Luego del capítulo anterior a Ellie, Dina y Julián partieron a otra incursión, esta sin embargo salió bastante mal, ahora los 3 se encontraban huyendo de un grupo de infectados.
¡Sigue corriendo! – pidió Ellie.
El trio se vio detenido por el río de Jackson, a lo lejos pudieron ver un tronco que les podía servir como puente. La pelicastaña llego primero, cuando empezó a atravesarlo, este comenzó a crujir hasta que se partió en 2, haciendo que Dina quedara al otro extremo del rio.
¿¡Que hacemos!? – pregunto angustiado el pelicastaño.
Prefiero el rio a que los infectados – respondió Ellie antes de saltar al agua.
¡A la mierda! – grito Julián también saltando al río.
La fría agua los hizo reaccionar inmediatamente para emerger a la superficie.
Julián sin querer se volteo para divisar a su pareja moviéndose gracias a la corriente.
¡Julián! – grito la pelirroja, intentando no tragar agua - ¡Vamos al otro extremo!
El pelicastaño, llego hasta Ellie tomándola del brazo y con el otro intentaba acercarse hasta la otra superficie.
¡Cuidado! – grito Dina, al ver una roca a punto de chocarlos.
¡Oh mierda! – grito Julián mientras envolvía los brazos en su Ellie para que el recibiera el impacto.
El impacto contra el risco no fue tan fuerte salvo que hizo que el pelicastaño aflojara su agarre.
¡Agarren esto! – pidió la chica del otro extremo lanzándoles un gancho con cuerda.
Ellie lo tomo con todas sus fuerzas intentando estabilizarse, pero el torrente no se las ponía nada fácil.
¡Julián! – grito la pelirroja - ¡Dina aguanta!
¡No lo sueltes! – pidió Julián también.
Cuando finalmente lograron llegar al otro extremo, empezaron a trepar las raíces que estaban al costado del rio, lastima que cuando estaban a punto de alcanzar tierra firme, las raíces cedieron dejando caer al pelicastaño nuevamente al rio esta vez sin oportunidad de salir.
¡Julián! – grito Ellie, a punto de saltar al agua, pero Dina la detuvo.
No dejes que su perdida sea en vano – razono la chica, antes de comenzar a correr.
Ellie muy angustiada la siguió sin mirar atrás.
Mientras el agua lo seguía arrastrando, el pelicastaño comenzó a recordar toda su vida, su madre, su padre, su hermana, todo eso pasaba por la mente de Julián quien inconscientemente comenzaba a cerrar los ojos listo para aceptar su destino.
Hasta que recordó que aun tenia a Joel y a su pelirroja así que con todas sus fuerzas emergió hasta la superficie, tomando una gran bocanada de aire.
Al mirar sus alrededores, la corriente ya se había calmado, junto a el paso un pedazo de madera lo suficientemente grande para mantenerse a flote.
¡Aquí vamos! – suspiro calmado Julián.
El cansancio se apodero de él, logrando que sin querer cerrara los ojos encima de la madera.
Cuando volvió a recuperar el conocimiento. Todo estaba tranquilo, apenas iluminado por una fuente cálida de luz y el olor a leña quemada. Rápidamente Julián se tocó el pecho dándose cuenta de que no tenía el anillo de su papá.
ESTÁS LEYENDO
Una historia del The Last of Us
PertualanganLa historia del The Last agregando un personaje a la historia.