SEÑALES

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_ ¿La boda seguirá en pie? – le pregunto a Amy, quien permanecía en el banco, sentada a mi lado, en el parque del hospital, Luz jugaba en los columpios, siendo empujada por Janne – digo, con todo esto.

_ No sabría decirte – dice, tronando sus dedos, de seguro estaba ansiosa, cualquiera lo estaría, la familia de Walker había venido a visitarla y todo se volvió un caos, Toby termino largándose del lugar, perseguido por el padre de Sofia, mientras la madre se quedaba llorando a su lado – Todo se salió de nuestras manos.

_ Te entiendo – me encojo de hombros, empezaba a nevar nuevamente, escuche a Luz reír e imagine que jugaba en la nieve, sobe mis manos, intentando obtener calor – pero lo único que podemos hacer ahora es apoyarla.

_ Si, no hay de otra – murmuro, se incorporo y toco mi hombro, indicándome de su ida – iré a dentro, veré si Sofia necesita algo.

_ Está bien – respondí, sonriendo amablemente – decile que la quiero, mañana vendré a visitarla de nuevo.

_ ok

Llame a Janne, esta vino enseguida, me sugirió el irnos, ya el frio era muy notorio y Luz estornudaba mucho, lo que indicaba que seguramente tendría gripe, tome a mi princesa en mis brazos y caminamos de vuelta al auto, cuando estábamos en el estacionamiento, escuche quejas y reproches, provenientes de la parte superior de las escaleras que daban a la planta 2, le dije a mi amiga que entrara al auto, que necesitaba hacer algo y que cuidara por unos momentos a la niña; volví en mis pasos, siguiendo los ruidos, llegue unos segundos después, metiendo mis manos en mi abrigo.

_ Esta prohibido fumar en los hospitales – reproche, Toby solo gruño, sabía que ni caso me haría, pequeños sollozos se escuchaban, seguidos de uno que otro sorbo - ¿Qué piensas hacer?

_ ¿Es de tu incumbencia? – pregunto, tosiendo fuertemente, suspire, cruzándome de brazos – demonios, nos casaremos, lo he decidido, será apenas salga del hospital.

_ ¿Este domingo? – hable asombrada, estaba loco, ella no aguantaría demasiado tiempo afuera, estaba débil y sin fuerzas – es una locura y lo sabes.

_ Lo sé, joder, claro que lo sé – chillo, pegando fuertemente contra la pared, me sobre salte y retrocedí – pero... esto se sale de mis manos, puede morir en cualquier momento y quiero que sea mía cuanto antes.

"No puedo esperar más, la necesito demasiado"

Me quede en silencio, no sabia que responder, así que solo hice lo primero que se me ocurrió.

_Al demonio – maldecí, me acerque a Connor, extendiendo mi mano – dame un cigarrillo.

_ p...pero – tartamudeo por unos segundos, me pare firme, sin intención de aceptar un no como respuesta – está bien – me entrego uno y me lo metí en la boca.

El sonido de la mechera siendo encendida se extendió por el lugar, el humo no tardo en alcanzar mis pulmones, hace mucho no fumaba, como pude, traté de no toser demasiado, esto era una locura; Connor y Janne me mataría si me viera en estas. Exhale el humo y me apoye en el barandal.

_ Quizás debería posponerla unos cuantos días – susurro al final, sonando las llaves de su auto contra el metal de las escaleras, ya estaba más tranquilo.

_ ¿Quizás? – pregunte, dándole un codazo en el hombro.

_ Bueno, un definitivamente – tomo otra calada junto conmigo – pero solo una semana.

_ Eso será suficiente – respondí, lance el cigarrillo al suelo y lo aplaste con plantilla del zapato – me tengo que ir, Janne me espera en el auto – di media vuelta, dispuesta a marcharme.

_ Espera – pronuncio, instintivamente levante mi cabeza y me detuve – será mejor que comas estas mentas, Janne te matara si entras al auto oliendo a cigarro.

Sonríe ampliamente y regrese mis pasos, recibiendo una cajita de mentas.

_ Tenes razón.

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_ Me gustas... Me gustas...

_ Pero tu no a mi...

Abrí mis ojos, mi respiración era irregular, sudaba frio; mi garganta carraspeaba demasiado por lo que decidí bajar a tomar un vaso con agua, Sali de mi cama y me puse la bata que estaba en la silla. Me empezaba a doler la cabeza, rasque mi cabeza molesta, debía dejar de pensar tanto lo que aquella noche había pasado. No tenía oportunidad, él se había ido, aun cuando se buscó por tanto tiempo, jamás apareció rastro de su existencia, como si la tierra se lo hubiera tragado.

Estaba decidida, no debía pensar mas en todo esto, debía centrarme en mi niña y lo demás seria para después.

_ Debí comprar más pastillas – renegué, saliendo de la habitación y bajando las escaleras – ahora, tendré que prepararme para hablar con Janne.

Si, estaba super segura que ella sabia sobre la "fumadita" que me había pegado con Connor, durante todo el viaje no dijo nada mas y no hay que hablar por la tarde, apenas llego se encerró en su cuarto y no salió más. Bostece al llegar a la cocina, tome un vaso de la lacena y me serví el agua, tome lentamente, presionando mi cuerpo contra la lacena. Un ruido me saco de mis pensamientos, al principio creí que era mi imaginación, por lo que lo ignore y camine decidida en volver a mi habitación. Pero volvió a sonar, más fuerte, me quede pasmada al darme cuenta de donde provenía aquel ruido.

Camine rápido y abrí bruscamente el cuarto de Luz, entre despacio, dirigiéndome directo hacia la cama de mi niña, pose mi mano en su mejilla, estaba cálida y su respiración estaba calmada, tan tranquila y serena, sonreí inconscientemente; me acerque a ella y le di un suave beso en la frente. Volví a centrarme en la habitación, todo parecía ser normal, pude respirar tranquilamente al darme cuenta que aquel ruido provenía de la ventana, el viento hacía que las ramas del árbol chocaban contra el vidrio.

_ Mami... - susurro Luz, me estremecí por su llamada y giré bruscamente – está en la ventana.

_ ¿Quién esta en la ventana? – le pregunte, me acerque a ella y esta se aferro a mis brazos – decime pequeña – dije, acariciando sus cabellos.

_ el hombre de tu libro mami, de ese que me hablabas tanto...

"Jeff the Killer"

CAPITULO EXTRA CORTO


¿Por que he de temerte? [Jeff the killer]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora