❧ 11

5.7K 307 63
                                    

Capítulo bastante largo porque mira, no sé. Aunque creo que os va a gustar 😋

El viernes por la tarde me dediqué a estudiar. De verdad, me senté en el salón y empecé a repasar los apuntes de Aitana y las explicaciones que me había hecho Miriam. Por lo menos se lo debía a ella sacar buena nota en el examen de la semana siguiente.

A Aitana casi le da un infarto cuando le dije que me habían invitado a la fiesta. Me dio mucha pena porque sabía que a ella le hacía más ilusión que a mí, pero yo ya tenía en mi mente que esta vez iba a dar los pasos necesarios para acercarme más a Miriam, ¡si solo iba por ella! Si tenía que colarme en su círculo de amigos pues bueno, lo haría. Tampoco tenía nada que perder; a parte de dinero, porque tenían pinta de tener pasatiempos muy caros.

Noe llegó a casa sobre las ocho, con un par de bolsas de la compra, y la miré sorprendida, porque nunca la había visto ir al súper. Claro que sabía que la comida no llegaba mágicamente a la nevera, pero no sé.

—Joder Noe, estás en modo ama de casa hoy.

—Y tú en modo estudio, ya veo que mi terrible idea ha dado su fruto —dijo con ironía.

Me levanté de la silla para acercarme a la cocina y ayudarla a ordenar sus cosas.

—Me venía de camino al volver del trabajo. Hoy voy a cocinar porque se viene Manu a cenar.

Levanté una ceja y la miré con una media sonrisa, mientras le aguantaba la puerta de la nevera para que metiera cosas.

—Tú y Manu... al final voy a pensar que tenéis algo.

—Bueno, sí que tenemos algo: amistad y cosas sobre del ayuntamiento por hablar. Además, tú vas a la fiesta esa de Raoul, ¿no?

Asentí, cerrando la puerta de la nevera.

—No sé qué ponerme aún. Esa gente se arregla mucho por lo que me han dicho —me senté encima de la mesa mientras Noe ponía cuatro cosas en los armarios.

—¿Puedo preguntarte algo? —dijo Noe, girándose para mirarme.

—Eh... sí, claro —le dije, aunque la pregunta me dio un poco de miedo.

—Pasas mucho tiempo con Ricky y con Mimi últimamente, ¿verdad?

—Sí, sí. ¿Cómo lo sabes? —la verdad es que tampoco le comentaba muy a fondo donde estaba en cada momento del día.

—Es un pueblo, la gente habla —dijo Noe, como si fuera lo más obvio del mundo que cada uno de mis movimientos le llegaría a los oídos tarde o temprano. —Pero me refiero a que no tienen nada que ver con Raoul y su gente. ¿Por qué vas a la fiesta realmente? Que no digo que no puedas ser amiga de todos, pero me sorprende, cuando no va a ir ninguno de tus amigos cercanos; como ellos, o Aitana, o Amaia.

Me rasqué el brazo, haciendo tiempo.

—Es por Miriam, ¿verdad? Ella te invitó.

—Sí, me invitó Miriam. Y por eso voy.

Noe soltó una risita y yo levanté las cejas, pidiendo una explicación.

—No, no, nada. Si quieres te ayudo a elegir vestido.

🦋🦋🦋

La elección de Noe fue un vestido rosa palo de tirantes, por encima de la rodilla y con un escote bastante importante. Me ondulé el pelo y me maquillé mientras ella me miraba tumbada encima de mi cama y pasaba las canciones que no le gustaban de mi playlist. Hablamos y nos reímos, y me encontré deseando que Noe fuese mi madre de verdad.

Que lo bueno está por llegar 🦋 || WARIAMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora