Told you to leave him alone.

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Harry sabía que no debería estar ahí, estaba muy consciente del riesgo que eso suponía, pero él tenía que hacerlo; había dejado que las cosas entre Taylor y Louis llegaran demasiado lejos, ahora tenía que encargarse del asunto, suspiró y dio la vuelta a su silla en cuanto escuchó la puerta cerrarse detrás.

-¿Qué haces aquí?

-Tu oficina es muy bonita-sonrió

-Vete... vete de aquí o llamaré a la policía

-Pero que cliché tan americano-añadió para después levantarse del asiento- No llamarás a nadie- acto seguido disparó al teléfono que había en el escritorio-Silenciador- dijo como si nada al ver la cara de confusión de la rubia

-¿Qué quieres?

-¿Yo? Yo quiero muchas cosas- la ira contenida en su voz era palpable- pero no importa lo que yo quiero...

-¿Entonces por qué estás aquí?

-Porque vengo a avisarte que tienes una cuenta pendiente conmigo

-Yo no te debo nada, Styles...

Harry dejó el arma en el escritorio y se acercó hacia Taylor, la rubia ni siquiera intentó correr, sabía que era inútil tratar de llegar a la puerta, él iba a atraparla de todas formas, el chico se colocó frente a ella.

-Me quitaste lo que más quería- le susurró- y vas a pagar por eso- después la empujó contra una de las paredes.

-No sé de qué me hablas...

-Sabes exactamente bien de qué te hablo- le dijo al momento que sacaba una navaja de su bota y la presionaba contra su cuello- sabías que estaba cerca, que iba a pasar por ahí en algún momento, sabías que me vería y que armaría un escándalo... querías que nos viera, querías lastimarlo... ¿por qué Taylor?

La rubia no contestó

-¿Nada? Bien- le dio una bofetada, haciendo su labio sangrar, sin embargo ella continuó en silencio- ¿Aún?- le dio otro, su mejilla se inflamó y sus ojos se llenaron de lágrimas pero no dijo nada- Más vale que lo dejes en paz- acto seguido con la navaja en su mano comenzó a cortar en la parte externa de su brazo- Voy a destruirte Taylor, haré que lamentes el día en que te metiste conmigo por el resto de tus días- después de eso la soltó, la chica se precipitó contra el suelo llorando.

-Ya lo hago- le dijo conforme él se acercaba la puerta de salida

-Vas a dejarlo en paz-le dijo volviendo sobre sus pasos-o todo el mundo se va a enterar de lo que realmente pasó con la hija de Frederick Kovitch- la cara de la rubia palideció-¿Estamos claros?

Asintió

-Yo dije ¡¿Estamos claros?!- añadió dándole una patada en el estómago

-S-sí s-señor-murmuró

-Eso creí- después de decir eso sonrió y antes de salir por la puerta dijo- Era un lindo auto.

Taylor se paró a como pudo y corrió hasta su ventanal, su mercedes rojo, por el que había trabajado gran parte de su vida, ahora estaba en llamas, más lágrimas cayeron de su rostro, a como pudo salió de su oficina para llegar a la enfermería, todo el mundo la miraba conforme caminaba por el pasillo, los alumnos estaban fuera de sus salones, se escuchaba un alboroto general, corriendo se acercó hasta el meollo, aun sosteniéndose el brazo que sangraba, en el medio de todo había un alumno, tenía un disparo en la cabeza, fue lo último que vio antes que todo se pusiera negro a su alrededor.

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Love is DangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora