Pov's Leah.Las cosas no han mejorado nada, la distancia y la indiferencia me están matando. Trevor me llama dos veces al día para saber como estamos y ya. Sus demás peleas son en otras ciudades y por la Universidad no puedo viajar hasta ellas para acompañarlo e igual para qué si está conmigo en esa actitud. Ha sido difícil todo este proceso sola, pero sé que todo mejorará. Se que ha estado muy pendiente, ya que llama a mi mamá y a Rachel otras veces en el día para saber como estoy, cosa que me parece muy tierna, pero odio su estúpido orgullo. Él sin duda me ganó en eso.
Miro con una sonrisa la pequeña ropa de bebé que tengo en mis manos, ya tengo ganas de tener a mi bebé. Ya me han estado regalando ropa y algunas otras cosas.
— Hija, alguien ha venido a verte.- Dice mi madre de pie en la puerta de mi habitación.
— Hola, Leah.- aparece Trevor.
— Los dejaré solos para que hablen.- guiña un ojo.
— Hola ¿No deberías estar en Las Vegas?- Pregunto mirándolo.
— Si, pero salimos en dos horas.- Responde mirando la prenda que tengo en mis manos.— Vengo para que hablemos, ya es hora.
— Si, ya es hora de madurar.- respondí molesta.
— No empieces, Leah.- Espeta con la mandíbula apretada.— He venido a dialogar, no a pelear.
— Es cierto, tienes razón.- solté un suspiro.— Mira, como ya te lo dije, no sé que pasó Trevor, siempre he tomado la pastilla, no recuerdo haberla olvidado.- lo miro a los ojos.— Sé que no quieres tener hijos, yo sí, pero no en este momento, sin embargo, no tenemos de otra, ya hay que aceptarlo. Si no quieres estar más conmigo lo entiendo, pero sólo te pido que si te vas a quedar conmigo, lo hagas porque realmente quieres y no por obligación.
— No me quedaré por obligación, Leah, lo haré porque te amo y...- vociferó y mira a otro lado apretando la mandíbula.— Porque en algún momento querré al bebé tanto como tú ya lo quieres.- me mira fijamente.— Solo que aún necesito asimilar esto.
Asiento y suelto un suspiro mirando la prenda.
— Ahora, alista tus maletas que te vas conmigo.- toma asiento en mi pequeña cama.
— ¿Qué?- Pregunto confusa.
— Irás conmigo a la semifinal.- me mira con una pequeña sonrisa.— Hablé con tu profesor y por tus buenas calificaciones, te exoneró del examen final, pero sí tienes que entregar el proyecto.
— ¿Hablas en serio?- Pregunté emocionada y él asintió. — Gracias.- Dije abrazándolo con evidente emoción.
Me separé y fui por mi maleta. Una hora más tarde ya estaba lista, así que salimos de casa y fuimos camino al aeropuerto donde ya estaba su familia. Esta vez viajaremos en un jet distinto, es más grande. Perfecto para todos los que vamos.
ESTÁS LEYENDO
Dulce Tormento. [EDITADA]
RomantizmEDITADA CON ALGUNOS CAMBIOS Para las antiguas lectoras, les cuento que está novela ha sido editada y cambié y/o agregué algunas cosas. Espero les guste mucho. Pd: perdóname si se me escapó algún error. ••• - Ve a hacerle el amor a aquella modelo...