Dulce Tormento. [EDITADA]

•Capítulo 20

ANTES QUIERO ACLARAR ALGO. TREVOR NO ES STEPHEN JAMES, ES DESCRITO A MI IMAGINACIÓN.

Pov's Leah.

Me mostró de una manera que nunca nadie lo había hecho, que le importo, que siente algo por mí, que no soy solamente un cuerpo para él. Con su cuerpo, sus caricias, sus besos y sus palabras me hizo sentir querida, deseada. Pero tengo miedo, no creo en los hombres mujeriegos, me es muy difícil. La verdad no sé mucho de amor o quizá nada, las últimas semanas he pensado mucho en ello, reflexionado que cómo decimos amar cuando odiamos a ciertos tipos de personas o somos indiferentes con el vecino. Creo que el amor no solo se demuestra en la cama, es más, es algo que cualquiera puede fingir, así que esto en realidad no demuestra ni la cuarta parte del amor.

— Dame la oportunidad.- Susurra contra mis labios.

— Déjame pensarlo.- respondí mirándolo.

Sus penetrantes ojos casi negros me miran profundamente con miles de emociones.

— Está bien, ángel.- Habló derrotado.— Pero piénsalo muy bien, nena.

— Lo haré.- asentí.

Besó mis labios por última vez y se salió de mí. Me acosté de lado y Trevor me abrazó por detrás y acaricia mi abdomen.

— Estoy gorda.- vocalicé con un poco de vergüenza de que toque la barriga que me estaba saliendo.

— Claro que no.- Dice y deja un beso en mi mejilla.— Es la pancita más sexy que he visto.

Aquello me hace reír y produce un cosquilleo en mi estómago. Es tan tierno cuando se lo propone.

— Me tengo que ir, pero en la noche te llamo ¿Te parece?- deja de abrazarme y se levanta de la cama.

— Si.- me senté tapándo mi desnudez con la sábana.

— Nena, conozco tu cuerpo de arriba a abajo y de abajo arriba, me lo sé de memoria.- Enfatizó con una sonrisa socarrona.

Siento caliente mis mejillas y quito la mirada.

— Aún no me acostumbro a estar desnuda frente a ti.- volví a mirarlo.

— Pues pronto te acostumbrarás, porque sé que serás mi chica.- se inclina y deja un último beso en mis labios.

Después de vestirse se va y quedo sola en mi habitación con miles de emociones y preguntas.

•••

Entro con Rachel y Nat a la tienda de tatuajes mientras me reprochan por no decirle que sí a Trevor.

— Eres una tonta.- me reprende Rachel.— Desde el primero instante le hubieras dicho que sí después de como te ha tratado.

— Si, y lo de la pancita más sexy es tan tierno.- Habló Nat emocionada.