Admiren la canción que me inspiró. Pero aún no la pongan, sino hasta más tardecito.
Reírse.
El acto más común entre la humanidad. Tan fácil y sencillo, que todos podían hacerlo, desde mundanos, a vampiros, a hombres lobo, a seelies, a brujos, a shadowhunters...
Todos podían reírse. Por pequeñeces como chistes, o cosas más allá como si alguien se cae, o se muere. Depende de la persona y su humor.
Todos eran libres de reírse, púes, están en un país libre.
Sólo que Simon no cabía en sí cuando observa a Jace y a Clary reírse de quién-sabe-qué tarugada.
Sabe, admite –porque es un cínico sin vergüenza alguna–, consciente de que está ardiendo en celos.
Arde en el maravilloso sentimiento de amargura y desazón que te hace hacer cosas estúpidas. ¿Qué puede hacer?, nada. No puede evitar sumergirse en aquel sentir porque de verdad ama al estúpido cazador teñido, y verlo compartir un momento así de ameno con su –todavía– novia, era desagradable.
Se suponía que ellos ni se hablaban.
Pero, como ve. Están más que entretenidos.
Sin más, se va de ahí, dejando a la pareja en aquel pasillo. Se va, con el sabor amargo instalado en el paladar. Y, se va, directamente a hundirse más en el desazón que le produjo tal imagen.
[...]
–Quisiera saber, ¿Quién demonios le dio licor a Simon?– la voz de Alec se alzó por lo alto, dejando en un silencio súbito al ambiente que antes desempeñaba una fiesta, relajada en comparación a las que antes ejecutaba el Gran Brujo, pero fiesta al fin y al cabo.
Nadie habló. Todos ocupados en saber quién demonios era Simon y qué demonios tenía que ver con el mari-novio del Gran Brujo.
Magnus, que estaba al fondo del bar, hablando con Luke, alzó su voz.
–Muy bien, todo aquel que no sea de la familia, largo. – sentenció.
De a poco a mucho, toda la muchedumbre desalojó la estancia, dejando solamente a Luke, Izzy, Raphael, Jace, Magnus, Alec, Maia junto con demás trabajadores del bar, y al propio Simon.
El pequeño brujo estaba tambaleándose en una silla de la barra, Alec estaba parado a su lado.
–¿En qué momento empezó a beber?– dijo por lo bajo Izzy.
Los presentes negaron ante la pregunta hecha.
El cazador ojiazul apretó el puente de su nariz, en un vago intento de calmarse.
–Todos ustedes son una bola de irresponsables.– sentenció, haciendo sentir culpable a todos.
Tenía ya un sermón sobre cuidar más del pequeño Simon, cuando súbitamente, la voz de Simon lo interrumpió, cantando torpemente una canción.
I see the way, i see the way,
the way you want her.
You're not easilly impressed, baby.
I got more under my drees,
but you won't twich.De poco a poco, su atropellada pronunciación se fue haciendo más clara, y por ende afinó su voz, dejando escucharle cantar tan melodiosamente.
I see she's got, I see she's got some thing I don't.
You know I'm jealous in my head,
'Cause you'd look so good in my bed,
But you really like the bitch.Ciertamente, la letra iba impresionando a todos, más aún porque no se esperaban que alguien como Simon cantara algo así.
So I can cry for my age, my life and my face.
And I will wash off all the dirty,
Dirty thoughts I had about you.
And I can cry 'cause I got so much she has not.
And I will wash off all the dirty, dirty thoughts I had about you now.
Wash off all the dirty, dirty thoughts I had about you.Por alguna razón, más de uno empezó a incomodarse.
Maybe I'm young, maybe I'm too young to understand this,
But you're a mess in your own ways.
Let's mess it up together babe,
I'm what you need.
Who could I, oh, who could I be just to get to you
You should be ripping off my gown,
Turning me on, you just send me down,
Down on my knees, Pretty little tears.Simon seguía y seguía entonando la canción, muy pocos supieron para quién iba dedicada, púes, era algo evidente. Más aún porque no dejaba de mirar al rubio mientras soltaba las palabras con cierto rencor.
So I can cry for my age, my life and my face.
And I will wash off all the dirty,
Dirty thoughts I had about you.
And I can cry 'cause I got so much she has not.
And I will wash off all the dirty
Dirty thoughts I had about you now.
Wash off all the dirty, dirty thoughts I had about.
And I can cry for my age, my life.
And my face I will wash off all the dirty
Dirty thoughts I had about you
And I can cry 'cause I got so much she has not
And I will wash off all the dirty,
Dirty thoughts I had about you now.
Wash off all the dirty, dirty thoughts i had about you.Cuando la canción se hubo terminada, Jace se sintió repentinamente inquieto. No supo porqué.
–Bien, eso fue raro.– el primero en hablar fue Luke, quien miraba con una ceja alzada al brujito.
Magnus carraspeó, ignorante de lo incómodo de la situación, púes, él había disfrutado de la canción. –Bueno, creo que ya es hora de irnos.
Acto seguido, se despidieron unos de otros y cada quién se fue por su lado.
El par de cazadores y de brujos se fueron directamente a casa. Jace se había ofrecido a cargar a Simon en el trayecto, ya qué, apenas dejó de cantar, el pequeño se quedó dormido.
Una vez en casa, Alec fue quién acostó a Simon, y éste un momento antes de que el cazador saliera, preguntó: –Alec, si fuiste tú quien me dio a beber licor, ¿Por qué preguntaste si había algún culpable?.
Alec sonrió con cierta inocencia. –No, por nada.
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Dirty Thoughts.
FanfictionSimon Lewis es un joven brujo inexperto de quince años, quien cayó bajo el ala protectora de el Gran Brujo de Booklyn, Magnus Bane. El pequeño Simon tiene una secreta-no-tan-secreta fijación por el cazador de sombras, Jace Herondale. Quien a su vez...