microcuentos → bangtan boys

십사

¿Por qué habría de disculparme cuando te quiero? Aquí no hay disculpa que valga cuando se trata de decirte —o intentar— cuánto me gustas.

¿En qué me estaba equivocando al decir que te quería? sabía que para ti era algo erróneo pues en tu rostro sólo se reflejaba una mueca incómoda cuando te lo decía, como si mis palabras le echaran sal a alguna de tus heridas.

— Mírame a la cara, Yoongi —te pedí encarándote por primera vez y olvidando el humor de mierda que a veces podías tener —Mírame.

Pero luego de tus silencios comprendí que no debía disculparme por quererte, ni siquiera debía seguir haciéndolo. Debía disculparme conmigo misma por no haberme dado cuenta antes que entregarle cariño sincero a alguien que lo desmerece no tenía perdón.

— ¿Sabes qué? Lo siento —exclamé.

Yoongi pensó que era con él y suspiró cansado.

— Vamos, te acompaño a tu casa —Dijo finalmente posando su mano sobre mi hombro.

Reaccioné, tarde pero lo hice.

— No, Yoongi... —quité su mano suavemente y me acomodé la bufanda.

El invierno estaba haciendo de las suyas.

— Lo siento conmigo misma —sonreí con tristeza. 

En su rostro se dibujó una expresión de confusión.

— Por quererte tanto que no me di cuenta que tú no me querías.