confuso

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Todo era una maldito caos.

Todo estaba en su contra, Deku alguien sin particularidad estaba siendo el mejor de la clase.

Mientras él trabajaba duro era superado no solo por Deku sino por sus demás compañeros.

Ya no era especial.

Ya no era el mejor.

Todos eran diferentes y poseían habilidades asombrosas.

Y él se quedaba atrás.

En los primeros entrenamientos solo escuchaba sus errores y alabanzas a sus otros compañeros.

Odiaba ver a su inútil amigo lastimarse cada que usaba su poder.

Odiaba no poder detener su sueño de ser un héroe.

Como protejer a alguien que constantemente se metía en problemas.

El tiempo avanzaba y solo se frustraba más y más mientras el peliverde sonreía cada día y mostraba esa singular sonrisa a todos, cuando él seguía estancado.

El festival deportivo era su oportunidad, pero no solo la suya la de todos, cada uno luchaba por obtener un lugar y sobresalir del resto.

El mitad-mitad se atrevió a retar a al peliverde pasando por completo de él, como si no importará, como si no fuera digno de ser retado.

Quiso gritarle un par de cosas pero terminó escuchando una incómoda plática de su pasado.

En la batallas se contuvo de gritar apoyo  al de ojos verdes, de tanto apretar sus puños, sus manos estaban blancas, mordía con insistencia su labio y su mal humor era mucho más grande que el de siempre, solo su autoproclamado amigo el pelos pichudo lo noto, le aconsejo dar su apoyo a Midoriya, pero no lo hizo.

Solo observó cómo esté lograba destacar y ganar.

En gran parte saco su frustración contra la perra de cara redonda lucho con todo, demostrando que no bajaría la guardia contra nadie, nunca más iba a confiarse y dió todo de sí y ganó.

Pero el peliverde lo miraba con reproche y trizteza, ¿cuanto más iba a soportar esa expresión que solo ponía al verlo?

La batalla de su Deku contra Todoroki le puso los nervios de punta, en cualquier momento iba a saltar a la arena a ayudar a su chico especial, pero algo se lo impedía y era la esperanza de verlo triunfando, pese al dolor que veía en él, se negaba a renunciar y al final cayó vencido.

Se obligó a sí mismo a no verlo en la enfermería.

Pero estaba bien ya que él enfrentaría al bastardo mitad-mitad y ganaría en nombre de Deku.

Pero este tenía su mente en otro lado y seguía negándose a usar su fuego, ¿a caso todos lo menospreciaban?

En su desperecio atacó con fuerza y ganó, pero era una victoria vacía.

Mirar esa maldita medalla se lo recordaba día a día, no era fuerte y alguien más se rindió dándole la victoria.

Se odio y quizo ser más fuete.

Ni cuando se enfrentó a los villanos, se sintió tan miserable.

Ese día al menos pudo vencer a algunos, aunque que no valían la pena.

Luchar con ayuda no era lo suyo y ver a su amigo de la infancia enfrentar sin miedo a sus oponente fue especial, pero aterrador.

Si no fuera por Allá Might estrían en las garras de los villanos, ni su maestro fue rival en aquella ocasión, recordarlo era frustrante.

La aplicación de esos villanos fue tan repentina que solo algunos estudiantes  verdaderamente aptos tomaron la iniciativa y lucharon contra esas basuras, solo había unos cuantos que valían la pena y tanto Bakugo como Todoroki llegaron hasta ellos.

Pero eran demaciado para ellos, solo All Might logro poner  un alto a estos singulares villanos.

El Nomu era sorprendentemente fuerte tanto que ya no podía más, pero delante de sus estudiantes, tenía que mostrarse seguro y salvar a sus chicos.

Sacando fuerzas ya no sabía bien de donde lucho con ímpetu antes que su heredero fuera en su ayuda con lo el poco control que tenía sobre el recién adquirido poder.

Nadie se dió cuenta y ente los alumnos fue un héroe.

Pero Katsuki noto algo, no le dió importancia en ese momento.

Pero conforme pasaba el tiempo tenía la sensación de que el poder de Deku era similar a otro.

Por un tiempo estubo tranquilo pero su mete seguía siendo un caos.

Luego de una semana entrenando en agencias pudo darse cuenta que Izuku de nuevo había dado un salto enorme en cuanto a su agilidad y fuerza.

Otra vez fue superado.

Todos avanzaban y él se quedaba atrás.

Mientras más observaba a su competencia, más aprendía de ellos y en cierto punto dejo dejo de verlos como enemigos y buscar puntos débiles y solo se concentró en superarlos a todos.

Solo tenía que ser el mejor, el mejor, el mejor, ¿el mejor qué?

Siempre gritaba que sería el mejor héroe, superando a sus compañeros y a All Might, ser el héroe número 1.

Y en cierto punto comenzó a pensar así.

- quiero hablar contigo - se plantó frente a él, su amigo de la infancia en el parque en que solían jugar de niños

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- quiero hablar contigo - se plantó frente a él, su amigo de la infancia en el parque en que solían jugar de niños.

- no tengo tiempo nerd - ya tenía un tiempo triste, tantos pensamientos lo tenían agobiado.

- ¿solo quiero saber qué planes tienes?, ¿en verdad planeas ser un héroe?, ¿o piensas traicionar a todos tus amigos?

- tsk...yo no tengo amigos - solo quería irse pero esa mirada penetrante se lo negaba.

- se bien como te trata Kirishima, se que son mejores amigos, yo solo quiero que me digas que no sigues con la idea de ser ...un villano - no supo en que momento lo tomo del cuello de la chaqueta y lo miraba con lágrimas.

- alejate nerd - lo empujó - yo haré lo que yo quiera - se dió vuelta y apenas a dos pasos se detubo pues un peso le impidió caminar más.

- aún quiero ser tu amigo - susurro contra su espalda en el abrazo que se apresuró a darle y lloró por unos minutos antes de caer al piso por un fuerte empujón.

Mientras él seguía llorando en el piso, Katsuki solo salió corriendo, no quería que nadie viera que también lloró ante ese abrazo, la cercanía del peliverde le hacía mal, comenzaba a dudar.

Tenía tantas dudas, tantos pensamientos encontrados, tanta mierda en su cabeza que pensaba que explotaría en cualquier momento.

Lo único bueno es que sus padres viajaban tanto que era raro el verlos en casa y esto le permitía pensar en soledad sobre su siguiente paso.

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Qué piensan que hará???

Ni Héroe Ni VillanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora