-Ven aquí amor.- Namie golpeó sus muslos indicándome tomar asiento en ellos.
He tenido una pequeña crisis nerviosa y llamé a hyung a casa... Pero ahora estaba nervioso, podría molestarse otra vez.
Hice caso sentándome en su regazo lentamente, con ambas piernas colgando a un lado.
-Lo siento Hyung, tenía miedo y sólo quería que estuvieras aquí...- Hablé bajo mirando al suelo- No quería molestarte.- Me hizo mirarle a los ojos, ojos que mantenía serios.
-¿Cómo te sientes?- lamió sus labios.
No, no ahora.
-Ya estoy mejor, Hyung.- Respondí sin poner atención realmente en lo que decía. Estaba más concentrado en los labios ajenos.
Está provocándome otra vez.
-Jiminie, mírame a los ojos.- Pasaron algunos minutos en los que estuve ausente, a lo que Hyung llamó mi atención.- ¿Hay algo que quieras, bebé?
-Bésame.- Pedí sin más.
Llevo tanto tiempo deseandolo y por alguna razón Namie no había querido hacerlo.
-Tan desesperado.- Habló acariciando los huesos de mi cadera por debajo de la sudadera.- ¿Por qué no puedes dejar de pedirlo?- Acercó su rostro, pegando nuestras frentes.- ¿No tienes miedo de lo que pueda pasar? No te gusta que te toque demasiado, ¿O sí?- Adetró su mano en el pantalón deportivo.
Mi cuerpo tembló en anticipación y cerré los ojos esperando que me tocara sin el boxer de por medio. Pero éso nunca pasó.
Apartó su mano, posandola sobre mis muslos a lo que lo miré confundido.
Una pequeña risa burlona se hizo presente y de inmediato juntó nuestros labios.
Mierda.
Hyung tomó un ritmo medianamente rápido y yo tan sólo pude apretar su hombro con una de mis palmas.
Mis suspiros salieron sin permiso y Namie mordió mi labio inferior, lastimándome sólo un poco. Un escalofrío recorrió toda mi columna en cuanto apretó fuerte mi pierna, enterrando sus delgados dedos en ella. Gemí agitado cuando nos separó.
-Mira esto bebé.- bajó la mirada a mis pantalones.- Te corriste tan sólo con esto.- Rozó con la llema del indice la húmeda mancha, haciéndome temblar.
Me escondí en su pecho, apenado por la situación.
Tengo un fuerte fetiche con los besos.
Y mierda, la marca que Hyung dejó junto a las demás sobre mi muslo es preciosa.
¿Ya leyeron Let Me Do It? Es un bonito lemon Yoonmin que les escribí con mucho amor.❤
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