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Después de unas clases muy pesadas y aburridas la pareja se encontraba en él estacionamiento del colegio dejando sus maletas en la cajuela del auto del mayor, Jimin esperaba poder aprender todo lo que se había perdido de la clase de química.

Jeon cerró la cajuela de su auto haciendo saltar a un pequeño gatito que estaba perdido en sus pensamientos, el castaño se acercó a su pequeño algodón de azúcar y lo abrazó por detrás de su espalda.

— ¿Qué pasa bebé? —

— Nochu... ¿y si no aprendo nada? No quiero hacerte perder el tiempo...—

Jimin bajo sus hermosas orejas de gatito triste, Jeon le dio la vuelta para quedar frente a frente, este acarició las mejillas regordetas de su amado rubio.

— Bebé, tu eres muy inteligente, ¿si? No tienes porque dudar de ti mismo.—

Jimin miró a su comprometido fijamente a los ojos con un enorme brillo que expresaba el amor que le tenía a Jeon. Se lanzó a sus brazos abrazándolo fuertemente no quería soltar a su hermoso gatote, escondió su cabeza en el pecho de su alfa dejándose embriagar por el aroma a coco que tenía el castaño.

Jeon se dedicó a caricias la cabellera rubia de su amado lentamente dándole amor y confianza en si mismo, escuchó los ronroneos de su gatito y sonrió enamorado.

— ¡Váyanse a un motel!—

Grito uno de los tantos alfas que había en la universidad, Jeon giró su cabeza y se dio cuenta que era la ex pareja de su rubio.

Wang Jackson, aquel hombre estaba saliendo del lugar con su grupo de amigos irían a tomar algo por ahí pero se encontraron con aquella escena asquerosa para él.

— ¿Tienes algún jodido problema?—

Gruño Jeon soltando con cuidado a su omega, el rubio sostuvo el brazo de su amado al escucharlo gruñir fuertemente, miró el rostro del castaño y vi en sus ojos furia, el color castaño que tenía se volvieron negros como la oscuridad misma, y sus colmillos aparecieron.

— Amor, calma... mejor vámonos, ¿si?—

Jimin jalaba suavemente el brazo de su castaño para que el gato interior del alfa no se saliera al ver como Jackson lo provocaba con sus palabras.

Jeon se zafó de Jimin algo brusco haciendo caer a este al suelo.

El gato del castaño había salido cuando Wang le había gritado que Jimin se había metido con su hermano.

Jackson también se transformó y se tiró encima de Kook comenzando a pelear, se mordían de una manera Tan fuerte que sus hocicos se llenaban de sangre de cada uno.

Pero como Jeon desde pequeño lo habían enseñado a pelear dejó al gato de pelaje negro debajo suyo dejándolo inmóvil. Park miraba la escena asustado su gatote estaba con demasiada sangre por todo su cuerpo.

— Estas con un omega que ha pasado por tantos alfas.—

Jackson se rio ante sus propias palabras, pero Jeon lo callo en una con un gran rasguño en su hocico haciéndole sangrar la nariz.

—¡Cállate de una jodida vez!—

Gruñi desde lo más profundo de su ser, el castaño odiaba que se metieran con su omega, su pequeño Jimin no merecía que personas cómo estás le hablaran así.

Jeon mordió el pelaje de Wang y con toda su fuerza lo tiró contra la pared de la universidad, los amigos del gato negro corrieron para ver cómo estaba su amigo. Cuando llegaron donde estaba él lo encontraron inconsciente, como pudieron se lo llevaron lejos de Kook.

— ¡Amor!—

Jimin corrió hacia donde estaba su amado y lo abrazó con cuidado de no tocar las heridas de su cuerpo, Jeon se acurrucó en el hombro del humano y soltó pequeños ronroneos al saber que su omega estaba a salvó.

— Estas herido... todo es mi culpa...—

Jungkook volvió a su estado humano donde aquellas heridas que se hizo por la pelea aumentaron su intensidad de dolor, provocando que saliera un gemido de dolor de los labios del castaño.

Abrazó a su pequeño omega aguantando el dolor que estaba sintiendo.

— Mi amor, nada es tu culpa... ese idiota habla lo que desea para alejarnos pero jamás pasará.—

Jeon beso los labios de su rubio de manera lenta tratando de demostrarle que él siempre estaría ahí para él y que lo cuidaría de todas las personas que le quisieran hacer daño.

🐱❤️🐱

Ya se encontraban en la casa del alfa, los padres de este al ver a su hijo con sangre se asustaron y la omega de la familia corrió por un botiquín para curar las heridas de su minino.

— ¿Qué te paso Jeon?—

Hablo el alfa de la familia mirando el torso de su hijo donde tenía un rasguño desde su costilla hasta su cadera.

— Fue una pelea, se quisieron meter con Jimin y no lo iba a permitir.—

El padre del castaño suspiró y se recostó en su cómodo sofá con una pequeña sonrisa, había criado muy bien a su hijo.

— Lo siento... señor por mi culpa su hijo está así.—

— No, Jimin... mi hijo hizo lo correcto, al haberte protegido te ha demostrado que te ama demasiado y que eres lo más importante en su vida, por algo se van a casar.—

Jimin se sonrojó levemente y miró a su alfa, este le sonrió con dulzura, el castaño rodeó los hombros de su amado y lo atrajo hacia el acostadolo en su hombro.

— Ya te dije amor, a mi no me importa como acabe después de una pelea, si tú estás a salvo yo estaré bien. Pero si a ti te hacen algo me pondré mal... tú eres mi mundo, eres mi vida, sin ti yo no soy nada...—

Los ojitos del rubio estaban aguados al escuchar las palabras de su alfa, llevo su mano y acaricio la mejilla de su amado con cuidado, el castaño al sentir su tacto cerró sus ojos disfrutando de las caricias.

Jimin se levantó un poco para poder besar esos labios que tanto amaba.

El rubio beso a su amado castaño con delicadeza siendo correspondido al instante por el alfa quien apretaba con algo de fuerza el agarre del hombro de Jimin para acercarlo más a él y poder hacer el beso más profundo.

MI DULCE OMEGA - KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora