diga. — marc recalcó lo último, señalando a finn, quien gruñó.

— como sea, nos vemos el lunes. — finn bufó, pensando que hablar con marc era como hablar con una pared.

en cierto modo, finn pensó que tal vez marc llevaba razón, jack tenía esquizofrenia y podría golpearse él solo y culpar a luca, pero no cuadraba, jack se asustaba demasiado cada vez que el nombre 'luca' salía de alguna parte.

finn caminó hasta su coche, metiéndose en este y conduciendo hasta la antigua casa de sus padres, que sería suya por los tres meses que pasase con jack.

el mayor conducía con un nudo enorme en el pecho, solo de pensar que jack podría tener más ataques y que él no estaría ahí para curarle.

mientras tanto, jack se encontraba en la habitación, sentado en el suelo, con la mirada fija en luca, quien sonreía con malicia, andando alrededor de jack.

cualquiera que entrase en la habitación pensaría que el esquizofrénico era luca y no jack.

— bueno, bueno, ¿cuánto tiempo ha pasado desde la última vez? — luca alborotó el pelo de jack, mientras sonreía de manera espantosa, provocando escalofríos por parte del menor.

— no me acuerdo. — habló el pequeño, con su cara de inexpresividad, la cual luca tenía más que vista.

— dos meses, ¿aún tienes la marca del puñetazo? ¿o te la ha curado wolfhard? — luca rió de manera grotesca, viendo a jack encogerse en su sitio.

— la marca no se ha ido, y no nombres a finn, ni a su apellido. — jack murmuró, tratando de sacar valentía, pero el miedo ganó a ese pequeño intento de ser superior a luca.

— que tierno, defiendes a finn, ¿eh? iluso. — luca rió nuevamente, y jack ya estaba harto de tanta risa, ya que a él no le hacía nada de gracia.

— ¿por qué soy un iluso? — preguntó jack de nuevo, alzando el tono de voz, recibiendo un golpe en la nuca por parte de luca.

— ni se te ocurra volver a alzar el tono cuando me hables, que luego ya sabes que pasa, y eres un iluso por el simple hecho de que crees que finn es genial y fantástico, pero él te va a tratar como todos. — jack gruñó levemente y desafió a luca con la mirada.

— el primer día me trajo mi zumo cuando me desperté, y tu nunca me has dado nada. — contestó el pequeño, a lo que luca rodó los ojos.

— te estoy haciendo un favor, mira la barriga que tienes, si comes algo más revientas. — luca confesó y jack notó como su estómago se retorcía, lleno de una mezcla entre vergüenza y tristeza.

como es obvio, jack no estaba gordo, ni mucho menos, pero a luca le gustaba hacer sentir mal a la gente, y jack era su víctima favorita, debido a que el pequeño era más sensible de lo que debería.

jack, despues de eso, no tuvo nada más que decir y caminó hasta su escritorio, dibujando a finn de nuevo, eso hacía que el pequeño no le echase tanto de menos.

pero claro, luca no tardó en arrancar el dibujo de las manos de jack, solo para fastidiar.

— ¡dámelo! — jack gritó en un tono agudo, saltando y tratando de alcanzar su dibujo, recibiendo un empujón de luca, haciéndole caer hacia atrás.

— no me vuelvas a gritar, enfermo. — luca murmuró entre dientes, agarrándole por el cuello, notando las lagrimas de jack a punto de salir, temblando ante la palabra 'enfermo'.

— p-perdón. — jack dijo en un hilo de voz, cerrando sus ojos, preparado para el impacto.

luca dejó caer su puño contra el estomago de jack, provocando una tos por parte de este, acompañado de unas cuantas lágrimas.

jack, al ver a luca volver al lado de fuera del cristal, entró en su cama, arropándose y rompiendo aún más a llorar.

— finn... — susurró el pequeño, siendo esa la última palabra dicha, ya que se quedó completamente dormido.