Conflictos Por Amor

Corazón Partido En Tres

Cuando entraron a la mansión todos los presentes las miraron. Los hermanos estaban sentados en el sofá mientras que Eddy estaba parado viendo a Ellis.

— Perdón por la tardanza. — Comentó Alisha sentándose en el regazo de Steve.

Por otro lado, Eddy se acerca a paso lento a Ellis. Él sabe que ella tenía algo de miedo y lo que menos quería era asustarla.

— Hola. — La saluda. — Mi nombre es Eddy King. — Extiende su mano y le sonríe.

— Mi nombre es Ellis Wang. — Estrecha su mano y Eddy se agacha para besarle sus nudillos.

— Encantado de conocerte. —

Ellis se sonroja y sonríe con timidez.

— Awww, es hermoso. — Susurra Alisha en el oido de Steve.

— De él sacamos todo lo caballeroso. —

Alisha sonríe.

Justo llega Sarah con una bandeja llenas de galletas con café.

— Que maleducados que son, ¿Cuándo me la van a presentar? — Pregunta Alisha refiriéndose Sarah.

— Alisha, ella es Sarah Lightwood, Sarah, ella es Alisha Wang. — Las presenta Liam.

— Espero que no seas la mucama roba maridos. — Lo dijo seriamente.

Sarah la mira y luego mira a los hermanos buscando alguna ayuda.

Alisha al ver su cara no pudo más y río a carcajadas.

— Es broma, mucho gusto Sarah. — Dice con una sonrisa.

Sarah asiente y se retira.

— No habla mucho verdad. —

Steve se encoje de hombros.

— A veces si, a veces no, depende de como esté. —

Alisha noto que Eddy quería sacar una conversación con Ellis, entonces Alisha le dio un pequeño empujón.

— Tío Eddy, ¿Por qué no llevas a mi tía a su nueva habitación? Solo es para que lo conozca. —

Eddy sonrío y miro a Ellis.

— Está bien. — Contesta Ellis no muy convencida.

Eddy la deja pasar para que suba la escalera primera y él le guiña el ojo a su chocolatito para luego subir las escaleras.

Alisha agarra dos galletas y se las come.

— Mmm, están riquísimas. — Dice agarrando otra.

— No es muy sano comer galletas. —

— Tampoco es muy sano que ustedes sean demasiado sexys. —

Tuche.

— Tengo mucha hambre y sueño. — Dice recostadose en el pecho de Steve.

— Creo que ya comiste algo, así que a dormir. —

Alisha no se mueve.

— Alisha... —

Ellos la ven y ya estaba dormida.

— Qué rápido. —

— ¡Bu! — Los asusta a los hermanos y ríe a carcajadas al ver su expresión.

— Creo que la niña ya se divirtio mucho por hoy. — Dice Steve.

Steve carga a su mamita y los cuatro van hacia la habitación de Liam donde la dejan sobre la muy cómoda cama.

La habitación no había cambiado mucho, en realidad nada, así que no había mucho por describir.

Alisha refriega sus ojos con sus manos.

— Duerme, cualquier cosa nosotros estaremos en el despacho. — Dice Andrew a su lado.

Alisha asiente y apoya su cabeza en la almohada.

Ella siente besos en su frente y luego escucha la puerta de la habitación cerrarse.

Ya era de noche, los hermanos salieron del despacho para avisarle a Sarah que prepare la comida.

Ellos entraron y la vieron lavando los trastes sucios.

— Sarah, prepara la cena y haz una torta de chocolate con frutillas por favor. — Comunica Liam.

Sarah deja de lavar y cierra la ganilla del agua.

— ¿Por qué ella está aquí? — Pregunta mirándolos.

— Ella en nuestra mate. — Contesta Steve.

— ¿Y yo qué fui para ustedes estos años? ¿Un simple juguete con que jugaron con mis sentimientos? — Pregunta enojada y dolida.

— Primero que nada nosotros no fuimos nada... — Lo interrumpen.

— Pero bien que disfrutaban de mis besos. —

Tuche.

— Quiero estar con ustedes. — Dice finalmente.

— Tenemos a nuestra mate. — Dice Andrew.

— Pero ¿Ustedes no sintieron nada por mi? —

— ... —

— Ustedes me aman. —

— ... —

— Y también a Alisha. —

— Solo prepara la comida, nosotros iremos a tomar aire fresco. —

Los hermanos salen por la puerta trasera y Sarah suspira de frustración y comienza a preparar la comida.

Sin embargo, lo que no saben es que alguien detrás de la puerta los estaba escuchando.

Ella sube las escaleras y se encierra en la habitación de Liam sin mirar atrás.