-¿Dónde está Ani?.- pregunto una Luna muy animada corriendo por las colinas llenas de arena.
Harry, Ron y Hermione no sabían que contestarle a la inocente jovencita.
-Luna, nosotros...- tartamudeo Harry
-Ella es muy valiente Luna.- admitió Hermione
-¿Se está escondiendo?.- pregunto con una gran sonrisa en su rostro.- Ella siempre a sido muy bromista, igual que su novio, tu hermano George, yo creo que por eso le gusta.- le señalo a Ron.
-Luna, Ani nos salvó a todos y queremos que sepas eso.- Hermione cargaba en su rostro una gran tristeza por la hermana de su amiga.-
-Su majestad la reina Ani nos ayudó a salir de la mansión Malfoy señorita Luna, ella nos evitó una muerte inminente, no sabemos si ella la recibió por nosotros o si la evitó como desearíamos.- la voz cantarina de Dobby hacía sonar las cosas menos graves.
-¿Ani no volvió con ustedes?.- el rostro de Luna Lovegood era todo un poema.
Los 3 amigos negaron lentamente.
-seguro ella está bien, siempre encuentra la forma de volver con nosotros y esta vez no será la excepción, ella después de todo es: Ani Lovegood, la reina de las criaturas mágicas y no mágicas, ella sabrá que hacer.- Luna Lovegood fue siempre considerada rara pero después de esto los 3 amigos; después de tanto tiempo habían escuchado algo coherente de sus labios ( o al menos eso creía ellos, ya que Luna nunca a estado loca).
Ani era imparable, de seguro encontraría la forma de escapar. Pero los amigos no tenían el tiempo para rescatarla y encontrar los Horrocruxes a tiempo. Ellos sabían que Ani quisiera que en vez de buscarla, deberían encontrar los Horrocruxes. Así que eso hicieron, se pusieron en marcha para encontrar los últimos Horrocruxes.
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Animalia Lovegood nunca había sido tratada tan mala en toda su vida. Voldemort había ordenado mantenerla con vida, pero no especificó los tratos que debía tener la joven. Así que sus seguidores solo cumplieron la regla de mantenerla con vida, pero prácticamente Animalia. Lovegood era tratada sin ninguna gota de respeto o amabilidad.
Ella al estar bajo el encantamiento Imperius no podía poner ninguna resistencia.
Desde golpes por todas partes de su cuerpo, hasta la profanación del mismo , a esto se refiere a las cicatrices que dejaban ciertas torturas o algunas veces, por los Mortífagos mas pervertidos y desgraciados, manoseo en las partes más íntimas de una dama. Gracias a Merlin, nunca fue más lejos. La joven reina había soportado maldiciones imperdonables, todas la horas de todos los días. Cada vez que algún seguidor leal de Lord Voldemort quisiera, podía bajar al sótano , donde ella era retenida, a desquitar su furia con ella.
Uno de esos días, las familias de sangre pura que tenían desendencia masculina convocaron a su señor.
-¿Para que han pedido mi presencia?, más vale que me digan que tienen al niño Potter.- Su voz era de un hombre irritado.
-Mi señor hoy estamos aquí, todos tus humildes sirviente, para hablarle de un tema que tiene importancia para la continuación de nuestra pulcra desendencia.- habló el señor Malfoy
-Continua.- asintió con la cabeza el señor oscuro.
-Señor es bien sabido que la reina de las criaturas está bajo su mando y ahora es una de las armas más poderosas en su ejército, la guerra la tiene ganada prácticamente, pero después de es, todos pensábamos que la joven debe ser entregada a uno de nuestro herederos sangre pura.-
El señor tenebroso lo medito un momento
-¿Cuál es tu punto Lucius?.-
-La chica es fértil, mi señor, su pureza está intacta, según mis fuentes y es muy hermosa perfecta para mi hijo.- el señor Malfoy fue interrumpido
-Querrás decir por alguno de nuestros hijos ¿No Lucius?.- el señor Nott se hizo presente junto con el señor Zabini.-Claro Nott, para alguno de nuestros hijos.- la voz de enfado del señor Malfoy llegó a los oídos del Lord Voldemort.
-Veo su punto, mis doblegados, si la chica es fértil, conserva su virtud , es bella y su sangre es única en todo el mundo mágico, no hay sangre más pura que la de ella, así que propongo algo: Aquel que se muestre firme y leal a mi en lo que queda de esta patética resistencia de parte de Potter.- Todos los hombres prestaban atención a las palabras de su señor.- se llevará la mano de la chica.
Draco abrió levemente los ojos.
Debía ser él, sabía que Animalia nunca lo amaría, pero al menos ella estaría con él y él no le obligaría a hacer nada que no quisiera, la trataría con el respeto y amor del que carecía en estos momentos.
-¿Entendido?.-
-Si mi señor.- Draco Malfoy había hecho una notable reverencia hacia Voldemort.
Voldemort mostró sus podridos dientes.
Draco estaba comprometido con el trato, el deseaba ganarlo más que nada en el mundo y nada ni nadie se lo impediría.
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La Hija de las Criaturas
FanfictionElla es amable, generosa y hermosa. Está destinada a ser una reina Ellos están dispuestos a hacer lo que sea con tal de conseguirla. Una guerra entre pelirrojos, rubios y azabaches se desatará por estar con ella. Solo uno se quedará con el corazón...