Un amor prohibido

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Después de soportar todo el día las molestias de mi hermano, decidí aceptar ir con ellos a ese dichoso baile..

No tengo mucho humor de estar en un lugar con tanta gente, pero como dice mi madre, un momento de diversión no le hace mal a nadie y si podre pasarla bien un momento, incluso dejaría de pensar en Naruto.

Estoy en mi cuarto y mi madre me hablo de Gaara en plan romántico, no le dije nada, pero ahora no estoy para eso, tal vez si yo no me hubiera enamorado de Naruto como una loca, tal vez hubiera pensando en darme una oportunidad de tratarlo, pero eso sería como darle falsas esperanzas y yo se lo que se siente que te ilusionen y no tener una esperanza de tener un bello romance.

Pero si él llegará a comentarme algo respecto a ese tema, me sincerare con él, diciéndole que yo no podría tener nada con el o al menos no por ahora.

Sacudo mi cabeza para olvidarme de eso y al terminar mi baño, veo el vestido que usare sobre mi cama, estoy por ponérmelo, tengo que empezar a arreglarme para ir con ellos o se me hará tarde...

—¿Hija puedo entrar?

Escucho a mi madre llamarme, me pongo el vestido, si madre y al ver la puerta abrirse..

—¡Oh Hinata estas hermosa! Deberías maquillarte un poco sabes..

Si eso pensé mamá. A veces me gustaría contarle lo que me esta pasando y como me siento, así ella pudiera darme algún consejo, pero no quiero que se avergüence de mí.

—¿Qué pasa Hinata? ¿Acaso no te gusta como te ves? Mira que estas hermosa, creo que hoy conquistaras a más de uno, pero para eso necesitas sonreír..

Mamá, ahora no estoy para eso, yo.. guardo silencio y..

—Qué dices Hinata— ven acá, siéntate te cepillarme tu cabello, así me cuentas ¿Por qué dices que no puedes? ¿Acaso ya hay algún chico que ocupa tu corazón y no me lo has comentado?

«Había» un nudo se forma en mi garganta, si pudiera contarle todo y me entendiera, pero no puedo. No mamá, yo..

—¿Qué pasa Hinata? Cuéntame hija, no he querido decir nada pero te he estado observando desde hace días y te noto triste, aunque intentes disimularlo, sabes que puedes contar conmigo, sea lo que sea, yo te entenderé, escucharé y aconsejare..

La abrazo, lo sé mamá, pero no me pasa nada, no te preocupes, le sonrió y solo espero que si un día ella se entera de todo, no me rechace, ni se aleje de mí, sino no se que haría.

—Esta bien confiare en ti hija, pero quiero que sepas que puedes contar conmigo siempre y ahora sonríe para mí, además hay que apurarnos, ya es tarde y..

—Abro la puerta del cuarto de Hinata— y al observarlas, mamá, monstruo ¿Qué hacen? Ya es tarde..

—Ya va hijo, ayudaba a tú hermana a alistarse, no nos apures..

—¿Abrazándola? Vamos madre no vamos a ir a otro lado del mundo, solo vamos a bailar, deja de consentirla, la cuidare te lo aseguro..

Es mi bebe, así como tú y siempre los apoyaré, apapachare y estaré aquí para ustedes, pero anda ve a bajo, para que tu hermana termine de arreglarse y puedan ir a divertirse..

—Las quiero y no te tardes monstruo..

Nunca cambiará -ahí sonrió- ya no quiero que mi madre se preocupe más de lo que ya esta, mejor me apuro para poder partir hacia ese baile.