Falling again» na jaemin

02.

02. Start the game.

Cualquiera que viera a Jaemin, definitivamente tendría ganas de ser amigo de él. Esta vez con su llegada no era la excepción. Muy por el contrario estaba yo, misma que hace dos años vivía a la sombra y a los amigos de Jaemin. Yo era la que pasaba más tiempo con él. Era la única que conocía a sus padres. Claro, eso antes de que todo el incidente sucediera. Después de él, volví a ser la yo solitaria y sin amigos que había sido antes.

Tae Ri estaba frente a mí, contándome cosas sobre los chicos del equipo de baloncesto que tanto le gustaban. Pero no era capaz de escuchar del todo sus historias. Más que nada por qué estaba absorta en mi sándwich, y en Na Jaemin, que estaba a dos mesas de la cual nosotras estábamos.

Sonreía como siempre. Y no le había costado nada hacer amigos de nuevo. Y me molestaba.

Había arruinado mi vida escolar y solo se había ido. Y de pronto sólo regresaba como si nada. No dudaba ni un poco que intentaría arruinar mi último año de alguna manera.

—Kim NoRim, tengo diez minutos hablando a lo tonto y estás en otro planeta. — Tae Ri chasqueo sus dedos frente a mis ojos y centré mi atención en ella. — ¿Que tanto miras?

Ella esperaba una respuesta. Así que solo señalé discretamente hacia atrás. Ella no volteó discretamente.

—El nuevo. ¿Qué tiene? ¿Te gusta?— Ella cuestionó y yo solté una gran carcajada.

—No, tonta. Es Jaemin. El chico que te conté. — Di otra mordida a mi sándwich.

— ¿Ese Jaemin?— Preguntó y yo asentí. De pronto su sonrisa característica no estaba y había sido sustituida por un entrecejo fruncido. — Ese bastardo.

—Ese bastardo viene hacia acá. — hable bajito, para que así solo Tae Ri escuchara. — ¿Qué diablos quiere?

Tae Ri se encogió de hombros y suspiró. Segundos después Jaemin se sentó a mi lado y pasó su brazo por mis hombros.

—Hola, mejor amiga. — Pude notar su sonrisa a medias, ya que evitaba a toda costa verlo de frente.

—Jaemin, te he dicho que no somos cercanos, deja de hacer esto. — Quité su brazo de mis hombros y él solo soltó una pequeña risa.

Me quitó lo que quedaba de mi sándwich y lo mordió. Sentí como el coraje empezó a subir y respire profundo.

—Na Jaemin. Deja de hacer esto. ¿Buscas molestarme? Bien, lo haces muy bien.

—No recordaba que fueras tan gruñona, NoRim. — Movió un poco mi flequillo y sonrió. Jaemin siempre había tenido una dentadura perfecta.

Decidí ignorarlo. Sin querer le había prestado más atención de la debida.

Pasó un rato y todo estaba en silencio. Tae Ri tenía una ceja enarcada mientras deslizaba el dedo por su celular. Señal clara de que estaba más que molesta.

—NoRim-ah. — Escuche su voz en mi oído y un escalofrío recorrió aquella parte. — ¿Tú amiga está molesta?— Preguntó y seguido de esto soplo en mi oído.

Tomándome completamente por sorpresa. Lo empuje ante tal acción y cubrí mi oído. El calor había hecho que los escalofríos hicieran una sensación extraña en mí.

—Na Jaemin. — Hablé y este me sonrió.

—Dime. — Se acercó, haciendo mínima la distancia que yo había hecho al empujarlo.

Tae Ri lo miraba con una expresión no del todo agradable. Pero sabía que no diría nada, a menos de que todo fuera a mayores.

— ¿Cómo debo pedírtelo?— La interrogación llegó hasta su rostro. Y por un momento me pareció tierno. Giró su rostro como si no entendiera. A este punto ya lo miraba de frente, pero evitaba a toda costa sus ojos. — De verdad. Cuando digo que no somos amigos, es completamente enserio. No sé qué tramas, pero detente ¿sí? No sé si lo recuerdas, pero terminamos mal la última vez, hace dos años...