Flower

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Antes de que lean ..... les advierto que tiene escenas subidas de tono,asi que coste que se los adverti (?) xD

No me hago responsable por posibles derrames cerebrales y pesadillas :3

Vestido con un pantalón y un polo blanco, Jiyong se detuvo en la habitación que alguna vez se había quedado sus padres, en ese lugar ahí puesto la piyama de Bae para que no se confundiera con su ropa, estaban en la repisa de sus padres. Podía ver el débil resplandor de aquel diamante de medio quilate.

El dolor hizo que se le formara un nudo en el estómago; lucho en contener sus lágrimas.

Con Veintisiete años recién cumplidos, habías sido lo suficientemente arrogante como para pensar que era una persona madura y capaz de hacer frente a cualquier cosa. Y en un segundo, todo se derrumbó.

La muerte arrebató todo aquello que alguna vez tuvo: la seguridad, la fe, su creencia en la justicia y, sobré todo, él amor de sus padres y su apoyo emocional.

A pesar de su gran vanidad juvenil, no habías estado preparado para que le arrebataran a toda su familia.

Y, aunque habían pasado años, aún los extrañaba. El dolor se había clavado en su corazón-Aquel viejo dicho que decía, era mejor haber conocido el amor antes de perderlo, era una enorme mentira.

No había nada peor que perder a las personas que te quieren y cuidad en un accidente estúpido.

Había sellado la habitación tras el funeral, y lo había dejado tal y como estaba.

Solo había apartado la pijama de Bae en una pequeña repisa para que nada en esa habitación cambiara.

Fue hacia la repisa que se encontraba en la esquina de la habitación y miro con nostalgia la cama. Todavía recordaba la hermosa risa de su madre. Las bromas sobre el conservador estilo de su padre, qué siempre escogía pijamas de franela.

Peor aún, recordaba aquel amor que se profesaban

Lo que daría él por encontrar la pareja perfecta, como les había sucedido a ellos. Habían estado casados veinticinco años antes de morir, y su amor había permanecido intacto desde el día que se conocieron.

No podía recordar un solo momento en que su madre no sonriera ante alguna broma de su padre. Siempre iban agarrados de la mano como dos adolescentes, y se robaban besos cuando creían que nadie los veía.

Pero él los veía. Y ahora recordaba. Quería ese tipo de amor. Pero por alguna razón, No había encontrado a un hombre que lo dejase sin aliento. Un hombre que consiguiera que se le saliera el corazón de tanto latir y que sus sentidos se tambalearan.

Un hombre sin el cual vivir no tuviese sentido.

-¡Oh, Umma! – balbuceó, deseando que sus padres no hubiesen muerto esa noche.

Deseando…

No sabía que. Lo Único que quería era conseguir algo que le hiciese pensar en el futuro. Algo que le hiciese feliz; de la misma forma que su padre había hecho feliz a su madre.

Mordiéndose el labio, Jiyong cogió el pantalón de cuadros, y salió corriendo de la habitación

-Aquí tienes- dijo arrojándose la prenda a Seunghyun y saliendo a toda prisa al baño, en mitad del pasillo. No quería que el fuese testigo de sus lágrimas. No volvería a mostrarse vulnerable ante nadie.

Seunghyun cambio la toalla por los pantalones y se fue tras de Jiyong.Habia cerrado de un solo portazo la puerta más cercana a la habitación donde se encontraba.

El Amante Perfecto (Gtop)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora