De camino al matadero

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Por la mañana alguien estaba intranquilo (mientras que otro ni p**a idea de lo que estaba pasando...) sus pensamientos lo habían despertado hacían como 30 minutos y le taladraban el cerebro.

Saga:- ¿Cómo haré ahora para disimularlo? ¿Él también estará igual que yo? - Frunció el seño - Vamos... estamos hablando de Kanon, a él nada lo desvela. - Decidió que sería mejor empezar el día.

Se levantó de su cama, tuvo su habitual protocolo de limpieza (baño, cepillado de cabello y limpieza de dientes) y se dirigió a la cocina lo más tranquilo que se podía. Hizo el desayuno y fue a despertar a la piedra que dormía en la habitación que estaba enfrentada a la suya.

Saga:- Kanon... - Primero en tono normal - Kanon, despierta... - Subiendo el tono de voz y sacudiéndolo levemente, pero como eso no funcionaba - ¡Ya levántate haragán que no podrás desayunar! - Lo destapó de un solo movimiento y lo que vio... aaaaah... no fue lo que le hubiese gustado encontrar... - ¡KANON Y LA MADRE QUE NOS PARIÓ! ¡YA LEVÁNTATE! - Su... querido (?) hermano estaba desnudo y con un asunto entre manos... un enorme y duro asunto... aún estando dormido.
Kanon:- Mmmm... Saaa...gaaa... - El mencionado no aguantó y corrió al baño para limpiarse el derrame nasal que le provocó verlo (nuevamente). Por su parte el menor despertó con un hermoso pegote en su mano derecha... - Pero ¿qué demonios...? - Se miró y vio la razón de esa rara sensación en su mano - No otra vez... - Se resignó y decidió comenzar el día - Ya qué... Saga, oye, ¿está listo... - Entró al baño y encontró a su hermano lavándose la cara con restos de sangre en la canilla y demás - ...el desa...yuno...? - El mayor se incorporó rápidamente, se secó el rostro y salió como un rayo del baño.
Saga:- Sí, te espero en la cocina - caminaba lo más rápido que sus pies podían intentando no ser tan obvio - Corre, corre, corre que nadie te puede alcanzar... - Mientras que su hermano se quedó en el baño para darle inicio a su protocolo de aseo personal.

Ya en la cocina ambos, Saga intentaba esconder su rubor tras el periódico intentando calmarse. Una vez logrado, dio un gran suspiro, bebió su jugo de naranja y comió su desayuno.

Kanon:- Oye, hermano... ¿te sientes bien? -
Saga:- Actúa NORMAL... actúa normal, que no se note... - Haciendo un gran esfuerzo por no decir lo que vio - Sí, claro, ¿por qué lo preguntas? -
Kanon:- Porque estás raro, ¿estás seguro de que no te hizo mal lo de anoche? -
Saga:- No sé a qué te refieres -
Kanon:- A la cena, tonto, ¿a qué más? - El mayor pareció soltar una gran cantidad de aire y volver a su estado de relajación y frialdad habitual.
Saga:- No, no te preocupes, estoy bien, sólo dormí en una mala posición, eso es todo - Jamás le diría la verdadera razón de su extraña forma de comportarse. - Ojalá me crea... -
Kanon:- Ah, ya, está bien. Vamos a vestirnos para el entrenamiento de hoy. - Sonrió para luego echar carrera hacia su habitación. - Será que aún no puede dejar de pensar en eso...? - Se vistió y arregló para el duro entrenamiento que les esperaba.
Saga:- Éste jamás cambiará... - Se levantó y lavó todo para luego ir a arreglarse y vestirse para la gran jornada.

En lo que iban subiendo las escaleras no cruzaban palabras, cosa que a ninguno le molestó ni le pareció raro ya que en realidad ellos jamás hablaban entre sí en otro lugar que no fuera la casa de Géminis.
Pasaron por Cáncer y nada, ni un movimiento... pasaron por Leo y nada tampoco. Vieron el rejoj y eran las 7:30am, el entrenamiento empezaba a las 8:00am, no podía ser que sean los últimos en llegar. Apresuraron el paso y se encontraron con Shaka meditando como todas las mañanas.

Kanon:- Oye, monja budista, ¿acaso no piensas ir a emtrenar? - El mencionado frunció el seño.
Shaka:- Cierra el hocico Kanon y dime ¿qué hora es? - Intervino el mayor.
Saga:- Son las 7:35am, ¿vienes o no? - El rubio abandonó su posición poniéndose de pie y caminando hacia ellos.
Shaka:- ¿Quién dirigirá el entrenamiento de hoy? -
Saga:- Alde... - No pudo terminar de decir su nombre que lo interrumpió su gemelo.
Kanon:- El toro. Así que será pesado, lleva muchas botellas, total... Camus las enfriará. -
Shaka:- Ay... no... no otra vez... - Se notó la resignación en sus palabras. Buscó unas cuantas botellas con agua, las empacó en un bolso y salió con los hermanos.

Pasaron por Libra y allí estaba sentado el viejo maestro. Sobre un par de rocas.

Dohko:- Los estaba esperando muchachos, el borrego pasó más temprano junto con el toro, pero me quedé a desayunar tranquilo. -
Saga:- ¿Eso quiere decir que nadie más pasó? - los Géminis y Virgo quedaron anonadados ellos creían que estaban llegando tarde.
Dohko:- Vamos, sino llegaremos tarde como el resto. - Todos afirmaron y siguieron camino.

Pasaron por Escorpio y nada...
Al llegar a Sagitario los esperaba Aioros en la puerta de su templo.

Aioros:- Los estaba esperando, ¿vamos? -
Todos a Aioros:- Sí. -

Siguieron Camino y, al igual que Aioros, Shura también los esperaba en la puerta de su templo y de muy buen humor.

Shura:- Buenos días muchachos, ¿qué onda? ¿Todo en orden? -
Todos a Shura:- Buenos días, todo bien. - Sigueron subiendo.

En la casa de Acuario... Camus esperaba a la muchedumbre, sólo que con él... la conversación no fue muy... ¿amena?

Camus:- Buenos días, vamos. -
Todos a Camus:- Buenos días... -
Kanon:- ...hielera con patas... -
Camus:- Te oí Kanon... deja de andar de boca floja si no quieres quedar pegado al suelo. - Camus y una de sus más respetables amenazas... pero en realidad se moría de ganas de preguntar si habían visto a Milo...

La última casa no fue muy distinta... Afrodita esperaba afuera recargándose sobre una pilastra

Afrodita:- Ya era hora... buenos días muchachos, cómo han descansado hoy? -
Todos a Afrodita:- Buenos días -
Shura:- ¡De maravilla! -
Dohko:- Pos yo muy bien. -
Kanon:- ¡Yo igual! -
Saga:- Yo pésimo, pero ¿qué importa? - Era lo que le habría gustado decir... - Bien Dita, ¿y tú? -
Afrodita:- Yo perfectamente bien. -
Shaka:- Yo también, meditar antes de dormir relaja muchísimo. - Al escuchar eso a Saga se le encendió la lamparita💡Se acercó a Shaka, lo rodeó por los hombros y comenzó a susurrarle al oído.
Saga:- Oye, Shaka, ¿podrías enseñarme algo de eso de la meditación? Luego del entrenamiento, por favor, ayer dormí muy mal por los nervios. - Los ojos de cierta persona no miraban lindo la escena... si las miradas mataran, la de él sería una Death Note.
Shaka:- Claro, no hay problema, podemos hacerlo en mi templo luego de entrenar. - Y echándole más nafta al fuego...
Saga:- Genial, gracias. - Volvió a la par de su hermano y empezó el ping pong de preguntas y respuestas...
Kanon:- ¿Para qué irás con Shaka? -
Saga:- ¿Por qué te interesa saberlo? - el menor no encontraba excusa válida.
Kanon:- Porque sí, ahora responde. - Se mantenía firme.
Saga:- Le pedí que me enseñe algo. -
Kanon:- ¡¡¡¿¿¿WHAAAAAAAAAT???!!! - Abrió los ojos de par en par - ¿Algo como qué? -
Saga:- A relajarme con algo de meditación, nada más. - No entendía qué había de malo en eso. Su hermano se acercó hasta estar a centímetros de su rostro
Kanon:- No querrás que me ponga celoso, ¿verdad? - Susurró para luego morder levemente su oreja recibiendo como respuesta un leve rubor
Saga:- No hagas esto enfrente de ellos. - Le susurró disimuladamente intentando no hacer tan alevosa la corriente eléctrica que sintió en su ser ante el atrevimiento de su hermano.
Kanon:- Está bien, luego lo hablamos en el templo. - ¡Qué buena manera de disimular las cosas...!
Saga:- Está bien. - Por dentro quería matarlo... - Maldito hijo de mi mamá... -

Contunuaron su camino al salón principal donde Mu y Aldebarán los estaban esperando. Al ver llegar solamente 8 caballeros el toro se llevó una mano a la cara e inclinó la cabeza.
Aldebarán:- Otra vez los mismos tres idiotas de siempre... -
Mu:- No digas eso Alde, puede que estén en camino. -
Aldebarán:- Bueno muchachos, tomen asiento, hay que esperar a los otros tres. - Se sentó en una de las sillas del gran salón seguido por todos los demás...

40 minutos más tarde llegaban tres jadeantes caballeros que corrieron escaleras arriba para llegar (tarde, pero llegar en fin).

Death Mask:- Buenos días, perdón el retraso. -
Milo:- Lo dirás por ti, jaiba, yo quería seguir durmiendo. -
Aioria:- Deja de hundirte, alacrán, terminarán por matarte. -
Milo:- Cierra el hocico felino super desarrollado. - Se notaba el fastido, se cayo de la cama y a mitad de un lindo sueño... - Para colmo que no quería venir porque hoy dirige el toro... -

Sin más contratiempos, empezaron el entrenamiento, primero bajar y subir desde el salón principal hasta Aries y luego...





Luego... me caigo del sueño así que hasta ahí llegó el tercer capítulo, espero les guste, no se pongan ansios@s por el Lemon.

Nos leemos en el próximo cap 😘

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