Pieles

Lo extraño

Cada día se hacía más difícil. Estar sin él dolía demasiado.
Mis amigas me decían que ya pasaría, que ya estaba, que debía superarlo... Pero ¿Cómo lo supero? Era imposible para mi.

No puedo contar las veces que me dormí llorando, extrañandolo, sin poder hablarle, sin poder recurrir a él. Habían pasado tres meses sin saber de él.

Esa noche recibí una llamada al teléfono de mi casa, y como papá no estaba, yo atendí:

- ¿Hola?

- Val...- dijo Jasir- Amor...

- ¿Jasir? No deberías llamar aquí...

- Lo sé, pero te extraño tanto... Necesito verte.

- No podemos hacer esto...

- Solo un momento, necesito verte, necesito comprobar que estás bien, por favor...

- La última vez casi vas preso amor, por favor no hagas esto...

- Dime amor de nuevo e iré corriendo hasta dónde estás.

- Te extraño mucho, pero no quiero que te arriesgues por mi.

- Solo un momento linda, por favor...

- ¿Qué tienes en mente?

- ¿Puedes llegar a los almacenes de Cromsey?

- Pero... están cruzando toda la ciudad...- lo pienso un momento- Bien, intentaré llegar, pero no ahora, si mi padre llega y no me ve me matará.

- Sé que es lejos pero es el único lugar donde no tendremos problemas... ¿Cómo a las 10 de la noche podrás llegar?

- Sí, ahí estaré.

- Bien amor, estoy ansioso por verte.

- Yo a ti cariño, nos vemos.

Espero a que llegue mi padre y cenamos, cuando él se va a dormir me voy a mi habitación y busco dinero y mi celular.
Salgo por la puerta de la cocina y trepo la cerca del patio, camino 10 cuadras hasta la estación de subterráneo.

Me tomo tres subterráneos diferentes y camino casi un kilómetro antes de llegar al lugar, pero todo vale la pena porque cuando veo a Jasir se me pasa todo. Corrí hacia él y lo abrazo:

- Dios, ha pasado tanto tiempo...- digo.

- No paré de pensar en ti en todo este tiempo.

- Te extrañé muchísimo.

Él me besa despacio, y siento que no quiero irme nunca de aquí, no quiero irme nunca de donde esté él.