Un villano JAMÁS se enamora [BlackFlug//Paperhat]#Wattys2019

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Para haber sido el primer dia de clases, le había ido bastante bien. Claro, descartando su presentación de estudiante y la amenaza de los demonios gemelos. Pero hey! Que tal el lado bueno? Ahora tiene un amigo y eso lo hacía sentir bien, compartían gustos y cosas en común. Justo ayer después de clases, estuvieron conversando por chat y uno que otro audio de voz con gritos o risas. En ese momento, Flug se habia dado cuenta de que Walter tampoco era como los demás aspirantes a la villania. El era una persona amable, educada y muy comprensiva, y eso le hizo tomar bastante cariño al chico a pesar de conocerce apenas.

Ahora, se hacia presente su segundo dia en la escuela.  Nuestro joven estudiante se hallaba emocionado y con una sonrisa en su rostro mientras caminaba hacia la parada de autobuses del Instituto. Con la mirada buscaba a Walter, que al parecer aun no llegaba.

- bueno, aun faltan 10 minutos - se dijo a si mismo con la esperanaza de que el azabache apareciera antes de que el autobús partiera hacia la escuela.

Se sentó en una de las bancas de la parada, y sacó su teléfono movil con tal de matar algo de tiempo. Había entrado a twitter, mientras veia las publicaciones nuevas de la gente que seguía, comerciales que aparecían entre otras cosas. Nada nuevo podría decirse, simplemente era un adolecente más el cual era adicto a su celular, pensaba el de gogles aun concentrado en la pantalla de su dispositivo, hasta que una voz los sacó de su trance.

Y si, era Walter

- hey Flug, ya llegué - saludó el de mechón rojo hacia su compañero mientras corría hacia donde se hallaba este.

- hola Walter - respondió el rubio haciendo lugar para que el contrario se sentara a su lado - creí que no llegarías - comentó sonriendo.

- oh vamos, e irme a la escuela caminando y dejándote en el abandono? - habló dramatisando ligeramente lo último mientras hacía una pose diva.- en fin, ahora solo queda esperar. - comentó el de coleta refiriéndose a la espera del bus.

- bueno, no falta mucho. 5 minutos. - respondió el rubio volviendo a revisar la hora de su teléfono para centrarse en el nuevamente mientras que su compañero le seguía la acción.

No fue mucho el tiempo que esperaron, y  en un abrir y cerrar de ojos se hallaban ambos jóvenes sentados en el transporte de camino al instituto. El recorrido fue silencioso y pacífico, de pronto el autobus paró en seco indicando a los estudiantes la llegada hacia el bachillerato.
Bajaron con calma del transporte escolar con la intención de dirigirse a su aula escolar, y en cuanto estaban a mitades del pasillo hacia su salón de clase unas manos se posaron en los hombros de ambos chicos. Voltearon con curiosidad para encontrarse con una mujer de figura gorda, de 60 años se podria decir y vestida como sirvienta del siglo XVIII aproximadamente: un vestido largo y negro de manga larga con un delantal blanco, un pelo canoso hecho chongito perfectamente arreglado y una cara de pocos amigos. En cuanto estaban por decir algo la mujer se les adelantó.

- Walter Allard y Flug Slys? - ambos asintieron - el director Black Hat me ha mandado a avisar que durante el receso exige su precencia en su oficina, no se les olvide jóvenes. - habló finalmente para retirarse en silencio y dejar a los dos chicos continuar con su rutina escolar.

Decidieron no hacer comentarios de lo recién sucedido, pues se daban una clara idea de la razón de que hallan sido citados por el docente. Sin más, continuaron su camino por el gran pasillo hasta llegar al aula, tomaron asiento sigilosamente, acomodaron unas cuantas cosas de su mochila y esperaron el timbre para comenzar con el primer módulo.

Las clases tomaron un transcurso normal, nada interesante se podría decir. Durante el tercer módulo habian tomado clase de dominio de seres vivos, la cual fué aprovechada por los gemelos demonios para molestar un rato a Flug, pues estos decían que debían "mostrar su capacidad de dominio" en una persona "inferior a ellos", claro, su diversion duró unos cuantos minutos después de haber recibido un llamado de atención por parte de su profesor correspondiente a la materia, lo cual nuestro pequeño rubio agradeció internamente. Y finalmente el cuarto módulo habia llegado a su fin para al fin tomar el ansiado descanso de 20 minutos.