Capítulo 24: "Reencuentro: Un bello día"

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(Últimos capítulos)

Un jovencito de cabello alborotado caminaba impaciente dentro de su nueva habitación mientras pensaba: A qué hora vendrá la señorita Bulma, ella me dijo que en cuanto salga de su trabajo vendría por mí para ir a ver a mi niña.

El pensamiento del jovencito se vio interrumpido por el sonido de la puerta de la habitación.

Toc toc toc

Señorita Bulma, dijo Gokú mientras corrió a abrir la puerta.

Hola hermoso, soy yo, dijo de manera coqueta Marón.

Pensé que eras la señorita Bulma, respondió el joven de cabello alborotado con decepción.

Pues mi primi aún no llega pero no importa yo vine para distraerte un poco, decía la coqueta peli azul mientras intentaba acariciar son su mano el rostro del joven de cabello alborotado quien retrocedió al notar las intenciones de la joven.

Saldré a esperar a la señorita Bulma fuera, dijo Gokú pasando rápidamente junto a la peli azul.

Espérame hermoso, podemos entretenernos un rato,......, decía Marón al tiempo que escucho: Ya estoy aquí.

¡Señorita Bulma¡ dijo Gokú.

Hay Gokusito, ya deja eso de señorita Bulma, solo Bulma, por favor, dijo la peli azul sonriendo mientras la otra peli azul movió su boca con molestia.

Está bien, Bulma, ¿ya puedes llevarme con mi angelito bello?, decía Gokú.

Sí, claro que si, por eso estoy aquí, respondió la peli azul sonriendo.

Los acompaño, dijo Marón.

Marón, quédate mejor apoyando a mamá, ¡por favor¡ dijo Bulma para luego mirar al joven de cabello alborotado e indicarle con la mirada que lo siguiera.

Sí, claro, respondió con molestia Marón.

Mientras tanto: "Casa Ouji"

Un joven cabello de flama platicaba con una pelinegra en el jardín de la casa.

Me alegra que te haya gustado como quedo tu habitación, mis padres y Table se encargaron de decorarla para ti, decía Vegueta.

Pues gracias joven Vegueta, respondió Milk.

Niña, ya te he dicho que solo Vegueta, ya eres mi hermanita al igual que la de Table, dijo Vegueta sonriendo.

Es que aún no me acostumbro a ello, dijo Milk.

Bueno, si no puedes decirme hermano, ni llamarme por mi nombre, dime primo, ¿te parece?, dijo Vegueta sonriendo.

Si, primo, respondió la pelinegra sonriendo.

Bueno pequeña Milk, vamos para seguirte mostrando el jardín de la casa, dijo Vegueta sonriendo.

Si, respondió la pelinegra.

Minutos después:

Mientras la pelinegra miraba unas flores, el joven de cabello de flama recibió una llamada.

¿Dime linda?, dijo Vegueta.

Ya estamos fuera de tu casa, no le has dicho nada, ¿verdad?, decía una voz a través de la línea telefónica.

No linda, claro que no, dijo Vegueta.

Entonces ábrenos sin que ella note que la dejaste sola, escucho Vegueta.

"Cautivos de amor"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora