Ryo estaba contento su madre había aceptado al fin su compromiso o eso pensaba él.
Ella se aprovechó de su aniversario para organizar un fiesta con amigos y socios de su esposo, una enorme fiesta colmada de prospectos solteros.
Claro que antes que nada aseguro hacerla en viernes, sabía perfectamente que el alfa de su hijo no podría asistir, aún así le mintió a su hijo diciéndole que ya le había enviado una invitación y que esté la aceptó aún con lo apresurado que era.
Mari era lo suficientemente inteligente para saber que una discusión con CJ solo lograría que su hijo la dejará, pero no, su plan consistía en que durante el año que estubiera cerca de su hijo le mostraría su error pero sobre todo que existían muchos alfas, incluso betas que serían mejores candidatos a ese pedófilo que solo era un anciano metiéndose con un inocente niño
Pero aún tenía una oportunidad aún no estaba marcado, aún existía la posibilidad de combenserle de un divorcio, un año sin ser tocado era como como volver a ser virgen, su niño aún tenía esperanza.
Ella le abriría los ojos al mundo.
Estaba en total desacuerdo que un alfa siendo mayor robará la inocencia y pureza de su único y especial hijo, ella interbendia de una manera discreta.
A la fiesta asistieron muchos alfas solteros, betas en menor cantidad pero aún así jóvenes y apuestos.
Pero Ryo era cortante y hasta mal educado con cada persona que su madre le presentaba.
Su aroma era agrio y solo miraba a la puerta, en espera de ver a su esposo entrar e ir por él, pero no llegaba.
Su ánimo estaba por el suelo, lo mostraba con su aroma pero Mari seguía insistiendo en mostrarle a cada soltero en la fiesta y mensionar sus logros y atributos.
- querida - la llamó Giotto y la separó de los invitados - realmente pensé que querías una fiesta por nuestro aniversario no una excusa para presentar a nuestro hijo con cada persona en este lugar, tomaré a mi hijo y lo llevaré a casa.
- pero...
- no apruebo esto, pensé que entendías que su felicidad era lo importante, pero no puedo apoyarte en esto...
Mari se quedó en la fiesta, mientras su esposo se iba con Ryo directo a su casa.
Les mintintio a sus invitados diciendo que su hijo no se sentía bien y Giotto tubo que llevarlo a descansar, le tomó un par de horas para despedirse de todos sus invitados para al fin regresar a su casa.
Su esposo la esperaba en la sala, nunca habían peleado o discutido, él siempre dejo que ella tomara las desiciones importantes respecto a su hijo, nunca dijo nada porque pensó que ambos querían lo mejor para su pequeño.
Pero ahí es donde estaba el problema, ya no era un pequeño ya no tenían que cuidar cada cosa que hiciera, ahora estaba lo suficientemente grande para tomar sus desiciones y afrontar la responsabilidad sobre sus actos.
Ya no podían tratarlo como a un bebé, ya estaba grande y aunque les doliera tomó la desicion de casarse, ahora tenía un alfa que cuidaría de él.
Era difícil dejar ir a su hijo pero es parte de la vida y Giotto lo entendía, esperaba que su esposa igual, pero esa noche le demostró que no.
- está dormido, no lo molestes - le dijo lo más frio que pudo para detenerla.
- quiero saber qué está bien.
- no lo está, le mentiste yo también pensé que él vendría - se sentía estúpido de creer que su esposa pudiera ser capas de tanto.
- quiero que entienda que no sólo existe CJ sino que ahí muchos alfas aya afuera que no debe quedar con él sólo porque si.
- has pensado en sus sentimientos o sólo en lo que tú quieres para él - quizás porque nunca habían discutido o porque no sabía qué hacer, pero cuando ella no dijo nada y subió a su habitación claramente molesta y ofendida, él se quedó esa noche en la sala, sin hablar más, sólo pensando.
Mientras en su cuarto estaba Ryo realmente furioso, no podía dormir, lloraba de rabia por lo sucedido.
Llegando a casa se encerró en su cuarto y llamo a CJ el cual no estaba enterado de dicha fiesta, luego todo quedó claro, había sido un engaño, el mayo quizo evitar un problema y le dijo que quizás si fue invitado y que su secretaria olvidó darle en mensaje, pero esa escusa era pésima.
Entendía que su amado no quería problemas con su madre y por lo que decía eso, pero la verdad estaba muy clara, su madre se interponía entre ellos, y él no iba a permitirlo.
Sabía que su madre siempre le daba un beso antes de dormir y esperaba que no fuese una excepción, porque tenía muchas cosas por reclamarle.
Pero no llegaba y antes de darse cuenta se quedó profundamente dormido.
Pues padre estaba tras la puerta escuchando toda su conversación con, solo lo dejo estar mientras iba a la sala a esperar, perfectamente entendía lo que era amar a distancia, pasar años pensando en esa persona y no saber cuándo la volvería a ver.
Él lo sufrió con Mari, no entendía como ella quería hacerle algo similar a su hijo, acaso no comprendía el dolor que eso causaba.
Esa noche ningúno logro estar tranquilos.
Muy temprano salió Ryo de casa, con rumbo al aeropuerto, no dejo nota, ni una explicación, solo su celular para no ser contactado.
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Mis amorsitos no los dejan estar juntos por ser ilegal....ya ni modo
Vamos a separarlos por qué el mundo no los quiere juntos???
A wuebo...
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Amantes
Hayran KurguYuri y Yurio apenas se hablan, con vidas diferentes y ambos amando a Victor siendo rivales terminan siendo amantes... Yuri el esposo legal de Victor. Yurio enamorado desde hace años de Victor. Yuri y Yuri descubren un nuevo sentimiento. Omegaverse...