×Love Revolution× {RoChan}

XXIV

Había unido sus labios con los míos, estaba en shock por que no sabía que hacer exactamente.

Youngbin me estaba besando y el aún no se daba cuenta que yo ya había despertado.

La puerta de la habitación donde Chani se encontraba se abrió, sin ninguno de los 2 darse cuenta.

El doctor estaba viendo unos papeles mientras ingresaba a la habitación sin aún notar lo que Chani y Youngbin estaban haciendo.

—Chani, ¿cómo sigue—sólo escuché como los papeles cayeron al piso y rápido Youngbin se separó de mi.

Esto no podía estar pasandome, ¿Por qué precisamente tu tenías que ver esto?

Efectivamente, Rowoon se encontraba parado al otro extremo de la habitación mirando lo que acaba hace unos segundos de suceder y yo no había evitado que sucediera, ahora se habían arruinado las cosas y era toda mi culpa.

No sabía como sentirme ni que decir o hacer. Youngbin únicamente permanecía parado a un lado de mi sonriendo, ¿Por qué demonios esta sonriendo?

—Ro-Rowoon, y-yo —ni siquiera podía decir nada. No buscaba la forma de explicar lo que acababa de pasar.

— ¿Podrías salir de la habitación Youngbin? —habló Rowoon. —Yo se que eres doctor también, pero estoy a cargo de Chani, así que por favor, ¿puedes salir un momento ya que quiero revisar a Chani? —dijo Rowoon serio.

Era un tono serio pero no como si estuviera molesto, sólo era serio.

Youngbin asintió, me miró y me sonrió, para después abrir y salir de la habitación. Rowoon únicamente levantó los papeles que anteriormente se habían caído y comenzó a acercarse a mi para revisarme.

—Ro-Rowoon—hablé pero Rowoon parecía no escuchar o querer responder. —Lo-Lo siento. —Rowoon únicamente comenzó a hacer los chequeos requeridos y necesarios. —Ro—el estaba tomando mi temperatura con el termómetro y haciendo anotaciones en los papeles.

Tomé su mano, el sólo me miró y quito su mano de mi agarre.

—Chani—habló y yo lo miré fijamente para ponerle atención. —Todo está bien, ya puedes irte. Toma tus cosas y regresa a clases si gustas, si no puedo firmarte un permiso para que vayas a tu casa. —me miró esperando una respuesta mía.

—Y-Yo quiero irme a casa por favor. —hablé para después observar como Rowoon comenzaba a escribir. Me acerqué a el y comencé a acortar la distancia que había entre los 2. —Ro, ¿Podemos hablar? —tomé de nuevo su brazo y posó su mirada en mi. —Mira, pu-puedo explicar lo que acaba d-de pasar. —hablé y el únicamente permaneció callado. —Y-Yo estaba despert—un celular comenzó a sonar.

Rápido Rowoon se soltó de mi agarre y saco su celular para contestar la llamada que hacía su celular sonar.

Suspiré y me volví a sentar en la camilla que anteriormente había utilizado para dormir, y sólo mantenía la cabeza agachada mientras Rowoon hablaba por teléfono.

—Chani—escuché como Rowoon me habló y rápido me bajé y lo miré a los ojos.  —Aquí tienes el permiso para irte a casa, sólo entregala a todos tus profesores y podrás retirarte. —habló mientras entregaba una hoja. —Debo irme, acaban de llamarme por una emergencia. —dicho eso estaba a punto de salir pero lo de la mano y el detuvo sus pasos, pero no volteó a verme.

Caminé para colocarme entre la puerta y el y el me miró. Aún no soltaba su mano y el permanecía mirándome seriamente. Lo tomé del cuello de la bata que traía puesta y lo acerqué a mi, cuando estaba a punto de besarlo se separó de mi agarre evitando que lo besara y salió de la habitación.