Letters for you.

21

    "Persecución en el Super".

Cuando Millie oyó el ruido de la puerta de su hogar cerrarse pensó:

Ahora si estas sola.

No era la primer vez que se sentía así. Ya se iba acostumbrando de a poco y lentamente, mientras bajaba los escalones de la escalera con lentitud inspiró aire tratando de llenarse de valor para no llorar. Sus ojos se cristalizaban y empañaban pero estaba tomando el control de sus emociones mientras descendía por la escalera de madera rústica.

Necesitaba distraerse. Salir. Tomar aire. Salir con sus amigos. Pero por lo que veia sus amigos le ocultaban cosas y quien sabe cuantas eran, ella tenía miedo de descubrír que ocultaban, si habia algo más, un secreto oscuro tratando de nor ser revelado o algo por el estilo,pero sabía que había algo más, lo cual, había logrado que Sadie se retirara. Las personas en las que confiaba ya no eran de confianza para ella, al menos eso sentía mientras subía las escaleras para luego llegar a su cuarto y tumbarse en la cama ,con todo su peso, con frazadas aromatizadas.

Mm... coco. Pensó mientras inhalaba el aroma suave que le transmitía paz. Sonreía internamente.

No dejaba de imaginar...

¿Qué haria si él estuviera aquí?

¿Por que sus amigos le ocultaban cosas?

¿Volverá?

Tantos recuerdos nublaban su mente y le hacían doler,  tanto el corazón como la cabeza. Sentía que su mundo de desmoronaba de a poco y que no podria seguir así.

Tuviese la compañía que tuviese se sentía sola.

¿Acaso estaba realmente mal de Salud?

Empezaba a sentirse débil cada día que pasaba, sentia que todos los días cargaba una mochila llena de piedras de 10 Kilos, que el piso la jalaba con fuerza y no podía soltarse de su agarre.

Sentía tantas cosas que se las guardaba, tanto tiempo sin hablar de sus sentimientos, sus anhelos del corazón, sus deseos, sus miedos, pensamientos, tenía demasiada basura en la mente y necesitaba vaciar la papelera.

--¡Millie! --Grita su madre desde las escaleras. Millie estaba tirada en su cama de boca para abajo mientras trataba de concentrarse en sus bellos recuerdos con Finn.Y al recordar algunos una sonrisita se le marcaba en el rostro mientras tenía los ojos cerrados y un escalofrío que le recorría el cuerpo.

--Si ... ¿Madre?
-- Necesito que vallas al Supermercado de por aquí y compres algo para Ava. Esta a los gritos y no puedo calmarla. Necesito que le compres ese dulce nuevo que salió.

-- De acuerdo -- bufó estruendosamente. Ava... su hermanita, algo caprichocita pero la amaba con todo su corazón y aunque aveces le esconda su celular, sus auriculares o incluso sus almohadas, Millie la amaba aunque sus sentimientos estén apagados lo que hacía que no los demuestre.

La castaña se levantó con pereza de su cama y apoyo sus pies en la alfombra suave de su habitación. Bajo las escaleras lentamente.

--¿No necesitas nada más? Porque no quiero volver por si necesitas algo. --Dijo con sinceridad la castaña mientras se refregaba los ojos por el sueño.
 Su madre ríe .

--No querida.

En un parpadeo Mills estaba con su chaqueta de cuero negra la cual cubría sus hombros, abriendo la puerta para salir a comprar lo que a su caprichosa hermana se le antojaba. No le molestaba ... Pero Millie tenía bajas sus energías y necesitaba recargarlas con una buena siesta en su cuarto.
Ahora que lo piensa ella también podría comprarse un dulce, un chocolate.
Con esta nieve estar dentro de su hogar...eso era lo que deseaba. Estar entre sus sábanas color crema con aroma a coco con calor recofortante y una taza con chocolate caliente en las palmas de sus manos, mientras se alimentaba de series o de silencio.