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Durante el resto de la semana no sucedió nada fuera de lo normal, el martes en la noche que vi al tío de Nicolas me apresuré a entrar a la casa de Simon, le comenté a Nicolas y éste salió a ver que sucedía con él, resulta que no fue nada, su tío se había perdido de carretera y no sabía cómo volver, yo no me creí esa historia, algo me decía que él estaba siguiendo a alguien, no había manera de que se perdiera en una calle con ambas salidas a la autopista.

Me levanté de la cama y caminé directo a la cocina, mi madre estaba sentada en una de las sillas de la mesa haciendo unos trabajos en su computadora. La saludé y seguí mi camino en busca de mi padre. Salí a la parte trasera de la casa, toda esa zona colinda con un bosque por que que no hay vista a otras casas. Miré al rededor y no vi a mi padre por ningún lado, una de las masetas con plantas de mi madre estaba fuera de su canasta, así que me acerqué para colocarla en su lugar.

Me agaché a recogerla y cuando levanté la mirada pude ver a alguien caminando en dirección a lo profundo del bosque. Di algunos pasos más adelante para observar bien quién era. Llevaba un abrigo grande color verde oscuro, similar a una gabardina. La persona se fue metiendo cada vez más dentro del bosque hasta que lo perdí de vista. Se me hizo muy extraño ver a alguien allí ya que todo a su alrededor es montaña. Puse la planta en su lugar y caminé hacia dentro de la casa. Encontré a mi padre limpiando las armas que usan en la comisaría.

-Ahora que estaba afuera vi a alguien caminar dentro del bosque, iba solo-.me acerqué al mueble y tomé un revolver compacto S&W 60 que estaban sobre la mesa. Sabía un poco de armas, vivir con un policía en la casa que te enseña mucho de eso tiene sus ventajas.
-Oh sí, pero no te preocupes es el tío de Nicolas, me preguntó si había un lugar seguro para salir a caminar y le dije que podía ir por ahí -. Empezó a recoger las armas y las puso en los estuches con seguro.
-¿Conoces al tío de Nic, papá? -. Eso me sorprendió, según yo nadie le conocía.
-Claro Meredith, el vivió un tiempo cerca de acá, de hecho lo conocí por que fue involucrado en un asesinato muy grande hace un tiempo pero el resultado fue negativo para sus huellas. Así que fue puesto en libertad otra vez. -De pronto recordé el caso de la familia Herrera y lo empecé a relacionar.
-¿Eso que dices es sobre el asesinato de la familia Herrera? ¿Él estuvo implicado en eso? -. Rápidamente solté las palabras y miré a mi padre en busca de una respuesta.
-No realmente, varias personas relacionaron la placa de un auto que iba saliendo de la zona con el número de placa de su automóvil, también varias huellas digitales encontradas en los cuerpo resultaron ser similares a las de él, pero durante la prueba dieron negativas y no se obtuvo ninguna otra pista que lo implicara en el caso así que se descartó.

Todas las piezas estaban empezando a encajar, solo faltaban las más importantes y debía de empezar a averiguar pronto. Definitivamente necesitaba encontrar a Max.

Quería salir un rato, llamé a Raquel para saber si quería salir conmigo y me dijo que no podía ya que andaba en otro lugar con su familia, así que descarté la compañía y decidí ir sola. Me puse ropa cómoda y unos tenis. Tomé un poco de dinero el celular y una chaqueta para el frío y salí de mi habitación, bajé corriendo las escaleras y alcancé a mis padres que estaban sentados viendo un programa de televisión.
-Voy a ir a la ciudad, estaré un rato en la feria y luego vendré para acá. ¿Mamá me puedo llevar tu auto?
-Toma las llaves, pero no llegues tarde por favor y cualquier cosa nos llamas.
Recogí las llaves del mueble y salí por la puerta principal. El clima estaba más frío que nunca, rápidamente entré al auto e introduje la llave en el contacto, puse las marchas en neutro y salí del garaje. Encendí los altavoces y la voz de Adele empezó a llenar cada espacio del auto. Me incluí dentro de la carretera principal junto con los demás automóviles y conduje en dirección a los campos feriales.

Unos minutos después ya me encontraba aparcando el coche en un lugar vacío del parqueo. Salí del auto y empecé a caminar por las calles improvisadas, los puestos de comidas y juegos estaban llenos de personas. Habían muchos niños ocupando los juegos mecánicos y música en vivo llenaba el silencio del lugar, me acerqué a una pequeña banca y me senté a mirar a las personas que caminaban al rededor del lugar. Un grupo de jóvenes de mi edad estaban hablando entre ellos, de pronto vi como una chica se alejaba del grupo y dudosamente empezó a caminar dentro del bosque, ninguno de sus amigos se habían dado cuenta aún de que la chica se había alejado. Me puse de pie y caminé hacia donde la chica se había ido.

Obsesión Carmesí ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora