Star Wars: Ilegales

Capítulo 9: Bailes I

Narrador Ruwee:

Llamé hace unas horas a Padmé, para que viniera a ver unos asuntos del baile de la próxima semana, muy pronto se acabaría su retiro y es importante que esté lista para estar presente en el baile, sobre todo, que tenemos que presentar a todos los mundos las grandes nuevas; como mi fiel consejero y representante del Senado, Palpatine, me dijo que nuestra elección era la mejor que pudimos haber tomado y de alguna manera, sentía que tenía razón, la unión diplomática debía ser muy precisa y perfecta. Mi hija es lo más importante en el Universo, pero ella debe contraer matrimonio antes de volverse reina de Naboo, así lo predica la ley de nuestro mundo, mi esposa y yo, hemos planeado las invitaciones, la comida, la música y el baile como nunca, de por sí era un evento importante, pero más si se trataba de nuestra hija. 

Jobal: - Muy bien, las invitaciones ya fueron enviadas, cariño - me dijo mi bella esposa, quien acababa de ir con el mensajero, para enviar las invitaciones a nuestros aliados, no es fácil conseguir tantos aliados, pero vale la pena si se trata de mi princesa. 

Ruwee: - Excelente, cielo, a Padmé, le dará mucho gusto que varios de sus amigos estén presentes, la verdad, es que me va a costar trabajo tratar de mantener el secreto - dije sonriendo y ella, me dio un beso en la mejilla, antes de pasar al armario.

Jobal: - Pues tendrás que hacerlo, querido, es algo que Padmé debe conocer hasta el mero día, mis padres lo hicieron igual conmigo, cuando me iba a casar con Alcent, pero recuerdo el momento en que salvaste de aquella ocasión, después de enterarme de la verdadera persona que él era en realidad - suspiré cansado, ese día lo recuerdo tan claro como cuando perdí a Sola, yo estaba enamorado de Jobal y cuando me enteré de su compromiso, sentí que mi mundo se corrompía en pedazos.

Ruwee: - Sí...recuerdo ese día perfectamente - al principio con seriedad, pero luego, recordé los bellos momentos que pasamos, antes de que se diera cuenta de la clase de hombre con la que se iba a casar y luché por ella hasta el final - pero, de no ser por eso, querida reina mía, jamás hubiéramos estado juntos - le sonreí ligeramente y acaricié su suave cabello. 

Jobal: - Bueno....eso es cierto, mi rey, debo decir que a pesar de la terrible experiencia con Alcent, puedo recordar con gran rigor y riqueza, los momentos secretos que tuvimos antes de la boda e incluso antes de delatar a Alcent - ella se me acercó y nos dimos un ligero beso - pero ahora, debemos enfocarnos en el futuro de nuestra hija, será mejor mantener el secreto antes de que sea el baile de compromiso - me dijo sonriendo, guardando las cartas con cuidado en el armario, justo en ese momento, suena que alguien toca la puerta.

Ruwee: - Pase - dije tranquilo, calmando mis ansas. 

Paolo: - Sus majestades, la princesa ha llegado al palacio - habló nuestro jefe de seguridad más confiable, justo como lo planeado, es momento de hablar con nuestra hija sobre los detalles de la coronación, pero debo excluir la parte importante....el matrimonio. 

Ruwee: - Gracias, capitán - respondí contento, después él salió asintiendo y haciendo una ligera reverencia; Jobal, me arregló un poco el traje y me dispuse a ir a la sala del trono. 

(Unos minutos antes en el palacio)

Guardia: - Identifíquese - habló uno de los dos guardias, cuando vieron a la princesa llegar, sólo que ella venía disfrazada para no crear sospechas. 

Padmé: - Son la princesa Amidala, vengo a petición de mi padre el Rey Ruwee - ante su declaración, los dos guardias abrieron las puertas y ella entró sin problemas, los guardias se aseguraron de que no hubiera nada sospechoso y cerraron las puertas de inmediato; al pasar por los familiares pasillos de su palacio, Padmé trató de mantener la calma, porque no sabía la causa por la que su padre la había mandado llamar, después de casi tres semanas con los jedis, podía decirse que estaba bastante cómoda con ellos....sobre todo, principalmente con un maestro jedi en especial, el cual le había llamado mucho la atención desde el primer día y que sin darse cuenta, ambos comenzaron a enamorarse del otro.