Felíz cumpleaños

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Capítulo 29 - Felíz cumpleaños.

La vuelta de Nicolás a su ciudad había sido normal y hasta aburrida. Su madre había pasado a buscarlos al aeropuerto junto con Dani quien apenas los dejaba respirar pues en este tiempo de su ausencia los había extrañado mucho. Nicole mucho no le dijo después de su discusión. Los gemelos estaban distantes y eso Susana lo notó.

Habían pasado unos días y Nicolás actuaba como si lo que sabía de Natalia nunca hubiera pasado. No le había mencionado aquello a nadie y mucho menos a su novio secreto

La relación entre el rubio y Nico estaba algo estancada pues apenas si se veían en el colegio y en el club. Fuera de eso ambos estaban ocupados con los estudios. Las circunstancias le habían caído bien al pelinegro pues estaba raro. Y es que no sabía que tenía que hacer. Sabía este gran secreto que Gerónimo merecía conocer, pero podría significar el fin de su romance. "Este es el siglo veintiuno nadie se separa o se casa por un bebé" pensaba a menudo cuando tenía dudas respecto a qué pasaría si se lo contaba.

También le hacía ruido el hecho de que Natalia no le hubiese contado nada a Gerónimo, ella tenía pensado hacerlo o por lo menos eso había entendido Nico de su charla en los baños. Ya había pasado unos días desde la vuelta. Era viernes y tocaba ver a su chico pues hoy, trece de octubre de 2017, era su cumpleaños y el pelinegro tenía pensado llevarlo a cenar a un sitio para festejar. Ya había arreglado con Agustín para llevar a su familia y amigos a el restaurante favorito del rubio.

Nicolás se encontraba tumbado en el sofá de su casa ya listo esperando que lo pasaran a buscar. Tenía su celular en las manos mientras revisaba las historias de Instagram, mientras pasaba las mismas se topó con una foto de Natalia quien se veía algo mal, con ojeras a pesar del maquillaje que tenía y hasta la había notado algo más delgada. A Nico se le había borrado la sonrisa que llevaba, su rostro se tornó serio, tenía un debate interno con respecto a ella. Estaba entre hacer lo correcto y contarle la verdad a Gero o hacer como si nunca hubiera sabido. Por suerte para el pelinegro apareció Daniel y se le tiró encima abrazándolo.

- ¿A dónde vas vestido tan lindo? - le preguntó el niño reparando en cómo estaba su hermano mayor.

- Voy a cenar con Gero y los chicos, hoy es su cumpleaños - le respondió una vez se habían separado.

- Vos y Gero son muy buenos amigos.

- Lo somos, nos queremos mucho - le contestó sonriéndole al pequeño.

- Me gustaría tener una amistad como la tuya con Gero - expresó Dani - Siempre se están llamando y juegan juntos a la play y van a rugby juntos y hasta se dan besos.

Nico casi se ahoga con saliva al escuchar lo último.

- ¿Como que nos damos besos?

- Yo te vi el otro día cuando terminó el partido de rugby como él te besaba para despedirte. Fui a buscarte al vestuario. Se que me dijiste que no era tu novio, pero también me dijiste que los amigos se dan besos.

- ¡Dani espiar está mal! - soltó sin saber cómo reaccionar con lo que su hermanito decía.

- Lo siento - soltó cabizbajo.

- Está bien. Pero no lo hagas de nuevo - dijo para revolver el cabello del niño - Ven aquí - dijo y él y su hermano volvieron a abrazarse.

Hubo un tiempo de silencio, silencio que su hermanito interrumpió para decir algo.

- Sabes... Eh decidido que cuando sea grande seré gay, como vos hermano.

Nico le sonrió con ternura. Daniel era un niño, no entendía muy bien como esto de la sexualidad funcionaba. El mayor le dio un beso en la frente y negó con la cabeza. A este punto llegaba el amor que le tenía su hermano, ni siquiera sabía lo que significaba ser gay o si se trataba de algo bueno o malo, Dani admiraba a el mayor de los López así que si su hermano jugaba al rugby, él quería hacerlo también y si su hermano era gay, entonces él también lo sería

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