Lance
Estuve fuera lo que restaba del día, intentando despejar mis pensamientos y en general intentando relajarme. Necesitaba relajarme de verdad. Cuando volví con el León Azul decidí pasarme por el León Rojo, solo a verlo. Me dejó entrar como si fuese su paladín legítimo y me senté en la silla.
—¿Sabes? Keith no lo está pasando tan bien... Después de todo, sigue ciego y no importa cuanto entrene, no creo que vuelva al equipo sin perder más. —Le hablé a la mismísima nada porque confiaba en que el león me escuchaba.— ¿Sabes qué me dijo? Que quería volver con la Espada de Marmora. O sea... Eso es tirarse a matar. Yo no sé qué hacer y tampoco sé qué hago diciéndote esto cómo si hablaras o pudieras hacer algo al respecto.
Suspiré levantándome de la silla, y por impulso o no se qué, caí nuevamente en ella. Mis ojos se cerraron y me quedé en esa oscuridad relajante, no sé cuánto tiempo estuve así hasta que pude ver imágenes en mi cabeza, había escuchado a Shiro hablar de esto pero cuán seguro estaba de que no era un sueño... Ciertamente no lo sabía. Tal vez Keith podría volver a ver... Temporalmente... Solo había que traerlo de vuelta a su León Rojo. Si eso era lo que me quería decir... No sabía cuán feliz y aterrado me sentía. Feliz porque él volvería a ver de algún modo, aterrado por lo que pueda pasarle.
En cuanto dejó de mostrarme lo que había afuera, me levanté de un golpe y a trompicones salí del León Rojo. La emoción llevó a mis pies a la habitación de Keith pero me detuve en seco en cuanto recordé lo ultimo que habíamos hablado... Tal vez no sería buena idea entrar.
Me deslicé por la fría pared y me quedé largos minutos mirando la puerta. Planeaba qué decir, o si... ¿Siquiera merecía entrar? ¿Qué le diría?
¡Oh! ¡Hola! Keith, venia a disculparme y a decirte que tu antiguo León Rojo me dijo que podías ver de alguna extraña forma.
¡Claro que no podía entrar como si nada! Ahora me sentía miserable porque yo no podía retroceder el tiempo y hablarlo como personas decentes que éramos. Aunque su decisión de entrar en la Espada tampoco era muy decente que digamos... Tal vez quería culpar más a Keith que a mi de lo ocurrido. Tal vez debería de dejar de ser tan idiota y entrar de una vez a hablar con él.
Si, eso haría. Hablaría con Keith y todo se solucionaría.
Entré a su habitación y quería que me tragara la nave y me escupiera en cualquier pedazo estrella prendido en fuego. ¿O quería que la Espada de Marmora desapareciera del universo entrando en un hoyo negro?
Kolivan, el líder de la Espada de Marmora, estaba ahí. Estaba en la habitación de Keith, hablando con él. Kolivan notó mi llegada inmediatamente y dejó de hablar. Ni siquiera me dieron oportunidad de escuchar un fragmento de su conversación.
—Creo que tu amigo vino a verte —dijo Kolivan a Keith.
—No, yo ya me iba. Solo venia a ver si Keith necesitaba algo —dije con la mandíbula y los puños apretados.
Estaba molesto y bastante decepcionado. Nunca pensé que Keith mandaría a llamar a la Espada de Marmora... Enserio se iría con ellos. Yo no podría hacer mucho por él...
La miseria me consumió dejándome tirado en el area de descanso. De verdad que no podía hacer nada por él y eso me dolía.
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A través de tus ojos (Klance) [TERMINADA pero en edición]
FanfictionEn la que debe de ser la última misión de Voltron en mucho tiempo ocurren varios fallos y Keith paga las consecuencias. ¿El equipo Voltron podrá ser su apoyo o solo uno es necesario para salvar lo que queda de un Keith estable? ...