꒰꒰ ❛ ❏ A :: ❝ Gilbert, si tú hubieses sido Romeo, ni siquiera habrías pensado en besarme ❞
APRIL 23rd, 2O18
( gilbert blythe )
( written by dingxs )
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( s1 > s3 )
( cover by fioregello )
#1 puesto en los Premios Eras, Me...
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autumn; ( CAPÍTULO SEIS )
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LA CASA DE LOS GILLIS HABÍA SUFRIDO MUCHAS CONSECUENCIAS. La familia no tendría lugar para alojarse hasta que los hombres pudieran reconstruir todo y reemplazar la madera chamuscada. El señor Gillis estaba furioso consigo mismo, pues se culpaba recordándo que había dejado la leña en el fuego por toda la noche, y eso causó que su vivienda se incendiara.
Por otro lado, Anne Shirley-Cuthbert estaba siendo alabada por la mayoría de gente, pues el fuego había cedido gracias a su inteligencia y valentía para entrar al lugar en llamas y cerrar todas las puertas. Por supuesto que había tenido ayuda, pero Autumn no iba a opacar la aceptación que estaba recibiendo la pelirroja, por lo que le pidió que lo mantuvieran como un secreto.
Para compensarlo, Anne la invitó a Green Gables más tarde para cocinar galletas y charlar un rato, Ruby Gillis estaría allí debido a que se hospedaría en la casa de los Cuthbert. La castaña aceptó antes de que sus padres la dejaran, pero al ser astuta logró convencerlos sin mentirles. " Iré a ver a Ruby un rato, quiero ver cómo se encuentra " fue su excusa, la cual era cierta, después de todo sí visitaría a la pequeña rubia.
Tomó su canasta, guardando un poco del jugo de arándanos que su madre había comprado en Charlottetown, y emprendió su camino después de despedirse de sus padres y recibir las mismas advertencias de todos los días. Por lo general, el camino hacia Green Gables era bastante divertido, pues cruzaba muchos árboles o tenía la posibilidad de ver más flores, eso y el hecho de que parecían haber más pájaros cantar por allí que en el resto de Avonlea.
Resultó ser que, en realidad, disfrutaba más el tramo que recorría desde su hogar hasta el de Anne, que el que debía hacer hasta la escuela. Era más pacífico, tranquilo y callado, dándole lugar a pensar infinidades de historias nuevas que le ayudaban a pasar el rato.
Para cuando arribó a Green Gables, se cruzó con un pequeño saliendo del establo, quien le dio la bienvenida moviendo su sombrero.
