"Cautivos de amor"

Capítulo 30: "Epílogo"

En una modesta casita, bajo la suave melodía de una canción un par de jovencitos pelinegros se encontraban bailando junto al otro con los ojos cerrados mientras su rostro irradiaba felicidad.

A los pocos minutos la música acabo y el par de jovencitos abrieron sus ojos lentamente para decir simultáneamente: ¡Feliz aniversario¡ mientras se miraban a los ojos con dulzura.

Un año, hoy cumplimos un año desde que nos casamos, decía Milk con dulzura.

Si, parece un sueño, ¿no?, dijo Gokú dándole suaves besos en el rostro de su joven esposa.

Si, parece un sueño, decía Milk mientras cerraba los ojos al sentir las caricias de su amado en su rostro.

Tengo muchos planes para hoy, decía Gokú deteniendo sus besos.

¿Cuáles?, dijo Milk con dulzura abriendo sus ojos.

Ya lo sabrás, pero antes respóndeme algo, decía como niño el jovencito de cabello alborotado tomando las manos de la pelinegra.

¿Qué?, dijo Milk sonriendo.

¿Hiciste pastel de manzana?, pregunto Gokú.

Si, por supuesto, respondió Milk dulcemente.

Eres maravillosa, dijo Gokú tomándola de la cintura para dar vueltas con ella mientras la pelinegra sonreía.

Luego de algunos minutos el joven de cabello alborotado dejo de girar con su esposa y la beso con dulzura en los labios mientras esta sonreía.

Minutos después:

La pelinegra junto al joven de cabello alborotado guardaban en un pequeño canasto todo lo necesario para su día de campo.

Creo que ya está todo, decía Milk mientras miraba el canasto.

Falta el pastel, dijo Gokú sonriendo.

Si lo se cariño pero ello ira en otro canasto, respondió la pelinegra sonriendo mientras tomaba un pastel de manzana que había preparado para colocarlo en un pequeño canasto.

Ahora si todo está conforme, dijo Gokú sonriendo.

Entonces es hora de partir, respondió Milk.

Si mi angelito bello, dijo Gokú tomando la canasta más pesada mientras que con su mano libre tomaba la mano de su amada.

El par de pelinegros salieron de su cabaña y caminaron por algunos minutos hacia su lago, como ellos lo llamaban al lago que había en el bosque.

Al llegar a este, los pelinegros sacaron un mantel que había en una canasta y lo colocaron en el piso y sobre este colocaron plastos, dos vasos, una jarra, utensilios, un canasto con frutos, una olla y un pastel.

¿Gustas probarlo?, dijo Milk mirando el pastel.

Si, sabes que me fascina el pastel de manzana que preparas mi amor, respondió Gokú.

Entonces te serviré una porción de una vez, dijo Milk sonriendo mientras cortaba una rebanada del mismo.

Luego de algunos minutos el par de jovencitos comían su pastel mientras platicaban.

Sin duda este mes la cosecha de rábanos será bastante buena, el señor Roshi me dijo que nos la comprara toda, decía Gokú feliz.

Esa es una gran noticia, dijo Milk feliz.

Si, lo se angelito bello, es una gran noticia, sin duda la producción de rábanos y lechugas han sido las mejores este año, respondió Gokú mientras mordía su rebanada de pastel.