Excursión en el bosque

719 39 48
                                    

Julián, Ellie y Dina se ofrecieron para una excursión en los bosques de Jackson City, Joel dijo que estaba un tanto cansado así que dejo que ellos fueran.

¿Qué dicen los satélites Ellie? – pregunto Dina a la pelirroja que se encontraba alzando un GPS.

Ahora absolutamente nada – respondió la otra chica – Perdí la señal.

Julián harto de esperar bajo del 4X4.

Ey, ¿Saben que cosa nunca pierde su señal? – pregunto el pelicastaño, mientras sacaba algo de sus bolsillos – El papel.

Ambas se acercaron a él, mientras Julián apoyaba el mapa en el capo del auto.

Bien, esta ruta de aquí nos llevaría directo a lo que solía ser un puesto de vigilancia – señalo el pelicastaño – Esperemos que no haya nadie, ni cazadores o infectados.

Pongámonos en marcha – propuso Dina, mientras se subía en la parte de atrás del 4X4.

Bien – acepto Ellie, subiéndose de copiloto.

Muy bien – acepto también Julián, encendiendo el vehículo, comenzando a conducir.

Conducían a través del bosque, era un día caluroso, pero lo bastante agradable como para salir a incursionar.

Marcas de neumáticos, estas frescas – señalo el pelicastaño – Alguien ya pasó por aquí.

¿Y como consiguieron este auto? – pregunto Dina.

Julián insistió en conseguir una 4X4 con malacate – respondió Ellie.

Así que preferiste el malacate en vez de la suspensión – dijo la pelinegra – Entiendo.

Ey, es importante, fuera de la carretera el camino puede estar enlodado como hace poco – se defendió el chico.

Apostaría que pasaremos por todo esto sin usar ese estúpido malacate – dijo Ellie en un tono enojado.

Luego de seguir recorriendo, llegaron a un camino con una pendiente muy inclinada que, en un intento por subir, el lodo no los dejo pasar, el pelicastaño se bajo del vehículo agarrando el malacate y subiendo por el costado de la pendiente que no tenia lodo y lo engancho a un árbol y gracias a este pudieron subir.

¡Ja ja! Lo ves Ellie, malacate totalmente útil ¿no? – dijo triunfante el pelicastaño.

Una pendiente menos – respondió ella – Aunque todavía no ganamos nada, es raro que aun no hayamos visto a nadie.

¡Mierda detente! – pidió Dina de repente, viendo a lo lejos unos cazadores - ¡Veo personas!

Los veo – dijo Julián, viendo a través de unos binoculares – Matones merodeando.

- ¿Son Cazadores?

- si.

- Con un demonio.

Hallaron un viejo puesto de vigilancia – dijo el pelicastaño, dándole los binoculares a su pareja.

¿Militar no? – pregunto ella.

Eso parece – respondió Dina.

- Eso es bueno, lo malo es que...

- Esa es el único camino que podemos recorrer.

¿Cuál es el plan Julián? – pregunto la pelinegra.

Solo síganme – pidió el pelicastaño, avanzando un poco y estacionando el auto detrás de unas rocas para que no sea detectado.

El trio avanzo lentamente por el costado para ver a 2 bandidos charlando entre ellos.

Una historia del The Last of UsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora