9

5.4K 466 282
                                    


Ah decir verdad, me esperaba todo menos esto. Sulgi sentada a mi lado, platicando sobre sus vacaciones en alguna parte de Europa y no se que más, de seguro me está contando la cantidad de zapatos que adquirió en su viaje. Me pregunto si alguna vez cerrara la maldita boca, esta peor que un loro.

―Y así fue como terminé comiendo un helado con ese guapo chico francés.

El silencio llega y no puedo estar más que agradecida, un poco más y terminaba tirándome por la ventana.

―uh, se ve que te divertiste.

―No sabes cuanto ―sonríe y saca un chicle de su mochila, me ofrece pero niego― extrañaba mucho Seúl e incluso la escuela.

En otra dimensión, estaría tal vez siendo atacada por la dulce chica que tenía sentada a mi lado. Me imaginaba que su regreso sería mi peor infierno, y es que... por alguna razón desde que entramos a estudiar juntas ella me ha tenido un odio terrible. Si amigos, sufrí bullying durante bastante tiempo, a causa de la sulgi, por eso, cuándo la vi pisando mi libro de química, pensaba que daba inicio a un agujero negro en mi vida, pero me equivoqué.

Fue ella quién me ayudó a levantarme y recoger todos mis libros, me pidió sentarme con ella en clases y aquí estamos.

―Estás muy callada, ¿pasa algo?

La miro extrañada y me viene el vomito verbal. Le quiero gritar que si no tiene amnesia o se está haciendo la estúpida, tremendo calvario que me hizo pasar los primeros años, se va y pienso que todo mejorará pero regresa y actúa como si nada hubiese pasado. Me está empezando una terrible jaqueca en este momento.

―No es nada.

Por suerte el maestro llega y no volvemos a cruzar palabra alguna.

---

Tocaba la clase de deporte, favorita de pocos y odiada por muchos, en lo que a mi respecta amaba esa clase, quemaba las energías acumuladas y competíamos con otros compañeros cuándo jugábamos algún deporte.

Busco a Sunmi por todos lados pero no la veo, de seguro está en enfermería inventándose algún dolor para no asistir a esta clase.

Me encamino a la cancha y veo al maestro chow con balones de baloncesto en sus manos y algunos tirados en el suelo. Ya sabía que deporte jugaríamos hoy.

―Bueno alumnos, como pueden ver hoy jugaremos baloncesto, así que formen equipos.

Todos hacen ruido, ya que no querían jugar y pensaban en sobornar al maestro con unos wons para librarse de la actividad. Pero casi nadie trajo dinero, así que de mala forma armamos equipos.

―Yun, se la capitana, tu eres la que mejor juega de nosotros.

Asiento en respuesta y me voy al centro de la cancha. El otro equipo sigue discutiendo, pero observo que eligen a Sulgi como líder, esto se pondrá interesante.

―Bien, eligan, ¿cara o cruz?

―cruz ―digo y sulgi elige cara. La moneda es lanzada al aire y cae cara, dibujo una mueca.

―suerte ―digo y extiendo mi mano, ella duda pero acepta sonriendo enormemente.


Han pasado unos 20 minutos en el que hemos estado jugando y vamos empatados, realmente las que están haciendo el mayor trabajo en cada equipo es Sulgi y yo, los demás se mueven más lentos que un caracol.

Reboto el balón e intento encestar pero ella me empuja y caigo al suelo, el maestro no marca falta y la chica encesta libremente.

Choca los cinco con los demás y damos por terminado el partido.

Bad Boy. M YoongiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora