Ni Héroe Ni Villano

FIN

Llegó al cementerio imponiendo su presencia pero él seguía sin ver más aya de su nariz, tan perdido en su mundo que ni siquiera murmuraba y solo estaba de pie en ese lugar.

Dejo caer sin cuidado el ramo de rosas blancas que compró en un local antes de entrar a ese lugar, eso pareció mover un poco al peliverde.

- llora - pidió con tono fuerte.

- ¿Kacchan? - salió de trance al escuchar esa voz.

- solo vienes aquí a ver esa lápida, llora - no lo veía a los ojos, se entretuvo mirando la lápida, el grabado, las flores que pese al tiempo seguían llevando las personas que aún lo recordaban con amor y gratitud, no dejando ni que se marchitan  para llevar nuevas flores.

- me tranquiliza venir a este lugar.

- pensé que le herían una estatua o algo así - se burlo al imaginar todo un museo en su nombre.

- se encuentra en el centro, cerca del museo para que sea visitada por todas las personas - respondió aún con mirada en el rubio que seguía sin verlo directamente.

- claro - solo a Deku podía ocurriese le algo así, un museo enorme exclusivo de All Might y una estatua - está bien si lloras.

- pero qué dices, solo quería hablarle....

- está muerto no te va a responder - no era nada amable, pero era Bakugo Katsuki, nunca era amable con nadie...

- eso lo sé - miro la lápida con dolor.

- todos están preocupados por ti - Deku lo miro de nuevo - eras su favorito - lo miro a los ojos.

- no entiendo...

- aún no iba a regresar Deku, aún me faltaban un par de años en mi entrenamiento - dió un paso para estar más cerca - adelante mi regreso...

- ¿porque?

- supe de personas con quirks poderosos que vivían en ciertas islas lejanas, fue difícil encontrarlos y aún más que me permitieran quedarme, fue una tortura conseguir un maestro y el entrenamiento fue aún más duro, alguna vez quize rendirme.

- tú... - el rubio mal hablado rindiendose, imposible.

- pero tenía un objetivo - lo tomo de los hombros - hace unos meses llegó por casualidad Jiro, o como se llame esa chica con amplificadores en los pies.

- ehh...- estaba algo perdido.

- pues esa se convirtió en espía de los villanos por sus talentos y bueno en una misión fue descubierta, tubo que huir de ese lugar y perderlos de algún modo, llegó a la isla para esconderse y cuando me vio me empezó a contar de los demás compañeros, como si me importaran.

- Kacchan - lo reprendió por ese último comentario.

- luego mencionó que recientemente había muerto All Might y todos estaban alterados, pese a que ya no era el símbolo de paz todos le tenían mucho respeto, pero solo tú estabas haciéndote cargo del funeral, buscando una manera de hacerlo público pero seguro, los villanos podría atacar en pleno evento, mencionó como lloraban todos y los discursos que se dieron en su honor y tú al ser su sucesor fuiste el más frío de todos.

- hable del respeto que le tengo.

- pero no mostraste ningún dolor, ni una lágrima pese a que fuiste el más cercano a él - sabía perfectamente que Deku no tenía una figura paterna en su niñez pero al aparecer All Might este fue como uno para Izuku.

- está bien si lloras ahora, ya no tienes que ser fuerte, yo lo seré por ti - tomo su cabeza y la guío a su pecho.

- pero estoy bien...

- mate a Tomura y no me arrepiento - lo dijo mirando a la lápida - no importa que cosa tan difícil tengas que hacer, si no puedes yo lo haré por tí - acaricio su cabello lentamente.

- yo tenía que matarlo - apretó fuertemente su camisa - era mi deber - comenzó a llorar todo lo no había llorado en su momento, lo estaba liberando en un llanto lastimero.

- lo hiciste bien - siguió con su lenta caricia, sabía lo mucho que trabajo, dedicar un museo exclusivo de All Might requería mucho trabajo y esfuerzo mantenerlo vigente y que ningún villano lo destruyera por venganza, una estatua enorme que supervisó personalmente, el velorio y su seguridad, dar un discurso y más aún mentirle a sus amigos y madre al decirles que estaba bien.

Deku estubo siendo fuerte tanto tiempo que ya era tiempo de que alguien lo cuidará.

Katsuki aún quería más fuerza para protegerlo, pero en ese momento lo nesecitaba más que a nadie en el mundo, por eso regreso.

Ya que él aún tenía miedo, miedo de que los años le quitarán lo siempre se encargó de mantener como suyo, miedo que su amado peliverde amara a alguien más y miedo de no poder remediar el daño que le hizo en sus años de escuela.

Pero dejo todos sus miedos e lado para ir a verlo, para darle un abrazo y decirle que todo estaba bien porque el estaría a su lado.

Dejo que él ojiesmeralda llorara, pues no lo había hecho ni cuando murió, ni en el velorio, ni siquiera al estar solo en su habitación, como cualquier otro lo haría, simplemente se tragó todo su dolor y era una carga enorme que se notaba en su mirada.

Todos estaban preocupados, entrenaba más, trabajaba más, parullaba aún en en sus días libres, no tenía descansos no le daba tiempo ni de ir a hacer las compras por lo que su alimentación ya no era la adecuada.

Poco faltaba para que sus amigos pidieran una incapacidad para el héroe ya que solo lo veían más y más decaído a punto de colapsar de estrés o por su mala alimentación, pero Deku insistía en que está bien.

Había cambiado todo con su llegada, todos notaron el radical cambio en el peliverde desde una sonrisa genuina hasta recobrar su boraz apetito.

Cuando el llanto del menor empezó a ser menos desgarrador, Katsuki desidio decirle algo muy importante.

- Deku, abandonaste el combate, así que soy el ganador y el nuevo héroe #1 - lo dijo con una sonrisa sancarrona llena de malicia ante tal acto, que pese a no ser como lo planeaba, al fin de cuentas era lo que quería lograr.

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Chan chan chan....