Un par de pelinegros se besaban dulcemente bajo la mirada alarmada de una rubia que empezó a toser para hacer que ambos se dieran cuenta del lugar donde estaban.
Cof cof cof, escucharon los jovencitos separándose lentamente el uno del otro mientras sus mejillas se teñían de carmín al ver que su mentira había sido desenmascarada por ellos mismo frente a los ojos de la rubia.
Creo que no es correcto lo que están haciendo, dijo la rubia tratando de mantener la calma.
¿Qué?, dijo Gokú.
¿Acaso piensa que es malo el amor señorita?, dijo Milk con dulzura mientras sus mejilla retomaban su color natural.
No, no es malo pero lo de ustedes dos no puede ser, respondió la rubia.
No le diga nada a los señores del internado, no queremos que nos separen, ¡por favor¡ decía desesperado Gokú.
Creo que en su caso si será mejor que esten separados, respondió la rubia con nostalgia.
No, si me separan de mi Gokú yo muero de tristeza, dijo Milk con voz quebrada.
Son muy jóvenes están ilusionados, tal vez el vivir tanto tiempo juntos los hizo confundirse, pero ya verán que cuando traten a otros chicos y chicas de su edad, se darán cuenta que esto solo es una ilusión,........, decía la rubia siendo interrumpida por el par de pelinegros.
No, nosotros no queremos nada con otra persona, nosotros nos amamos, dijeron los pelinegros.
Pero ello está mal, son hermanos, dijo la rubia.
Señorita ayúdenos, no queremos que nos separen, decía Milk sollozando mientras el jovencito de cabello alborotado le daba un tierno beso en la cabeza al tiempo que le decía: Cálmate mi niña.
No puedo ayudarlos, así quisiera no puedo hacerlo, respondió la rubia con nostalgia mientras pensaba: No puedo creerlo mis sospechas resultaron ciertas, estos niños están enamorados. Ellos no tienen la culpa después de todo, son tan dulces e inocentes.
Luego de algunos minutos de vuelo los helicópteros aterrizaron en un gigantesco puerto aéreo.
¿A dónde nos llevaran?, dijo Gokú.
Les tomaran sus datos y luego serán trasladados a una carceleta de la estación policial allí esperaran el momento en que se los llame para que se los interrogue, ahora si bajemos, dijo la rubia.
En cuanto los pelinegros bajaron se vieron rodeados por un grupo de hombres que los llevaron hacia el interior del lugar mientras la rubia camino hacia sus amigos.
¿Qué te sucede amiga?, dijo la peli azul al ver el rostro de nostalgia y desconcierto de su amiga.
Lo que les decía era cierto, respondió la rubia.
¿A qué te refieres rubiecita?, dijo Krilín.
Están enamorados, respondió la rubia dejando boqui abiertos a sus amigos.
Que cosas dices mujer loca, dijo Vegueta al salir de su desconcierto.
Se besaron delante de mí, yo no lo alucine, lo vi y fue un beso lleno de tanta dulzura que me conmovió el alma, hubieran visto como suplicaron para que los ayudara a que no los separasen, respondió la rubia con nostalgia.
Pues ahora con mucha más razón deben estar separados, una relación así no puede seguir, dijo Vegueta.
Pobrecillos, la soledad debió empujarlos a cometer un pecado así, dijo Bulma.
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"Cautivos de amor"
RomanceGokú y Milk perdieron a sus padres en un accidente siendo ellos los únicos sobrevivientes de este, ambos viven desde niños solos en un bello bosque desarrollando ambos sentimientos mutuos conforme van creciendo.