El Regreso Del Demonio

5. Confianza

Lucy

Voy en camino a la dirección que Natsu me indicó anoche. Ahora que lo pienso, ayer estaba actuando más extraño de lo normal. Si no me equivoco, tal vez comenzó cuando nombré lo de Sting... ¿En qué estoy pensando? Debe ser mi imaginación, no creo que me vea de esa forma.

"¿Y si así fuera?" Surge la pregunta en mi mente. No, definitivamente no es así, deja de hacer preguntas tontas, Lucy.

En menos de lo que espero encuentro una pequeña casa, algo descuidada, pero puede ser que alguien viva allí. Luego de acercarme un poco veo un cartel de madera clavado en el suelo. Dice "Happy", pero parece que algo está mal, aún para ser algo que pudo haber hecho por sí mismo, hay algo que no encaja.

De repente veo en el suelo algo que llama mi atención, otros dos trozos de madera no muy grandes a menos de dos metros de distancia, mi curiosidad me obliga a verlos de cerca. Entonces descubro que hay algo escrito. Les doy vueltas hasta que estoy conforme con lo que tengo al frente, queda el mensaje "Natsu &". En cuanto lo leo ya sé para donde va esto. Uno los pedazos en mis manos con el que está incrustado en el suelo, no me sorprende ver que encajan a la perfección. Aun así, siento un vacío en el estómago al ver esto, también tristeza. ¿Por qué tenían que hacer esto? Tratando de ponerme en su lugar, no me gustaría para nada encontrar algo así. Sí, sé que es un demonio de Zeref y todo eso, pero luego de estar con él por un tiempo me niego a creer que haya tenido malas intenciones en cualquier momento. Está solo y algo triste, pero puedo notar que en realidad es bueno. Miente solo para aparentar que está bien, es terrible en eso, pero prefiero dejarlo pasar porque siento que así es más fácil para él. No creo que haya sido capaz de engañar al gremio entero durante años solo para traicionarlos al final, siento que hay algo mal en eso que todos creen.

Bien, creo que no llegaré a ningún lado si sigo pensando en esto, es mejor terminar con lo que vine a hacer lo antes posible. Y para comenzar... ¿cómo se supone que le debo decir lo que pasa? Supongo que algo se me ocurrirá... eso espero.

Dejo cuidadosamente las partes caídas del letrero en el suelo y continúo mi camino, cuando llego a la puerta doy tres golpes y rezo porque un irritante y tierno gato azul esté dentro.

Luego de esperar alrededor de un minuto la puerta se abre. En ese instante desplazo mi vista hacia abajo y me encuentro con el gato que esperaba ver.

—¿Lucy? ¿Qué haces aquí? — pregunta, confundido. Tiene sentido, llevo algunos meses en el gremio y nunca había venido aquí.

—Hay algo de lo que tengo que hablar contigo ¿Puedo pasar?

—¿Sobre qué quieres hablar? —sigue con el mismo tono.

Está bien, este es el momento —Es sobre Natsu.

No pasa más de un segundo antes de que cierre la puerta de golpe.

—¡Vete! —exclama desde el otro lado. —Lo que sea puedes hablarlo con alguien más— su voz tiembla notablemente.

—No puedo. Eres el único— espero un poco antes de preguntar. —¿No te gustaría verlo de nuevo?

Pasan varios segundos de absoluto silencio.

—¿Happy?

La puerta se abre nuevamente, esta vez mucho más lento. Me entristece demasiado encontrar a Happy con los ojos llenos de lágrimas y limpiándose la nariz.

—Si es una broma ya no somos amigos...

Me agacho y limpio su cara con los dedos —No jugaría con algo así— digo con una leve y sincera sonrisa.