Capítulo 17 - Los muchachos en la fila.
Caminaba junto con Samuel por las calles céntricas de la ciudad. Ambos ultimaban los preparativos para el campamento. Habían aprovechado que hoy no habían tenido clases y que tenían ganas de verse para juntarse e ir a comprar un poco de alcohol y demás cosas que del colegio les pedían para el viaje. El sol ya se había ocultado y la temperatura había bajado. Nicolás que todavía estaba algo enfermo traía puesto un buzo con capucha y sobre eso una campera gruesa de color azul marino. A diferencia del pelinegro Samuel había salido del club y se había encontrado con el López. Traía apenas el uniforme del club así que sentía algo de frío.
- ¿Te hace frío? - Se preocupó Nicolás.
- Me olvidé la campera en el vestuario - comentó afirmando con su cabeza.
Nico negó con algo de gracia. Se le hacía gracioso ver a Samuel con el pantalón deportivo largo del club y su bolso cruzándole el pecho, pero de camiseta manga corta. Se apiadó de él y se quitó su campera.
- Agárrame esto un momento - le pasó su campera y se quitó su buzo.
- Que haces Nico hace frío y vos estabas resfriado hasta ayer - lo retó su compañero sin entender lo que pasaba.
Nico tomó su campera y se la puso de nuevo y luego tendió su brazo con el buzo y se lo ofreció a él rapado.
- Toma. Te estás muriendo de frío Samu.
- Gracias lindo - tomó la prenda y le besó la mejilla a su acompañante.
Continuaron caminando hacia la parada del autobús una vez que consiguieron todo lo que necesitaban. Cuando iban llegando a una esquina alguien que venía corriendo chocó a Nico lo que provocó que este cayera al suelo.
- Che pibe por qué no te fijas antes de cruzarte así - Soltó Samuel super enojado mientras levantaba a Nico.
- ¡Auch! - se limitó a quejarse el pelinegro.
- Uy mil disculpas yo no los vi estoy apurado y por eso corr... - habló arrepentido el muchacho, pero se detuvo de golpe cuando cruzó miradas con Nicolás.
El López se quedó boquiabierto y tras unos segundos se sorpresa le regaló una sonrisa y el chico también. Samuel frunció el ceño al notar algo raro.
- ¡Vos! - dijo el joven que era mayor que los chicos estrechándole la mano al López.
Llevaba puesto un pantalón de vestir negro y una camisa celeste metida hacia dentro que le quedaba muy justa haciendo que sus músculos se marcasen. Nico se puso rojo al reconocerlo.
- Hola - le correspondió el saludo algo nervioso.
- Que bueno es volver a verte.
- ¿Sí? Jeje lo mismo digo yo.
El muchacho tenía el cabello rubio era alto y tenía 20 años y un terrible cuerpo con los abdominales bien marcados y el pecho bien definido y sin olvidarse de sus bíceps el pelinegro comenzó a morderse el labio. El mayor lo notó y sonrió más aún.
- Por cierto, él es Samuel, un amigo - presentó a su compañero que no estaba para nada contento con lo que pasaba.
- ¿Quién es él? - formuló inmediatamente el rapado.
- Soy Agustín mucho gusto.
- También es un amigo como vos - comentó el más bajito de todos.
- ¿Como yo?
A Samuel le dio muchos celos aquella situación. ¿A qué se refería a que ese tal Agustín era un amigo como él? Sam había besado a Nicolás ¿acaso a eso se refería?
Nico y el joven intercambiaron números y quedaron en comunicarse se despidieron con un beso en la mejilla y el rapado quedó super enojado.
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Complementos
Teen FictionAlgunas personas están diseñadas para completar a otras. Dos adolescentes completamente diferentes el uno del otro se conocen y desde entonces todo cambia... Uno pensaba que la vida era aburrida, que el universo no había planeado nada para el. El ot...