Narra Sofía
En el parque...
Me tumbé en el césped, una brisa de verano acarició mi rostro, aspiré el aire puro que penetraba en el parque. Cerré los ojos, hasta que escuché unos pasos acercarse hacia mí.
-Hola Sofía.
-Ahh, hola Coral, ya has llegado. Te estaba esperando.
Se sentó a mi lado y empezamos a hablar:
-Oye al final,¿cómo vamos a conseguir 500 euros en un mes? Eso es imposible.- dije.
-¿Y si no lo hacemos y ya está? Total ya tenemos el libro.
-Yo la verdad no me fiaría mucho de una niña de 9 años que va con una navaja en el bolsillo, podemos encontrárnosla en cualquier momento.
-Bueno,es verdad. Además me dio un poco de pena lo de su abuelo, imagínate si es el nuestro.- respondió Coral.
-Ahora que lo pienso...- dije con aire pensativo- creo que tengo ahorrados 100 euros.
-¡Anda pues claro! Yo también tengo 100 euros que me dio mi abuela en mi cumpleaños.- dijo Coral.
- Sí, es verdad que estaba ahorrando, pero... con tal de que el sueño de mi amiga se haga realidad haré lo que sea.
-Y yo. A ver... ya tenemos 200 euros pero de dónde vamos a sacar 300?- preguntó Coral.
-Tengo una idea, podemos encontar "trabajos" no muy difíciles, y que podamos hacer, como en mi libro.- dije.
-Buena idea, pero no creo que entre dos personas ganemos 300 euros en un mes con "trabajos" más o menos. Al menos 2 personas más también tendrían que ayudarnos.- dijo Coral.
-¿Cómo por ejemp...?
No me dio tiempo a terminar la frase, puesto que Pedro estaba pasando justo delante de nosotras, pero ensimismado escuchando música con los cascos puestos.
-¡Eh Pedro! ¡Pedro!.- dije gritando.
Dejó de mirar a la nada y fijó su vista en mí.
-¡Anda Sofía, Coral, qué casualidad! ¿Qué hacéis aquí?
-Pues mira queríamos que nos ayudaras en una cosa.
-¿En qué puedo ayudaros señoritas?.- dijo riéndose.
Solté una carcajada y luego dije:
-Es que mira, resulta que tenemos que conseguir 300 euros en un mes y la verdad no sé cómo lo vamos a hacer pero Coral y yo hemos pensado en buscarnos algún "trabajo" por así decirlo para conseguirlo.
Se quedó impresionado como diciendo: "¿Y por qué tendría que ayudaros a conseguir tanto dinero en un mes? Pero Coral dio en el clavo y dijo:
-Es por Clara.
Rápidamente su cara expresó preocupación y deseo por ayudar a "su amada Clara".
-¿Clara? ¿Es que le pasa algo?
Le explicamos todo, desde la biblioteca hasta nuestro tenso encuentro con Emily, y rápidamente se ofreció a ayudarnos.
-Por supuesto que sí os ayudo, además, ahora que lo pienso tengo ahorrados 200 euros de mi comunión.
-¿Vas a gastar 200 euros?.- dijo Coral sorprendida.
-Por Clara haría lo que sea.
-Bueno, pues ahora tenemos que pensar en qué vamos a "trabajar".- dije.
-Al lado de mi casa han abierto una guardería, y como la dueña es amiga de mi madre podría pedirle trabajar allí durante un mes.- dijo Coral.
-Y tú, Pedro, ¿tienes algo pensado?
-Pues podría sacar a pasear los perros de la gente a cambio de algo de dinero. Pondré carteles en las paredes y a ver si así tiene éxito.
-Y yo.... pues... - me quedé pensando, no se me ocurría nada.
-Ya sé lo que puedes hacer Sofía.- dijo Coral. Es que el otro día, de camino al centro comercial, me dieron unos carteles por si quería participar en una obra de teatro para niños pequeños, y como a ti se te da bien puedes hacerlo.
-Ah, pues perfecto.- dije entusiasmada.
- Lo malo, es que si quieres participar en la obra, también tienes que saber tocar el piano, eso es lo que ponía en el cartel.
-¡Clara puede hacerlo! Se quedó muy decepcionada con lo que pasó en el colegio y una segunda oportunidad no le vendría mal.- dijo Pedro.
-Perfecto, así ganaremos el doble de dinero.- dije.
-¿Tenéis algo que hacer?- preguntó Coral.- Lo digo porque así podremos ir a la casa de Clara y decírselo. Le diremos que el dinero es para mi abuelo y ya está.
-Claro, vamos.- dije.
-Yo tenía que comprar unas cosas, luego me decís.- dijo Pedro yéndose.
En la casa de Clara...
Toqué al timbre y al instante, Pepe, el mayordomo, nos dejó pasar, luego subimos al cuarto de Clara. La puerta estaba entreabierta y Clara estaba mirando por la ventana. Por si no nos había oído toqué a la puerta.
-¿Clara? Hola.
-Hola Clara, ¿podemos pasar?.- preguntó Coral.
-Pasad.- dijo con frialdad.
-¿Qué pasa? ¿Por qué no nos hablas?.- dijo Coral.
-Vosotras sabréis.- dijo sin apartar la vista de la ventana.
-Clara ve al grano.- dije impacientándome.
Se giró con expresión enfada y estalló:
- ¿Cómo que qué pasa? No sé, lleváis desde que acabó el curso sin hablarme, sin mandarme un mensaje.... Y justo el mismo día que os iba a invitar a mi casa, veo desde el coche que habéis quedado sin mí y que estáis hablando tan animadamente con una niña pequeña.
-Ah, por eso un coche no paraba de pitar, porque ¡nos estabas llamando!.- dije acordándome de ese coche azul.
-Sí, y tampoco me mirábais.- dijo Clara.
-Es que no te vimos, lo siento.- dijo Coral.
- Es que ese día...- dije pensando qué excusa poner- íbamos a visitarte y nos encontramos con mi prima pequeña, que me dijo que a mi abuelo le iban a poner un marcapasos muy caro y que no tenían el dinero suficiente.
-Por eso veníamos.- dijo Coral ayudándome- porque queríamos que tocando el piano pudieses ahorrar un poco dinero.
-¿Tocando el piano?.- preguntó.
Le explicamos lo que habíamos pensado ( con esa excusa de por medio) y también que Pedro nos iba a ayudar.
-Vale, total no tengo nada que hacer. Y sería una segunda oportunidad para que mi actuación no se arruine como la otra vez.
-Además irías conmigo.- dije intentando romper el hielo.
-Lo siento, no sabía lo que había pasado y he sacado conclusiones precipitadas.- dijo con arrepentimiento.
-No te preocupes, debimos haberte avisado.- dijo Coral.
Las tres nos fundimos en un abrazo y Coral y yo nos miramos con complicidad, esperando darle una buena sorpresa a Clara.Me gustaría dedicarle este capítulo a coralpuertas y a Lily-always por apoyarme con la historia:3 ¡Gracias por leerlo! No olvidéis votar y comentar:3:).
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El sueño de Clara
RandomMe llamo Clara y soy una niña en silla de ruedas. Los médicos me dijeron que no podría volver a andar, pero yo sí lo creo.