Los Misugatos

Capítulo 14

En el castillo de Cebeles, los sirvientes y los invitados, se encontraron a Fausto.

—¿Quieren que yo pelee con Enchanted, con la finalidad de ayudar a salvar al traidor de Domicio Di Angora? —dijo Fausto.

—Si Fausto, para eso te estamos buscando —dijo Khamal.

—¿Y no hay otra cosa en que yo los pueda ayudar? —dijo Fausto.

—No, ¿Acaso no quieres ayudarnos? —dijo Khamal.

—No, lo digo porque yo combatí los ejércitos de los líderes de cristal, acabé con el Gato Negro y su tiranía en el planeta amarillo, ayudé al príncipe Rosseau, al príncipe Damian y a su hermano Phillip, y ahora... los ayudaré en derrotar a Enchanted —dijo Fausto.

—Si pelearas con Enchanted, debes saber que él tiene el poder del Gato Blanco, Negro y Rojo, y del Gato Morado —dijo Khamal.

—Ya lo sé, Khamal, sé que tiene sus poderes, pero no me da miedo enfrentarlo. Lo haré lo más rápido posible, para estar con Dolly —dijo Fausto.

—Entonces tendrás que venir con nosotros, porque no me agrada este calor... No sé porque yo tenía que venir a buscarte al castillo —dijo Khamal.

—Deja de quejarte Khamal, pareces un viejito que se queja de todo —dijo Fausto.

—No te burles, y no me digas "viejito" —dijo Khamal.

Mientras Silvestre, Apolo, Khamal y Fausto regresaban al castillo, Enchanted hizo algo muy malo, pero esta vez fue en Catskill, porque el rey Cebeles organizó una fiesta de bienvenida a Fausto; ya que Fausto no veía a su padre desde que era un gato joven, —no es que Fausto no sea joven, ya que este gato tiene mil años—, por suerte, Dolly, la novia de Fausto, vio que Enchanted quería envenenar al rey, pero cuando ella se dio cuenta, se lo dijo a los guardias, salvando el día.

—Bienvenido Fausto —dijo Coti.

—Gracias, y ¿dónde está mi padre? —dijo Fausto.

—Está en el jardín... Si quieres, te digo dónde está Dolly —dijo Coti.

—¿En serio?, dime por favor —dijo Fausto.

—Ella está en la casa del árbol. Es mejor que nadie los moleste, ya que tú te mereces estar con ella después de tantas batallas en el espacio —dijo Coti.

Fausto fue corriendo, su corazón palpitaba cada vez más rápido, quería ver a su novia y a su padre, ya que para él, Dolly es especial... Fausto llegó a la casa del árbol y cuando él vio a Dolly, este le avisó.

—Dolly... Dolly, estoy aquí abajo —dijo Fausto.

—¿Fausto? —dijo ella.

—Si Dolly, soy yo, ven aquí, dame un abrazo querida —dijo Fausto.

Dolly bajo rápido y loabrazó muy fuerte... Y también le dio unos cinco besitos en... pues en los labios,ya que son novios.