유독 한 ; toxic ;; yoonmin [pausada]

•13•

  TaeHyung se sacó su abrigo, para luego colgarlo en el perchero. JungKook, quien iba detrás de él, se sacó sus zapatos, y ambos se dirigieron a la cocina para comenzar a sacar las compras de las bolsas.

  — ¿Tae?— la suave voz de su novio lo llamó. El pelirrojo terminó de guardar el té y volteó, para encontrarse con la mirada preocupada del menor.

  — ¿Pasa algo?— preguntó levemente alarmado.

  El pelinegro suspiró, para cerrar suavemente la puerta de la cocina. TaeHyung sonrió— ¿Quieres mimos? Porque siempre estoy dispuesto a dártelos...

  Las mejillas del pelinegro tomaron rápidamente color, y le dió un suave golpe a su tonto novio— Claro que no, bobo. Solo quiero hablar.

  El pelirrojo se sobó el golpe, para luego hacer un puchero— ¿Y luego sí?

  — ¡TaeHyung!— lo regañó JungKook, tratando de mostrarse molesto, pero fallando. Besó castamente sus labios, para luego apoyar su cadera contra la encimera— Quiero hablar de JiMin hyung.

  El pelirrojo al instante se puso serio— Oh. ¿Te... Te molesta el que esté aquí?

  JungKook negó al instante— Claro que no. Sé que es alguien muy importante para tí y por lo que me has contado... Me alegra que esté aquí y no en otra parte. Aquí estará tranquilo por un tiempo, al menos.— dijo con un dejo de tristeza— Yo sólo q-quería preguntarte... ¿Crees que...?— suspiró, y se abrazó a si mismo sintiéndose triste, triste por el mejor amigo de su novio, ese chico amable que ahora dormía en la habitación de huéspedes luego de llorar amargamente por un amor que sólo parecía hacerle daño— ¿Crees que sufriera algún tipo de violencia?

  TaeHyung suspiró sentidamente— La verdad, le llevo dando vueltas a esa idea desde hace ya un tiempo. Esa vez que nos juntamos, hace más o menos una semana, o un poco más, él estaba muy angustiado. Lloraba a mares, apenas si podía hablar. Yo le pregunté— admitió el mayor con voz lúgubre—, pero me dijo que no era así. Quise creerle pero ahora... La idea calza perfectamente para mí.

  JungKook asintió con tristeza— Debemos ayudarlo de alguna manera.

   El pelirrojo mordisqueó su labio, preocupado. ¿Cómo podrían ayudarlo si el mayor se negaba a hablar del tema? TaeHyung había hecho pequeños intentos de hablar con JiMin, pero su mejor amigo evadía el tema al instante, diciendo que estaba bien. Se sentía tan frustrado...

  Estaba fallando. Le estaba fallando a su mejor amigo, y eso lo hacía sentirse estúpidamente inútil. Ah, era un tonto. Dejar solo a su JiMinnie por ese período de tiempo, tal vez él podría haber hecho algo, tal vez...

  TaeHyung abrió sus ojos levemente asombrado cuando sintió como su dongsaeng había comenzado a tirar suavemente de sus mejillas. No pudo evitar soltar una risita al ver como su Kookie fruncía su linda boquita con algo de preocupación— ¿Qué haces?— preguntó entre risas.

  — No te agobies, Tae. Veremos cómo ayudarle, ¿Sí?— el azabache dejó de tirar de sus mejillas para ahora acariciarlas con dulzura— Te estás culpando cuando no deberías. Lo sé.

  El pelirrojo sonrió con tristeza, para tomar las manos de su novio y acariciarlas con cariño— ¿Tan fácil de leer soy?

  — Sólo para mí, hyung.— susurró el menor, sonriendo con dulzura— Solo no pongas esa cara. No me gusta que estés triste. Me hace sentir triste también.

  El más alto asistió, para besar la frente de su tierno novio con dulzura— Pensaremos en algo. Lo prometo.

  JungKook lo abrazó, para luego besarlo con dulzura. Se mantuvieron unos instantes así, disfrutando del agradable roce de sus labios.

  El azabache cortó rápidamente el momento, para besar amorosamente la nariz de su hyung y proseguir con la tarea de acomodar las compras. Se sentía un poco más tranquilo ahora que había podido conversar levemente el tema con su novio. Juntos pensaría en cómo ayudar a JiMin.

  JungKook no era exactamente cercano al mayor, pero no podía evitar sentirse identificado con la situación del mayor. A fin de cuentas, él había conocido a TaeHyung sólo unas semanas después de haber roto con unos de sus ex-novios, a decir verdad, el que más lo había herido con sus palabras altivas y crueles al momento de dejarlo. TaeHyung había sido una especie de salvavidas para el menor, y no podía negar que de no haberlo conocido en un momento tan difícil para él, tal vez él no hubiese estado tan bien y feliz actualmente.

  Solo esperaba que JiMin encontrase a alguien que lo valorara tanto como TaeHyung lo hacía con él.

  JungKook suspiró. Realmente lo esperaba...

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Cortito y bonito ahq

Los capítulos no son especialmente largos, pero así me mantengo constante en las actualizaciones ❤

Perdonen cualquier error ;;

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