Falling again» na jaemin

13.

13. sleep well, sweetheart

La única vez que Jaemin soltó mi mano en ese momento fue para abrir la puerta de mi habitación. Cuando nos adentramos en ella, Jaemin cerró la puerta. Esperaba que en cualquier momento colocara el pestillo en el seguro, pero en ningún momento escuché el clic. Jaemin me volteó a ver, después colocó sus manos a cada lado de mis hombros. Poco a poco se fue acercando.

¿Por qué diablos se acercaba?

—La enfermera dijo que descansaras un poco, así que hazlo NoRim-ah— Jaemin me empujó a la cama. Ciertamente ese hecho fue un poco doloroso, mi pie fue golpeado en forma de impacto con la base de mi cama. Cuando pude sostenerme bien y no era presa del dolor, volteé a ver a Jaemin con la peor de mis miradas. ¡De verdad había dolido!

Pero hubo algo que dolió más.

El sentir a Jaemin tirándose en mi cama encima de mí, sin ningún tipo de pudor era algo de otro nivel.

—¡Estás loco! — Grité intentando empujar su anatomía. Era inútil. Me dolía el cuerpo.

—Vas a descansar muy bien ahora, NoRim. — Me abrazó, aprisionando mis brazos entre los suyos y colocando su cabeza en mi pecho. — ¡Descansa, eh!

—No lo haré. — Hablé. Seguido de ello solté un suspiro y me empecé a mover, intentando desprenderlo de mí.

—¿Por qué no? — La presión en sus brazos se hizo presente a la vez que levantaba su cabeza para mirarme. Dios mío. ¿Por qué me sentía tan mal al tenerlo cerca? ¿Por qué me miraba de esa manera? — Woah, después de todo eres fea.

—¡Oye!

Su risa inundó la habitación. Sus dientes no estaban de más. Y pasmada quedé. Hacía tiempo que no prestaba atención a su risa. Sí, seguía siendo la misma, pero con un toque más maduro. Seguía teniendo la misma línea de expresión alrededor de sus ojos.

En ese instante dejó de importarme si me había llamado fea o no. Su risa estaba en cada una de mis células de entendimiento.

Es linda.

¿Qué?

¡NoRim, vuelve a tus sentidos!

Jaemin dejó de reír en un punto, y me soltó. Seguido de ello, puso cada una de sus manos a un lado de mi cabeza y levanto su cuerpo con ellas. Sus piernas se acomodaron a horcajadas de mí. Podía huir en el momento, pero su expresión me aprisionaba. ¿Por qué se había dado ese cambio tan repentino? Quiero decir; Su mirada era totalmente feroz. No podía describirla del todo.

A mi entendimiento vino lo peor cuando sus orbes empezaron a recorrer todo mi rostro y parte de mi torso.

Estaba vulnerable ante su mirada. Y era malo. Muy malo. Solo hay una cosa que puede seguir después de que dos humanos de sexo opuesto están en una cama, encerrados en una habitación.

Cerré los ojos al ver aquellas posibles situaciones en mi mente.

Y Jaemin rió.

Mis ojos se volvieron a abrir solo por una razón y fue por sentir una caricia húmeda en mi frente, misma que había sido provocada por los labios de Jaemin.

—Eres tan tierna en ocasiones NoRim. — Dijo al separar sus labios y despeinó mi cabello un poco; Aun a pesar de que ya estaba lo suficientemente despeinada. — Duerme un poco ¿Esta bien? Estaré aquí y contrario a lo que piensas; no, no haré nada.

¿Que es eso que pienso, Jaemin?

Con cuidado bajó de mí y de la cama y se sentó en el piso de mi habitación, recargó su mentón en el colchón de la cama y sonrió una vez. Segundos después su rostro tomo un color un poco rojo y se dio rápidamente la vuelta, dándome completamente la espalda.