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La bienvenida al Santuario

Un hermoso día de sol, el día después a uno de arduo entrenamiento, se encontraban todos con sus respectivas parejas. Estaban de a dos en los templos de Piscis, Sagitario, Escorpio, Libra, Virgo, Géminis y Aries. Todo era color de rosa hasta que, fuera de la casa de Aries, se escuchó al escandaloso Pegaso.

Seiya:- ¡¡Oye Mu!! - En la casa de Aries hubo un enorme silencio... y dentro de ésta dos caballeros susurrando...
Mu:- ¡No puedo creer que sean ellos! -
Aldebarán:- ¿Los habrá enviado Athena? -
Mu:- Eso me temo... -
Aldebarán:- Creo que tendrás que llevarme a Tauro y volver enseguida. -

El carnero asintió, posó su mano sobre el hombro del toro y lo llevó a Tauro lo más rápido posible volviendo a Aries justo a tiempo para llamar a su armadura y atender a los ruidosos invitados del Santuario.

Seiya:- Hey, Mu, Athena nos envió al Santuario, dijo que por tres meses tenemos que entrenar con ustedes. - Borrego con total pokerface...
Mu:- ¿¿¿¿Tres meses???? ¿Cómo que tres meses? ¿Cómo haré para sobrevivir sin mi Alde todo este tiempo? (T.T) - Volviendo a la realidad... - Está bien muchachos, a dónde deben ir? -
Seiya:- Yo a Sagitario. -
Shun:- Yo iré a Virgo. -
Shiryu:- Yo debo ir con el gran maestro. -
Hyoga:- Yo iré a Acuario con el maestro Camus. -
Kiki:- ¡Maestro Mu! - Se le lanzó encima cual niño pequeño.
Mu:- Hola Kiki, ¿te has estado portándote bien? ¿Has estado entrenando? - El pequeño pelirrojo asintió sonriente. -Está bien. - Le sonrió y volvió su mirada a los Caballeros de bronce. - Oye... ¿y tú a dónde vas? -
Ikki:- Debo ir a Cáncer, la bruja me envió ahí. -
Mu:- Te encantará, Afrodita lo remodeló y ahora es muy acogedor. - Le sonrió y los invitó a pasar. - Tú te quedas aquí conmigo. - Se llevó a Kiki para la parte interna de la casa de Aries.

Los Bronceados pasaron por Aries y se dirigieron hacia Tauro a paso tranquilo y sin apuro. Esta vez no había que correr por NADIE...
Al llegar a Tauro, Aldebarán los esperaba afuera con cara de pocos amigos.

Aldebarán:- ¿A dónde van? -
Seiya:- No te preocupes, nadie se queda en tu casa. Déjanos pasar que el primero se queda en Cáncer. - Todos miraron a Ikki y éste con indignación pura miraba hacia otro lado.
Aldebarán:- Está bien, cuidado en Géminis. -
Shun:- ¿Por qué? -
Aldebarán:- Porque son dos y ambos son los más sádicos y poderosos en ataque. - Los Bronceados se quedaron helados al escuchar eso. - ¿Qué esperan? Vayan. - Los invitó a pasar y éstos lo hicieron totalmente temerosos.

Subieron leeeeentamente, no estaban seguros de qué se encontrarían en la casa de Géminis. Cuando llegaron a la entrada no había nada o eso es lo que parecía...

Saga:- ¿Quién irrumpe en mi casa sin pedir permiso? - La voz retumbó en todo el lugar.

----- SILENCIO SEPULCRAL -----

Kanon:- ¿Vino alguien para divertirnos? - Ambos salieron, Saga con su armadura y Kanon con la ropa de entrenamiento. Ambos con cara de "vamos a torturarlos lentamente".
Saga:- ¿Quieres probar el efecto de una doble Explosión de Galaxias? -
Kanon:- ¿Eso es posible? -
Saga:- Oooooh... sí. - Ambos se miraban con malicia mientras los Bronceados casi se sentían morir... hasta que el pollo rostizado se lanzó al ataque...
Ikki:- ¡Eso no lo permitiré! ¡AVE FENIX! - Fue contra quien creyó que podría ser más débil a causa de no tener armadura.
Kanon:- Qué tonto... - Sonrió desviando su ataque como quien espanta una mosca. - La armadura no hace al caballero, ambos somos caballeros dorados de Géminis, no pueden vencernos con un ataque tan débil. - Lo tomó por sospresa y de un golpe lo hizo volar un par de metros... (digamos unos cinco, diez o quince metros...?)
Seiya:- ¡Ya verán! - El burro alado se dispuso a atacar pero en la mitad del camino... ambos hermanos comenzaron a reírsea carcajadas... Pegaso se detuvo. - ¡Oigan! ¿Qué es tan gracioso? -
Saga:- Que se la creyeron alfeñiques (X'D) - Todos se quedaron mirándolos.
Shun:- ¿A qué se refieren? -
Kanon:- A que sólo estábamos bromeando. - El pajarraco se levantó desde atrás de los Bronceados...
Ikki:- Su bromita fue un tanto pesada, ¿no creen? -
Kanon:- Ay... ¿Tan suavecito eres? - La mirada asesina del Fénix cayó sobre Géminis menor. - Quita esa cara de idiota o te la quitaré a golpes. - Amenazó con su puño elevando su cosmos, pero su hermano posó una mano sobre su hombro izquierdo y se calmó.
Saga:- Ya hermano, déjalos, será en vano. No son un digno oponente. - El burro alado reaccionó.
Seiya:- ¿Cómo que no? - Comenzó a elevar su cosmos al igual que lo hizo el menor de los gemelos un momento antes. - ¡Yo les enseñaré! - Corrió hacia ellos y atacó. - ¡Meteoro de Pegaso! -