Sentimientos confusos ~Snily~ (TERMINADA)

19- Competencia en Hogwarts

Estaba amaneciendo y el sol entraba tímidamente por la ventana.

Lily abrió los ojos pestañeando varias veces para no hacerse daño en la vista. Notó un cuerpo a su lado y recordó dónde estaba.

Le miró con cariño y le dio un beso en los labios.

-Buenos días. -Dijo mientras le despertaba sonriendo.

Él abrió los ojos casi de inmediato y la miró con una mirada llena de felicidad.

-Buenos días, Lily.

***

Cuando Lily salió de la ducha con su ropa bien alisada, se encontró a Severus ya vestido y preparado para ir a dar sus clases.

Ella le miró con una ceja alzada y poniendo los bazos sobre sus caderas. Severus no comprendía qué le sucedía.

-¿Qué pasa?

-¿Qué haces vestido? ¿A dónde crees que vas?

-Trabajo aquí. ¿Recuerdas? -Sonrió confundido.

-Necesitas reposo. ¿Recuerdas? -Le dijo ella mientras se acercaba y le cogía del brazo llevándole hasta la cama.

-Lily, estoy perfectamente y no voy a cancelar ninguna clase.

-No hace falta. Ya avisé ayer a Dumbledore, y Remus dará la clase en tu lugar hasta que te recuperes.

-¿Qué? Pero...

-Sin peros que valgan. -Dijo ella muy seria. -Cuando acabe vendré a verte y haremos lo que quieras. Mientras, túmbate y descansa, por favor.

Su semblante se relajó y le acarició la cara, a lo que él contestó quitándose la capa y suspirando.

-¡Gracias! -Le sonrió y le dio un beso en la comisura de los labios. -Te veo luego, Sev. -Dijo antes de cerrar la puerta y desaparecer tras ella.

Severus se tumbó en la cama exhalando otro suspiro largo. ¿Qué hacía ahora? No tenía sueño y no podía salir de ahí...

Decidió sentarse en el escritorio de su despacho y escogió un libro para leer, y así, pasar la mañana.

***

James caminaba en dirección a la enfermería a visitar a su hijo cuando se encontró a Lily por el camino.

Salía de su primera clase del día.

-¡Buenos días! -

-¡Buenos días, preciosa! -James le sonrió y ella se ruborizó. -Voy a ver a Harry a la enfermería. ¿Quieres venir?

-Me encantaría pero no puedo. Tengo clase con los de segundo y si no me doy prisa llegaré tarde. Dale un abrazo de mi parte y dile que luego le veré. -Terminó de hablar mientras se alejaba con una sonrisa y despidiéndose con la mano.

James la miró alejarse con una sonrisa en los labios.

Le seguía pareciendo tan bella... Se culpaba por haberla dejado marchar como si nada, pero le encantaba verla feliz.

Siguió caminando hasta entrar en la enfermería y ver a Harry durmiendo.

Le despertó y ambos se quedaron un rato hablando hasta que decidieron ir a dar un paseo al jardín.

La señora Pomfrey no estaba muy convencida, pero como era bajo la tutela de su padre, aceptó.

No podía apoyar demasiado el pie, y decidió llevar unos artículos muggles llamados "muletas", que Arthur Weasley le trajo. Claro que él, ya sabía lo que eran las muletas.