Strong

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P.D.V. de Liam

Tomé sus manos entre las mías entrelazado nuestros dedos. Miré directo a sus ojos verdes, y sonreí. Kíara... Mi hermosa Kiara.. apretó mis manos, éramos inseparables a pesar de que éramos como dos barcos amarrados entre sí a los cuales las olas querían separar.. Chocaban contra nosotros de todas las direcciones.. Pero haría lo que fuera para salvarlo.. Mis ojos se llenaron de lágrimas.. Sabía lo que estaba haciendo, así que sólo seguí sonriendo conteniendo las lágrimas a duras penas. Sus labios formaron una sonrisa correspondiendo a la mía.. Casi podia sentir nuestros corazones latiendo al mismo ritmo calmado, como cuando termina un libro... con todas las páginas que escribimos entre nosotros, páginas sin fin.. En nuestras miradas están las mil palabras que no estabmos diciendo, pero... No quiero esperar más.. No quiero esperar a que se haya ido.. Así que aún mirandola sólo a ella, a pesar de que la gente a nuestro alrdedor abunda hoy... levanto el velo semi transparente que cubre su rostro y acarició su pálida mejilla con suavidad.
-Kiara.. - empiezo y ella me mira con ojos brillantes. - Lo siento.. -su sonrisa desaparece ante mis palabras y siento que su agarre en mis manos se afloja, pero sólo aprieto más sus manos entre las mías -Siento decir que te necesito, cuando nos conocimos me dijiste que nunca necesitara de tí, pero... No me importa necesitarte porque no temo al amor... Estar lejos de tí me hace débil... Acaso es tan malo? Es tan malo que tú seas mi fortaleza? Kiara te amo, y quiero compartir contigo todos los días que nos sean posibles.. -Una lágrima resbala por su mejilla y se la seco con el pulgar. -Acepta ser mi esposa, bebé.. -pido en voz baja y calmada. Ella asiente y yo deslizó el anillo en su dedo. La veo mirar el anillo y luego tomar aire dificultosamente..
-Liam.. - dice, su voz baja y rasposa.. -Me has enseñado que... Mucho amor se desperdicia.. porque la gente tiene miedo.. y sólo supera y sigue adelante para detener el dolor.. Se aleja para no terminar con el corazón roto.. Huye de sus sentimientos.. pero he terminado de huir... ya no huyo de nada, y tú... tu me haces fuerte Liam... y no hay nada malo en eso porque gracias a ti.. -la voz se le quebró y yo acaricie su mano lentamente con la punta de los dedos. - Gracias a ti he dejado de temer... Ya no tengo miedo del amor, porque siempre te llevare conmigo y tu siempre me llevaras contigo, porque tu me haces fuerte... Acepta ser mi esposo Liam.. -pidió y sonreí antes de pronunciar un tembloroso "acepto" y sentir la argolla deslizarse por mi dedo
-Y así los declaro Marido y Mujer.. -dijo el sacerdote sonriendonos -ya puede besar a la novia -me dijo y guiño un ojo haciéndome reír antes de acunar el delicado rostro de mi esposa entre mis manos y besar suavemente sus labios. La multitud a nuestras espaldas rompió en aplausos y silbidos... Ella era mi esposa..

Dos semanas después...

-Abrazame fuerte -pide ella y yo me acomodo en la pequeña cama de hospital a su lado, sosteniendola contra mi pecho y sintiendo sus lentas respiraciones
-Te amo.. -susurro enterrando el rostro en su pelo.
-Lo siento tanto Liam.. -dice con voz débil y yo niego con la cabeza.
-No lo sientas amor.. Sólo sujetate a mi corazón por siempre.. Estarás siempre conmigo y yo contigo porque nos pertenecemos el uno al otro.. -digo en un susurro por miedo a que se quiebre mi voz si hablo más alto.. la siento asentir contra mi pecho y momentos después pequeños temblores que me indican que esta llorando en silencio..
-No llores cielo.. -digo acariciando su pelo y conteniendo yo mismo las lágrimas.
-Te... amo.. -dice ella y escucho el sonido de la máquina que marca sus latidos ir cada vez más lento.
-Tu me haces fuerte, tu amor siempre me hará fuerte-le digo besando su frente, dejando las lágrimas salir, dejándolas por fin expresar lo que siento y contengo frente a ella.
-sé feliz Liam.. -dice ella y al separarme la veo cerrar los ojos. Su respiración se vuelve superficial. Despacio extiendo la mano para llamar a la enfermera. Presiono el botón y luego beso sus labios una última vez.
-Eres mi fortaleza, siempre lo serás.. -digo nuevamente... Y un largo pitido al momento en que la enfermera entra al cuarto me dice que mi pequeña ya no está allí.. lo unico que me queda es la fuerza del amor que me dejó... Tras meses y meses luchando contra una deficiencia cardiaca, su cuerpo de rendía y yo debía dejarla ir.. Pero ella siempre me haría fuerte...

One Shots de One DirectionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora