Capítulo 16

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Narra Yuuri:

- ¡Vitally! – grité mientras lo sostenía con fuerza entre mis brazos.

Su respiración empezaba a volverse cada vez más pesada. Pasé mi mano por su brazo y hallé el punto de donde provenía la sangre.

Era una herida profunda.

Sentí unas lágrimas de impotencia en mi mirar, pero las regresé a su lugar levantando la cabeza por un par de segundos.

Tomé aire y miré hacia el frente.

- ¿¡QUÉ DEMONIOS QUIERES DE MÍ!? – grité.

Estaba furioso. Me enfurecía muchísimo la situación en la que me encontraba. Estaba harto, ¿por qué me sucedía esto? ¿¡Y por qué eran las personas de mi entorno las que sufrían las consecuencias!?

No era justo.

Yo no merecía pasar por todo aquel embrollo.

Nadie lo merecía

Una risa distorsionada se empezó a escuchar a lo lejos. No era natural, sino más bien... ¿Robótica?

El cobarde que había tratado de matarme con una bala utilizaba un programa de distorsión de voz. Volviéndose irreconocible.

¡Vaya! ¡Cuánta valentía!

Ni siquiera podía ver su rostro, llevaba una máscara y estaba vestido con un saco viejo color negro.

- Eres un malnacido – dije entre dientes. Inhalé profundo - ¡Un auténtico malnacido! ¿¡Me oíste!?

- Fuerte y claro – respondió – Es ciertamente bastante satisfactorio verte sufrir.

- Creo que sería bastante satisfactorio para mí si te fueras directo al averno – dije soltando una risa nerviosa, acomodando a Vitally entre mis brazos – Monstruo.

- ¡Já! ¿Con qué derecho lo dices tú? – dijo a la par que se movía con rapidez.

De un salto llegó al ducto de ventilación que se encontraba en el techo, arrancó las rejillas y empezó a subir ágilmente.

Fue demasiado rápido como para perseguirlo.

Agité mi cabeza de lado a lado. Vitally agarró con más fuerza mi brazo.

- Y-Yuuri – musitó – ¿Estás bien...?

- ¿Qué? – lo miré confundido - ¿Si yo estoy bien? ¡Qué importa eso! ¿Tu estás bien?

- Sí, sí... Solo me siento algo mareado – cerró los ojos lentamente.

- Vitally – lo sacudí - ¡Vitally!

Cogí su muñeca. Aún tenía pulso.

Aún seguía con vida.

Y así tenía que seguir. No pretendía perder a Vitally, no lo soportaría.

- ¡JJ! ¡Jean-Jaques Leroy! – grité con todas mis fuerzas - ¡Necesito un médico! ¡Es una emergencia!

- Yuuri, ¿qué diantres sucede? La gente arriba dice – dejó de hablar en el mismo instante en el que vio a Vitally – Llamare a una ambulancia – salió con paso apresurado y su celular en la mano.

Me quedé en shock por unos segundos. Todo había sido tan rápido...

Luego reaccioné. Sacudí bruscamente mi cabeza de lado a lado y miré al techo por unos instantes.

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