Sallow

Capítulo 19

N/a: Antes de empezar el capítulo quiero decir que estoy escuchando "En esta no" de Sin Bandera, y por Dios que me hace pensar en Artemis y Althair y es muy triste su situación. 

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Es todo, gracias. <3 

PD: Amo los flashbacks de ellos dos pequeñitos, son bastante tiernos. <3

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Las horas pasaban realmente lento para la pequeña Artemis. Aquella mañana se había despertado más temprano de lo normal, estaba celebrando una fecha especial: su cumpleaños número once.

Cada ocho de mayo tenía la misma rutina; despertar antes del amanecer, hacer su cama y meterse en la ducha, luego se colocaba el vestido que dejó preparado una noche antes. Cepillaba sus dientes, sus cabellos rojizos y esperaba. Althair siempre acudía un par de horas más tarde a felicitar a su niña. 

Pequeños golpecitos se escucharon en la puerta de la habitación de Issy, se levantó rápidamente de la cama y con su mejor y más grande sonrisa abrió la puerta, dejando ver a un Althair alegre, emocionado, que llevaba consigo algunas cajas en tonos rosados y dorados. 

—¡Feliz cumpleaños, Artemis!— Se apresuró a dejar cada uno de los obsequios sobre la cama de la menor, para así poder abrazarla con todas sus fuerzas.

La pequeña abrió sus brazos, recibiendo a su hermano. La diferencia de altura era bastante evidente viéndolos desde ese ángulo. El rubio acarició un par de veces los cabellos húmedos de su hermana, aspirando el aroma a fresas que cargaba su shampoo.

—¿Todo eso es mio? — Preguntó luego de haber roto su abrazo, observaba con curiosidad cada una de las cajas que yacían en su cama, en espera de ser descubiertos.

—Cada uno de ellos es tuyo. Comienza por el rosa más grande, creo que te va a gustar.

Artemis obedeció, como siempre hacía, a las indicaciones de su hermano. Se sentó en la cama y dejó que aquel regalo descansara sobre sus piernas, deshizo el moño con sumo cuidado, como si de una pieza de arte se tratara, no quería arruinarlo, aunque la curiosidad  y la emoción la inundaban.

Sus ojos se abrieron abruptamente mientras una amplia sonrisa asomaba por su rostro al darse cuenta de lo que aquel empaque poseía. Un cuaderno de dibujo color rosado, con unas preciosas rosas adornando la cubierta había sido el mejor regalo de cumpleaños que había recibido en once años.

—Al... Me encanta. 

—Se que estuviste pidiéndole uno a papá desde hace meses. En cuanto lo vi supe que debía ser tuyo, Issy.

—¡Lo amo, Althair!

—Eso me alegra. Espero que lo llenes de flores y conejos y muchísimos dibujos bonitos como los que haces siempre.

Aquella mañana, Issy había ideado la forma perfecta de agradecerle a su hermano por aquella infinidad de obsequios que le había entregado. Sin duda alguna, ese cuaderno sería el comienzo de su amor incondicional al arte y por supuesto a Althair Sallow. 

Se adentró muy sigilosamente a la habitación azulada de Althair y dejo sobre su escritorio aquella hoja blanca en donde descansaba un dibujo de ambos; ella tomando su mano, caminando a su lado en un bosque de preciosas flores violetas, el sol iluminaba sus rizos pelirrojos y hacía que los ojos del contrario resaltaran entre todo lo demás. Debajo, se encontraba escrito con letra legible y un poco desastrosa un "Te amo, Althair".